Galaxia

A la deriva, peligro inminente.

Naruto despertó mareado del golpe que se dieron al saltar, tanto ajetreo lo dejó aturdido, no sabia en dónde estaba Deidara y eso lo astuto. No tenia ni idea del lugar en dónde estaban, apenas conocía los mapas del reino de fuego y era de noche, eso no le ayudaba en nada. En el lugar dónde despertó se veía claramente los vagones ardiendo en fuego, solo esperaba que Sasuke estuviera bien.

No estaba seguro de que hacer, ya que se encontraban perdidos. Buscaría a Deidara antes de hacer algo más, coloco una roca en el lugar en dónde estaba parado caminaría un poco si no encontraba nada volvería.

Estaba por rendirse cuando escuchó un quejido.

-Mgh... ¡Ah.!.- Deidara trato de reprimir un quejido pero era inevitable.

-Teniente Deidara, ¿esta bien.?-Naruto no pudo ocultar su alegría al verlo, y le preguntó como estaba al no recibir ninguna respuesta.

Sin embargo Deidara no respondió, el dolor lo estaba matando. Estaba muy cansado y sólo quería dormir, pero el escuchar como lo llamaba Naruto, trato de estar consciente.

-¿Es ...ta, herido.?-le pregunto con dificultad.

-No, estoy bien. ¿Pero que ahí de usted, esta herido no podemos quedarnos aquí.?-le respondió, y le preguntó por él, al ver que respiraba con dificultad.

Deidara no sabía como su plan había funcionado, aunque cuándo la granada cayó, se le ocurrió la brillante idea de arrojarle encima su arcilla, lo malo es que esta estaba cargada de C4 que los habrían volar sino salían cuanto antes. Apenas si le dio tiempo de tomar a Naruto y saltar del vagón antes de que explotara, sintió una punzada al costado de su espalda pero no le dio importancia.

Deidara negó, busco entre su ropa y le dio su insignia.

-Escuche bien, Mgh... ah... Tomará mi ...insignia y ... volverá ...hasta la costa ...de Kirigakure, ahí ...estará a salvo.-le ordeno con dificultad.

-¿Que pasara con usted.?-le pregunto al ver que no lo acompañaría.

-Olvide ...se de mi, ...estoy ... herido ...no llegaré ...muy lejos.-le dijo como pudo ya que el dolor era muy intenso.

-No voy a dejarlo solo a su suerte, usted me salvo y estoy agradecido por eso, así que ahora yo lo ayudare a usted.-le dijo que no lo abandonaría y que saldrían juntos de hay.

-Me atravesó ...una flecha ...de ancla, lo malo ...de esas es ...que están ... llenas ...de veneno.-le explicó la gravedad de sus herida.

Naruto escuchaba atentamente la explicación del teniente, el comprendían la gravedad de la herida y el veneno, pero simplemente no podía dejarlo a su suerte, no cuando se arriesgó por el y ponerlo a salvo. Así que muy decidido le dijo que le sacaría la flecha.

-¿Que tengo que hacer para sacar la flecha.?-le preguntó sin ninguna duda.

Deidara quedo sorprendido por la decisión, y firmeza que mostraba Naruto, sabía que dejarlo ir sólo hasta la costa era peligroso, pero lo era más que viajara con un guardia que no podía pelear. Pero el rubio menor logro despejar sus dudas y acepto, si quería seguir manteniéndolo a salvo.

-Debe ...tener cuidado de ...no tocar la ...punta de la flecha, en mi bolsillo ...izquierdo tengo ...un kit de emergencia.-le explicó fatigado al ver como el veneno comenzaba a actuar.

Naruto buscó entre su ropa hasta que encontró un pequeño estuche de color negro, lo abrió con cuidado revisando que habían dentro, no había mucho solo un par de vendas, una cinta médica y un desinfectante. Se preparo mentalmente para lo que vería, esperando no ver demasiada sangre.