I missed you

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Grace Holbrook

Me desperté después de sentir el movimiento de la cama, busque a Allan pero no estaba. Mire rápidamente y lo vi abrir la puerta del baño de mi habitación y me relaje al instante.

-Pensé que me había abandonado cuando dormía- dije mezclado con un bostezo.

-Pensaste que te abandonaría tan cruelmente, esto no es un libro de amor imposible.

-Entonces no serás el príncipe azul en un corcel blanco listo para pelear con el malo por amor.

-¿Te contaron muchos cuentos de hadas de chiquita no?- preguntó con el ceño fruncido y los brazos cruzados.

-Si, y yo seré la princesa en el castillo encantado no te parece.

-Que tal si te cuento una historia.

-Señor Roosevelt ahora se convirtió en narrador, y dígame de que historia hablamos.

-De una de la cual estoy seguro que nunca te habían contado.

-Me intriga, por favor prosiga.

-Erase una vez una preciosa mujer que vivía un pequeño pueblo con su hermana y sus padres, ella no era como las demás era jovial, perceptiva y muy inteligente. Una vez sus padres la sorprendieron, habían reunido el dinero suficiente para que tomara sus estudios y tuviera en carrera y por fin logrará su sueño de convertirse en maestra algo no tan común en la época.

<<cuando se fue a estudiar tuvo un accidente cayó de unas escaleras y se quebró las dos manos, pero un chico la ayudó y llevó al hospital. Él la siguió visitando y incluso ayudándola con su recuperación y sus estudios. Tiempo después se casaron. Con ambos padres de acuerdo tendrían una vida de felicidad juntos. Seis meses después ella se entero que estaba embarazada y crearon una hermosa familia. Un día salieron a un evento. Estaban muy emocionados por pasar tiempo a solas el bebé exigía mucho tiempo, lo que no sabían es que sería su última noche. Se divirtieron mucho y cuando fue media noche emprendieron rumbo a su casa. Esa noche habían bebido mucho y de pronto en empezó a llover muy fuerte se acercaba una gran tormenta. Perdiendo mucha visibilidad y los caminos eran peligrosos y por desgracia del destino perdieron el control del auto y se estrellaron. Nadie se entero hasta el día siguiente que auto paso por la zona, pero ya era muy tarde para ellos. Murieron en el lugar- siguió contando.

-Eso Grace es solo una muestra que los cuentos de hadas no existen el destino es muy cruel con cualquiera no importa si eres malo o bueno.

-¿Esa es la historia de tus padres? - pregunté algo Asombrada de la trágica muerte.

-Si, y por eso valoro cada minuto que te tengo conmigo.

-Es algo tarde no te quieres quedar a dormir- cambie de tema por que la verdad la muerte no era mi tema favorito.

-No Grace mañana tengo que trabajar y dormir en tu casa con tu madre a unos metros no me llama mucho la atención.

-OK pero dame un beso de despedida vale.

Se acercó lentamente y me beso con la mayor delicadeza. Fue y beso dulce y especial de esos que se quedan es tu memoria para siempre.

Allan salió por la ventana y me procure de cerrar bien la ventana para que nadie sospechara.

En un momento el sueño me ganó y volví a dormir.

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-¡Grace despierta!.

Escuche el grito de mi madre los golpes de la puerta.

-¡Grace!

-¡Ya voy madre!

Los fragmentos de un amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora