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Al llegar al club de baile, lo primero que pensaste fue:
Como carajos salgo de aquí.
Viste como una chica con todo su pecho así descubierto en frente de Stuart, el cual mantenía sus ojos en la pantalla del móvil, lo cual te aliviaba, pero era claro que no iba a durar mucho y no lo hizo, cuando levantó su mirada, obligado por Nick, sus ojos se posaron en los senos de la bailarina por un momento, hizo una mueca de disgusto cuando la mujer tomó su mano y rápidamente la alejo, miró al suelo negando y dijo.
—No es mi estilo —hablo y volvió a mirar la pantalla de su celular. Sonreiste sintiendo tus músculos relajarse, no eras consciente de lo tensa que estabas hasta ese momento.
—Bien, no es tu estilo pero el de estos chicos si —la muchacha tomo las manos de Lyle y Yo-yo y se los llevo a alguna mesa, tras ellos Billy iba muy divertido.
Nick volteo a Neha y mantuvieron una corta conversación en la cual, tu amiga fue muy segura a divertirse un rato y por fin fue tu turno, el mayor te miró esperando alguna señal y al no obtenerla empezó el.
—¿Seguirás el ejemplo de Neha o el de Stu? —dijo bromeando.
—No me llames Stu.
—Yo creo que este no es mi ambiente, ¿le dices al resto que los veo mañana?
—Claro, nos vemos niña. —Nick se fue a ver a Yo-yo el cual estaba muy quieto para estar en un bar.
Voltearse a Stuart, el seguía sumido en su pantalla y muchas de las miradas de las mujeres estaba sobre el, y eso te molesto, aun que no eran novios, tenían algo y ver como el resto de las mujeres se comía con la mirada a tu algo era molesto.
Le arrebataste su celular de golpe, ganandote que el chico te mirada confundido y con el ceño fruncido, luego tomaste su mano y salieron de ese lugar. Al cruzar la puerta el ruido se opaco y el fresco aire los envolvió.
—¿Todo en orden? —dijo sin soltar tu mano, y viniendo de Stuart, era algo sorprendente ya que detestaba el contacto humano pero contigo la cosa era distinta.
—Ahora que lo mencionas, no. —dijiste volteando
—¿Por qué? —dijo más confundido.
—Porque eres jodidamente atractivo —le dijiste acercándote —. Atractivo y todas esas... mujeres... no te quitaban los ojos de encima.
—Ya veo —dijo sonriendo levemente—, ¿y tu crees que todas ellas llaman mi atención?
—Pues teniendo es cuenta que sus pechos estaban prácticamente al aire...
—No me interesan —te corto, te atrajo a su pecho y su mano izquierda fue a parar en tu cintura, con la derecha, acomodaba un mechon de cabello tras de tu oreja y tus manos estaban en sus hombros —. De hecho la chica que me interesa esta frente a mi.
El acerco su rostro al tuyo y luego sus labios se unieron a los tuyos, sus labios eran suaves y cálidos, el beso era tierno y lento. Su mano derecha se aferro a tu nuca, acercándote más a el y tu por otro lado, jugabas con los cortos cabellos de la parte inferior de su cabeza.
Al pasar los minutos, la falta de aire se hizo presente y tuvieron que separarse, pero sonreíste cuando dejó un pequeño beso en tu labio superior. Miraste directo a sus ojos, esos lindos ojos cafés.
—Te quiero —dijo mirándote fijamente.
—Yo también te quiero, Stu —le dijiste rozando la punta se sus narices.
El volteó sus ojos ante el apodo, pero sabias que no le molestaba, de hecho le gustaba como lo decías así que solo fingía odiarlo.
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