𝘓𝘢𝘻𝘰 𝘙𝘰𝘵𝘰 ||HyunLix||

015

Maratón 11/11

La confianza es primordial, Felix lo sabe, pero piensa que le será difícil tenerla con el alfa, darle una oportunidad haría que todo su mundo cambiará, pero no estaba muy seguro de que manera, ¿acaso le haría daño con lo hizo aquel? Tal vez lo haga, tal vez piensa demasiado las cosas y quiere evitar acercarse a otro alfa.

No todos son iguales, no todos te rompen el corazón y te dejan con un lazo roto y un bebé en camino, llevo sus manos a su aún vientre plano, se preguntó si acaso se vería terrible cuando su vientre comience a crecer.

- Tal vez me vea terrible -sonrió débilmente, recargo su cabeza en el reposa brazos del sofá y se acomodó mejor, ha sentido mucho cansancio últimamente, las emociones que había estado experimentando en esté corto periodo de tiempo eran las causantes de esto.

Soltó un largo bostezo, sus ojos en verdad que le estaban pesando, había sido una larga semana para el omega, necesitaba un enorme descanso.

Con una sonrisa plasmada en sus labios, pensando en las palabras de Hyunjin y abrazándose así mismo, decidió que lo mejor era tomar una siesta.

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-... y eso fue lo que sucedió -termino de relatar Hyunjin, Minho ni siquiera podía creer todo lo que había pasado, ¿acaso Hyunjin estaba loco?-. ¿Qué?

- ¿Es... es en serio? -soltó un resoplido-. ¡Debiste ser más precavido! ¿Qué tal si te mandaba al diablo?

Hyunjin rodó los ojos, no esperaba esa reacción de parte de su amigo, pero era de esperarse, después de todo había sido de lo más brusco, primero su confesión adelantada de pedirle una oportunidad, nada discreta, además de pedirle que lo dejará acompañarlo para ir al ultrasonido, por supuesto esa había sido una experiencia muy grata, aún tenía la imagen de ese puntito que le había llamado por completo su atención, ¡ya quería verlo crecer en el vientre de su omega!

- No lo hizo -menciono Hyunjin aliviado-, eso es una buena señal.

- Aun así no deberías de ser así, amigo, podrías llegar a asustarlo, sabes que los omegas en ese estado están más débiles.

Eso era cierto.

Un lazo roto podía causar muchas cosas, el omega siempre era quien sufría más las consecuencias de los actos del alfa, algunos morían de tristeza, pues al dejar de sentirse queridos por su supuesta pareja, dejaban que la depresión poco a poco los consumiera, mientras que otros que lograban salir adelante, repudiaban a los alfas.

- Felix no se asustará -menciono Hyunjin en respuesta.

- Debes de cambiar esa actitud, sé que no te gusta tener todo con tantos rodeos, pero debes ser delicado, Felix está sensible tanto por el embarazo como por su unión rota, debes comprenderlo.

Hyunjin sabía que había hecho mal en comportarse así, de un modo desesperado, pero como Minho había mencionado, él siempre quería que todo fuera casi perfecto, sin rodeos, nada por el estilo.

Necesitaba disculparse con el omega, pero lo haría después, seguramente ha de estar demasiado cansado como para querer volver a escuchar su voz de nuevo, así que espera poder verlo mañana para así poder disculparse, necesitaba calmarse un poco, sus acciones demasiado precipitadas podían traerle consecuencias, y no quería que una de ellas sea alejar por completo a Felix, ¡no lo soportaría!

- ¿Qué le puedo dar como método de disculpa?

- No creo que sea un omega que le guste lo material, deberías solo -se encogió de hombros-, disculparte y listo.

- ¿Y sí no acepta mis disculpas? ¿Y sí piensa que soy un idiota por no llevarle algo? ¡Lo estoy cortejando!

- ¡Hwang Hyunjin! -exclamo Minho golpeando la mesa, llamando un poco la atención de los presentes en el restaurante, pero por supuesto Minho ni siquiera les prestó atención-. Cálmate, estoy seguro de que no pasará nada, él lo que ahora necesita es una persona que se atreva a demostrarle que no todo está perdido por un lazo roto, y que puede llegar a enamorarse de nuevo, eres esa persona, solo demuéstrale que no solo con cosas materiales, el romance surgirá, ¿entiendes?

- Entiendo que lees demasiado a Haruki Murakami -Minho soltó un suspiro cansado de su explicación-, no te enojes.

- No me enojo, simplemente eres alguien desesperante.

- ¿Lo siento?

- Por supuesto que lo sientes, en fin -rodó los ojos y se acomodó mejor en la silla para poder cruzar sus brazos sobre su pecho-, ¿has pensado en tu método de cortejo?

- No, aún no lo hago, pero sé que funcionará.

- A veces pensó que solo tomas decisiones a lo estúpido.

Tal vez lo hace solo un poco.

Pero ya vería lo que puede hacer, poco a poco, quiere llegar a conocer al omega lo suficiente para saber cómo tratarlo de la mejor manera, quiere agradarle, quiere reconfortarlo y por lo menos tener un pequeño espacio en ese corazón roto, para poder repararlo, sería un camino difícil, pero estaba dispuesto a tomarlo, no había marcha atrás y no es como si quisiera retroceder ante sus acciones, estaba dispuesto a todo por ese omega, y se lo demostraría de la mejor manera posible.