UNO

836 111 8
                                    

Un rayito de esperanza 🌻

Las lágrimas bajaban por su rostro en diferentes direcciones, aún si se encontraba boca abajo sobre su cómoda y amplía cama, su sollozos eran apenas amortiguados por la gran cantidad de almohadas. Estaba harto, cansado de obtener la misma respuesta, parecía estar inmerso en una de esas horrorosas pesadillas que se repetían constantemente, nunca paraba de lastimarlo, de atormentarlo.

Una gran cantidad de pastillas estaban regadas por la habitación, pues en un ataque de rabia había hecho aquel desastre, porque él era fértil, no tenía porqué tomar esas pastillas, no debía estar pasando por esta situación y se sentía realmente mal, molesto con su parte lobuna, la cuál no dejaba a TaeHyun fecundar.

Débil, asi se sentía, era el sentimiento de alguien que se había rendido, que ya no esperaba que algo sucediera

Levantando su mirada se encontró con la tabla que le había dado el médico hace un tiempo atrás, en ella se mostraba sus supuestos días fertiles, basados en su ciclo de celo, el cuál era muy regular y se desarrollaba de forma normal, es decir, no debería haber problemas de fertilidad, TaeHyun tampoco los poseía, todo radicaba en él y su parte lobuna, una parte que se encontraba tan inconforme que estaba dispuesta a negarle un cachorrito.

Sintió unas manos acariciar su espalda pero ni siquiera se sobresaltó, aquellas lo tomaron haciéndolo sentarse y los brazos lo rodearon en un abrazo, unos labios besaron sobre su cabeza.

—Te he dicho que no importa —la voz de TaeHyun y su nariz paseandose lenta y cariñosamente por por su cabello lo hizo sollozar de nueva cuenta—. Eres mi omega yo...

—¿De que sirve tener un omega que no puede darte hijos, hyung? —respondió, interrumpiendo su discurso, su voz quebrada causando un efecto en TaeHyun, se sintió triste por su omega— Dime hyung.

El mayor dejó que este se recostara sobre su hombro y su mano se paseó por toda la extensión de su espalda, esperando que el silencio le ayudara a encontrar la respuesta correcta y contundente a las afirmaciones de su omega.

—Te das cuenta de que los omega no son simples incubadoras ¿verdad?—
contestó suavemente, no queriendo ser brusco al comentar las cosas— no me gusta cuando hablas así, el ser omega no implica que solo sirvan para hacer los deberes del hogar y engendrar hijos, tú me lo demuestras cada día cuando sales de casa a trabajar en el lugar que amas, cuando luchas para obtener lo que quieres, cuando no dejas que tus debilidades te superen, ¿que pasó con mi BeomGyu?

—Ese murió el día que la última prueba dio negativo —comentó con voz monotona, estaba cansado de llorar y llorar—. Se dio cuenta de que por más que luchara nunca estaría completo.

TaeHyun suspiró cansado, él realmente no sabía consolar a absolutamente nadie, era más probable que aquella persona se sintieta peor luego de hablar con él, pero esta vez se trataba de su esposo, el cuál se estaba deprimiendo por algo que a él también le afectaba, pero que de ninguna manera cambiaba la forma en la que veía a BeomGyu, con ojos de amor.

Su mano buscó la de su omega y cuando la tuvo entrelazó sus dedos y la apretó, el contraste de sus pieles pálida y morena era tan etereo que lo hizo sonreir aún cuando no era momento para hacerlo.

—Ciertamente ahora no está el omega juguetón que conozco —dijo buscando sus ojos los cuales transmitían aquella tristeza que todo su cuerpo contenía- no sé que palabras decir para hacerte sentir mejor, para hacerte entender que no eres menos que nadie por no lograr quedar embarazado y que esto que estamos pasando no significa que te ame menos, no Gyu, que no puedas concebir no te hace estar incompleto, un bebé no es solo un objeto de satisfacción para una pareja, no es una prueba de la eficacia que tenemos para engendrarlo, el valor de un omega no radica en cuantos cachorros sea capaz de parir, eso no es lo que los hace estar "completos", tú eres quien se complementa a sí mismo.

daebak.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora