Capítulo 45 - No me gusta él

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Ye Zhou llevó las bolsas grandes y pequeñas de vuelta al dormitorio.

Normalmente, sentado en su asiento, siempre es capaz de ver la figura de Shang Jin con un giro de su cabeza. Ahora, estaba un poco desacostumbrado al espacio completamente vacío.

Ye Zhou sacó el gatito y lo puso junto al peluche del conejo.

"Dignos de ser hermanos". Los dos eran de color rosa y al ponerlos juntos también tenían una apariencia de hermanitos. Se rio y llevó la ropa nueva al fregadero, sumergiéndola en agua con detergente.

Cuando el agua se escurrió, oyó el sonido de un teléfono. Ye Zhou cerró el grifo para identificarlo cuidadosamente. Asegurándose de que el dormitorio estaba tranquilo, sacudió la cabeza y volvió a abrir el grifo.

Después de colgar la ropa para que se secara, le pareció oír de nuevo el timbre de su teléfono móvil. Tres pasos se fundieron en dos, acababa de abrir el cierre de la mochila cuando el teléfono pulsado en el fondo sonó y vibró.

Mirando el contacto en la pantalla, se distrajo un poco.

"¡Realmente puedes responder al teléfono! Me he llevado un susto de muerte. Creía que no estabas ahí". Una voz muy animada llegó a través del receptor. "Quería darte una sorpresa el Primero de Mayo, pero ¿quién iba a decir que me darías un susto antes?"

"¿Shang Ming?" Ye Zhou estaba gratamente sorprendido. " ¿Viniste?"

"¿No es así? ¡Ven a recogerme! Estoy justo en frente de tu escuela."

"¡Ahora mismo!" Ye Zhou y Shang Ming tenían la mejor relación cuando estaban en la escuela secundaria. Pero debido a que las calificaciones generales de Shang Ming no eran buenas, tendiendo a dar demasiada importancia a unas asignaturas sobre otras, su calificación general no era demasiado buena y a los padres de Ye no les gustaba. A Ye Zhou no le importó que sus padres le regañaran y siguió su camino. No fue fácil encontrarse con Shang Ming después de asistir a la universidad. Originalmente le había ofrecido reunirse una vez durante las vacaciones de invierno, pero quién iba a saber que Shang Ming se iría de viaje y no pudo reunirse con él. No esperaba que esta vez, Shang Ming se presentara en Ciudad A.

Preocupado porque Shang Ming había traído más cosas, Ye Zhou se dirigió en el pequeño triciclo hacia la puerta de la Universidad A.

Shang Ming se paró frente a la puerta y tomó fotos del llamativo y extravagante triciclo que veía desde lejos. Era como si le hubieran inyectado inmediatamente sangre de pollo.

"Jaja, este coche mágico debe ser fotografiado y enviado a mi círculo de amigos". Como persona a la que le gustaba hacer amigos, Shang Ming siempre sacaba su teléfono móvil cuando veía cosas novedosas. Pero, por desgracia, este pequeño coche de pedales estaba un poco lejos y la imagen no era demasiado clara...

Cerca...

Más cerca...

Después de que Shang Ming tomara varias fotos sucesivas, el cochecito que había calificado de estrafalario se detuvo frente a él. La puerta se abrió y vio un rostro apuesto y familiar.

"¡Mierda!"

Como el coche ya se había convertido en un coche famoso, Ye Zhou que iba en él no lo consideraría como algo diferente. Al ver que Shang Ming seguía con una expresión poco clara, dijo: "¿Qué estás mirando? ¿No trajiste ningún equipaje?"

"No..." Shang Ming dio la vuelta al coche y todavía no podía creer que su buen amigo hubiera degenerado en conducir un triciclo. "No tienes coche, ¿entonces no podemos ir bien en bicicleta? Si no hubiera venido aquí esta vez, no habría sabido hacia dónde se había desviado tu estética."

Todo el mundo piensa que me gustaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora