capítulo once.

1.1K 152 40
                                    


Camina en círculos de forma nerviosa mientras suelta bufidos y niega con la cabeza.

Ya estas aquí Dionysus, ya hazlo asiente pero... ¡lo he evitado por tres días! niega nuevamente ¡pero es por eso por lo que debería subir las escaleras! palmea sus mejillas ¡ay nooo! ¡¿por qué le dije "te quiero"?! ¡matenme!

Lloriquea hasta que siente como alguien toca su hombro.

— ¡Ah! —Chilla espantado, levanta la mano para golpear a quién se haya atrevido a asustarlo

Pero lo detienen

— Dionysus ¿qué haces aquí? —Abre un ojo y luego el otro para suspirar aliviado

— Eh... es que... eh... p-pasaba por aquí y no sabia si era buena idea ver a Izana —Ríe nerviosamente

¡Nooo, Dionysus! ¡Cuando no tienes que poner el plan de "pasaba por aquí" en marcha lo pones!

— ¿Cómo no va a serlo? Vamos arriba, el resto esta allí también —Kakucho le da una sonrisa amable que Dionysus se ve obligado a devolver

Quiero llorar

Dionysus se queda mirando la puerta como si fuese su mayor enemigo hasta que Kakucho la abre por él.

Ay, ahora va a creer que no se abrir puertas, ¿algo más? ¿voy a pisar la cola de Lucas?

Sonríe tímidamente cuando Izana mira hacía la puerta, buscando saber quién había ingresado. Dionysus, sin poder mantener contacto visual por un segundo, termina apartando la mirada

— Encontré a Dionysus y lo traje —Kakucho menciona

— Hombre, Dionysus llegas a la hora —Ran palmea su hombro— esta noche vamos a ir a un club, ¿te apuntas?

¿Un club? Suena a buena idea

— Cla-

— No va.

Todos miran a Izana que con una voz gélida dice, Dionysus arquea una ceja mirándolo y al mismo tiempo se cruza de brazos

— Sí voy.

— No. —Dice nuevamente, rechinando los dientes— No quiero que vayas.

— Que lástima, yo si quiero ir.

Que incómodo piensa el resto de chicos en la habitación mirando de Izana a Dionysus como si estuviesen jugando tennis

— Deberíamos irnos. —Comenta Rindo con una sonrisa incómoda

— Sí —Susurra el resto

Salen del departamento dejando a ambos solos, Izana y Dionysus se quedan en silencio antes de que el filipino niegue

— No éstas invitado. No pienses en ir.

— ¿No estoy invitado? Literalmente escuche a Ran decir "¿te apuntas?"

— Lo que diga Ran no me importa. Ni siquiera eres su amigo, tú no tienes amigos, no trates a esos sujetos como unos porque apenas los conoces. ¿No escuchaste lo que dije? Yo no quiero que vayas. Así que no-

Se calla al sentir como una chaqueta le golpea la cara, cuando cae al suelo mira a Dionysus con irá, una irá que se disipa al ver la expresión en su rostro

— Vete a la mierda, Izana.

Abre la puerta saliendo de allí tras cerrar la puerta de un portazo, baja las escaleras con la misma prisa y sin mirar atrás, se aleja de aquel lugar.

Abre la puerta saliendo de allí tras cerrar la puerta de un portazo, baja las escaleras con la misma prisa y sin mirar atrás, se aleja de aquel lugar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
𝐄𝐅𝐈́𝐌𝐄𝐑𝐎 | Kurokawa IzanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora