008: die

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- sanzu ¿sabes lo que planea manjiro? - pregunto la fémina.

- ¿que?

- me dijo que no dudara de el ¿sabes que quiso decir? - aclaro.

si era sincera, akiko odiaba hablar con el varón de cicatrices pero manjiro estaba raro y eso le preocupaba, habían días en los que habla normal, otros en los que la ignoraba y otros en los que hasta incluso le deseaba la muerte. la mente de su novio siempre había sido un completo misterio para la fémina y era consciente de lo inestable que era el albino.

pero hace menos de cinco meses estaba segura de que el la odiaba y ahora no tenia idea de nada, había veces que incluso podía decir que la miraba con amor.

pero también aveces pensaba que era solo su imaginación y como era imposible recibir una muestra de afecto por parte de majiro, ella ya lo había empezado a imaginar. estaba tan mal que ya soñaba despierta.

- si no sabes tú, yo menos y como si me importara lo que trama. - dijo desinteresado mientras ponía un par de pastillas en su boca.

era de mediodia y ambos adultos se encontraban en uno de los bares de bonten, manjiro se había ido a una reunión con los haitani y kokonoi pero esta vez no quiso que akiki vaya asi que la dejo a cuidado de sanzu haruchiyo y kakucho. la pelinegra tenia totalmente prohibido quedarse sola así que estaba siempre con uno o dos de los hombres de confianza de manjiro.

¿quien era el perro más leal? sanzu, así que mikey no dudo en dejarla con el. 

- agh, estoy harta de la cerveza ¿no tienen algo más aquí aparte de alcohol? - se quejo la fémina.

- que exigente.

- cállate estúpido, quiero una gran taza de café. - le dijo al chico de la barra y milagrosamente había café. parece que los que trabajaban allí en sus descansos tomaban tambien.

- que aburrido es tener que vigilarte. - dijo el pelirosa mientras le daba una sorbo a su copa de vino.

- anda a reclamarle a tu jefe si tanto te molesta. - le respondió de mala gana.

- shh, antes de que te ponga una bala en el cerebro. - amenazo sanzu.

[...]

habían estado aproximadamente 2 horas en el bar peleando, tomando y jugando a las cartas hasta que los haitani, kokonoi y manjiro entraron al lugar, interrumpiendo la partida de UNO.

- hey. - saludo rindou con una sonrisa sarcástica mientras tomaba asiento al lado de akiko.

- ¿como les fue? - pregunto la fémina mirando a su pareja.

- bien. - respondió el contrario y se sentó en un sillón, cansado.

- que suerte que llegaron, es tan aburrido estar de niñero. - se quejo sanzu.

los bares de bonten abrían en la noche, así que ellos podían estar completamente solos sin problema, obviamente contando a los empleados. se quedaron lo que quedaba de la tarde allí, realmente no tenían nada que hacer y desde que el albino se acosto en el sillon se había dormido.

- en una hora abrimos, es hora de irse. - dijo ran.

- akiko, despierta a mikey. - ordeno koko y la chica miro a el mencionado insegura.

tenia mal temperamento cuando lo despertaban.

- no tenemos todo el día mujer.

- voy, voy. - la pelinegra se levanto de su asiento y se arrodillo en frente del sillón en el que dormía su novio.

" teddy bear " - w/ manjiro sanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora