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No había sido fácil, encontrar departamentos con una renta que fuera accesible y en una zona como lo es Seúl, era de lo más complicado, pero lo había logrado, Felix podía sentarse ligeramente afortunado por haber encontrado el lugar perfecto, su departamento estaba en el tercer piso, era espacioso, perfecto.

No dudo ni un solo segundo en aceptarlo en cuanto escucho el precio de la renta, y admirar el lugar completo, estaba sumamente feliz, se felicitó internamente al poder hacer logrado su cometido, las cajas de su mudanza serian lo más complicado de llevar, de eso estaba más que seguro, pero lo haría poco a poco.

Sus cosas eran pocas, así que no sería tanto problema, lamentablemente para el omega, aún observar como su anterior alfa llevaba a su nuevo omega y le daba besos y caricias, hacía que su corazón se estrujará en su pecho cada vez más, sabía que lo mejor era esquivarlo por completo y dejarlo pasar, pero era complicado, mirar aquellas escenas y después en la tarde recordarlas, hacia que su corazón volviera a sentirse tan oprimido y dañado como en un principio, su lobo ni siquiera se dignaba a dar alguna señal de vida, Felix era consciente de que la razón era más por la vergüenza de haber sido botado por su alfa.

Felix soltó un respiro después de dejar la última de las cajas en su nuevo departamento, sonrió para sí mismo orgulloso de poder por fin alejarse de ese alfa, comenzar de nuevo es difícil, y más con un lazo roto, pero lo intentaría.

-Pequeño cachorro- hablo en voz baja mientras sus manos acariciaban su plano vientre-, tú y yo estaremos aquí como una familia, es la mejor de las de las familias, ¿te gusta? -sonrió mientras con su mirada daba de nueva cuenta un vistazo a lo que había, las cocinas en todos aquellos departamentos ya estaban amuebladas, Felix había logrado conseguir pocos muebles, apenas unas cuantas sillas y algunos cojines que planeaba utilizar como el sofá principal.

Después iría agregando más cosas a su pequeño nuevo hogar.

-Bien, bien -asintió- a desempacar.

Y así Felix había comenzado a desempacar las cosas que había traído, algunos libros, floreros, su portátil, unas pequeñas plantas que él se encargaba de cuidar, entre otras cosas, a pasos lentos pero decididos, fue acomodando una hasta que por fin el departamento iba poco a poco tomando color con cada una de sus pertenencias.

Cuando la última caja fue abierta, allí supo que tenía que hacer algo de inmediato, sabía que aquel alfa no le gustaría verlo por los pasillos de la universidad, afortunadamente para Felix, las clases ya habían casi dado a su fin, y a él le faltaba un año para terminar con su carrea, de inmediato se dirigió hacia su computador para encenderlo y comenzar a buscar los demás planteles de la universidad en la que estudia.

Sonrío en grande al poder encontrar una que quedaba a media hora de camino de dónde ahora se encontraba, era perfecto, haría el trámite de sus papeles para estudiar en aquel plantel, no esperaría más, entre más rápido se alejase de ese alfa, se sentiría mucho más feliz y tranquilo, lo necesitaba, para su bienestar y su corazón.

Paso su mano por la marca, aún no desparecía del todo, apretó sus labios en una fina línea, había escuchado tantas veces de los lazos ratos, pero jamás creyó que el seria uno de los omegas que los tendría, esperaba que no fuera un motivó de burla, pero seguramente lo sería, aunque desde casi siempre había estado acostumbrado a las burlas de los demás.

Felix sufrió mucho cuando estaba en su etapa de bachillerato, y prácticamente ser omega no impedía que las burlas siguieran, los alfas eran un total fastidio, unos imbéciles totales, se burlaban de él, le decían inclusive que ningún alfa se fijaría en semejante omega como él, había deseado tanto gritarles y restregarles en sus caras que tenían un alfa que lo quería, pero ahora sabía que tal vez ahora si ellos lo vieran en ese estado estarían burlándose de él, por creer que en verdad un alfa gustaría estar con él.

Sacudió levemente su cabeza de un lado a otro para sacar esos pensamientos, no debía de pensar en eso, el pasado era pasado, tenía que mirar hacía adelante y dejar de pensar en todo lo malo, no todo en la vida lo es, y ahora está esperando un hermoso cachorro, no podía dejar que los pensamientos negativos lograrán deprimirlo, eso sí que afectaría a su pequeño.

Al menos el papeleo se hacía por Internet. 

𝘓𝘢𝘻𝘰 𝘙𝘰𝘵𝘰 ||HyunLix||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora