[✓] Bullying

18 - Problemas en casa

Cuando llegué a casa había una primera cosa que debía hacer: contarle todo a mi mamá.

Siempre me dijo que podía confiar en ella en este tipo de situaciones, no lo había hecho desde antes porque realmente creía que lo de David era algo que podía controlar sola, con lo anterior me di cuenta que no.

Enserio creo que David necesita algo de ayuda psicológica, está loquito.

—¡Mamaaa! — grito entrando a mi casa.

No la veo por ninguna parte hasta que entro en la cocina, ahí está.

—Mamá, te quiero contar algo — hablo.

Ella está de espaldas así que jalo un poco de su blusa con algo de insistencia buscando me haga caso.

—Espera un poco cariño — se voltea y susurra.

Es como veo que tiene el teléfono en manos, está en una llamada.

—Si muchacho y lo comprendo perfectamente, pero usted también debería de comprender que por el momento no disponemos de tanta cantidad de dinero — dice ella.

Vuelve a quedar callada cuando la contraparte de su llamada le responde cosas que son in audibles para mí.

—Pero ¡Por favor! Le repito que eso no es posible hasta qu... ¿Cómo? ¿Los papeles que firmamos en la primera junta? Está bien déjeme buscarlos. No, no voy a colgar, solo espere un momento por favor — salió de la cocina apresurada.

—Mamá tengo algo que contarte — digo siguiéndola hasta su habitación.

—Ay mi vida, ahora no tengo mucho tiempo, estoy muy estresada y creo que tu padre y yo nos vamos a meter en un problema muy grande.

—Es que es algo un poco grave, ma.

—¿Más grave que quedarnos en la calle Azul?, ¿Puede algo ser más grave que eso? — dice exaltada.

Está bajando varias cajas del estante de su habitación, por lo que escuché en su llamada tiene que encontrar unos papeles de no sé qué cosa.

—Tienes razón mamá, estás muy ocupada ahora, luego te cuento entonces — me resigno decepcionada.

—Gracias por entender corazón.

Salgo de su habitación y me dirijo a la mía, me aviento a mi cama quedando boca abajo y doy un pequeño quejido que es ahogado por la almohada que sostengo. Doy la vuelta y quedo boca arriba, extiendo mis brazos y piernas por toda la cama quedando cuál Patricio Estrella.

—¿Que hago? — me dije a mi misma.

Bueno, está bien, de cualquier forma, el problema que sea que tengan mis padres no puede ser eterno, en cuanto lo resuelvan o estén más despreocupados les diré sobre lo de David a ambos, de mientras, mañana apenas él me dé la primera mirada, o intente si quiera acercarse gritaré con fuerza y le diré a los profesores.

También tratando de pensar positivo un poco, al final del día David es solo un adolescente más del montón, hay otros que son incluso más acosadores e insistentes que él, no puede llegar a hacerme nada tan grave, más si estamos en un espacio tan público como lo es la escuela, todo mundo nos vé así que no puede intentar nada malo contra mí.

¿No es así?

Tranquila Azul, todo se solucionará, lo sé.

***

Hola corazones, es cortito, lo sé, pero tiene un motivo importante que lo van a leer pronto.

Solo pasaba a recordarles que ya hay capítulos de Danger en mi perfil <3

Nos leemos pronto.