!CADETES! Aquí tenéis el nuevo capítulo de Soldado. Sé que dije que subiría los Martes. Pero, en España ha sido fiesta y no pude tenerlo preparado a tiempo. Pero aquí lo tenéis.
¡Espero que os guste mucho y que disfrutéis!
Dejadme en los comentarios que os está pareciendo hasta ahora la novela y que os ha parecido el capítulo.
Muchas gracias!!
Nos vemos el Martes que viene. Un beso.
Abby
Me remuevo en la cama y estiro los brazos para intentar que los músculos dejen de dolerme. Creo que ayer Dylan y yo fuimos un poco bestias. Y si a eso le añades las copas de más pues... la verdad no puedo moverme.
- Venga Cadete, es hora de levantarse - abro un ojo y veo a Dylan totalmente duchado y vestido en la otra punta de la habitación.
- ¿Qué hora es? – me quejo y me siento en la cama.
- Bastante tarde para que Lily esté echa una furia – abro los ojos como platos. Mierda. Los niños – voy a pedir el desayuno, vete duchando – asiento y me levanto de la cama un poco a regañadientes.
- Tengo resaca – me quejo entrando en el baño. Dylan ríe. Lo escucho hablar por teléfono y me meto rápido en la ducha.
Bajo el agua veo un resplandor de luz que cruza mi mano. Frunzo el ceño y la miro fijamente. Ahogo un grito cuando todos los recuerdos de la noche anterior van llegando a mi mente poco a poco:
"Necesito que nos prometamos que seremos nuestros para el resto de nuestras vidas"
"Tuyo, Mía, nuestros"
"Convertirte oficialmente en mi esposa"
Me tapo la boca con la mano y dejo que las lagrimas caigan por mis mejillas. Dylan me ha pedido matrimonio. Me ha pedido matrimonio de una forma muy suya. Y yo le he dicho que si. Estamos comprometidos. Estoy comprometida con dieciocho años... ¡Esto es una locura!. Mi madre me va a matar. Alan va a matar a Dylan y todo el mundo nos va a matar.
Comienzo a reír sin poder evitarlo. Solo nosotros podríamos cometer tal locura y no sentirnos culpables por ello. Quiero a Dylan como nunca había querido a nadie. Sé que somos muy jóvenes y que todavía quedan años para que oficialicemos el compromiso... y una parte de ambos sabe que Dylan necesitaba tener esto. Tener esta seguridad que le transmite saber que no me voy a ir a ningún lado para que él pueda volver.
Y joder... si decirle que si significa que estamos locos. Pues que así sea. Pero seremos unos locos felices. Unos locos amantes que luchan por seguir juntos a pesar de que el universo batalla en su contra.
Siempre lo hemos sido. Él y yo contra pronóstico.
Salgo de la ducha y me pongo lo que mi madre le ha metido a Dylan en la bolsa. Unos vaqueros largos y una camiseta de magna corta junto a mis sandalias. No creo que este sea el mejor atuendo para ir a patinar sobre hielo. Me cepillo el pelo y lo dejo secar al aire.
-Dylan no se si esta ropa es la mejor para... - me callo al instante - ¿Pero qué coño te ha pasado? – corro hacia Enzo.
- Abby – Dylan me lanza una mirada desde el armario. Coge el kit de primeros auxilios y se arrodilla junto a Enzo.
- Liam... él, y...- balbucea.
- ¿Esto te lo ha hecho Liam? – entro en pánico y me siento a su lado. Tiene la cara prácticamente desfigurada, veo sangre por toda su camisa. Lleva la misma ropa que anoche. Una mancha entre roja y negra está extendida por todo su costado.
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SOLDADO (pausada temporalmente)
Подростковая литература-No te vayas- -Volveré- -Te esperaré- Es lo que le prometí cuando no había vuelta atrás, cuando la subida al avión de Dylan era inminente. -Te quiero Cadete- Me susurró a los labios justo antes de decirle que yo también lo quería. Ha pasado un...