~Ópalo~

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-Pica, pica - se quejaba Chifuyu mientras trataba de buscar algo liquido que le refrescara.

Se habian juntado con los antiguos miembros de ToMan en el local de ramen de los gemelos. Se habia hecho costumbre reunirse en el lugar el último viernes de cada mes cerca de la hora de cierre del local. No era como si lo hubiesen pactado, mas bien llegaba el que podía sin ningun compromiso... pero a fin de cuentas todos se hacian tiempo para poder reunirse ese día en el local de los hermanos Kawata. En esta oportunidad estaba Chifuyu, Draken, Inupi, Mitsuya y Hakkai sentado en ese orden en la barra del restaurant ,además de los dueños de casa.

-Ten, estos malditos le ponen toda la malicia al ramen cuando es para nosotros - dijo Draken acercandole un vaso de agua al de ahora cabello negro. Chifuyu estaba transpirando, se le habian hinchado los labios e incluso le salia una lagrima del ojo derecho.

-Pero es con amor - solto en tono burlo Nahoya - además, hace tiempo que no venia ni Chifuyu ni Hakkai al local, esta es receta nueva.

-Esta vez estuviste mucho tiempo en el extranjero, parece que te ha ido bien - soltó el menor de los kawata dirijiendose al de ahora cabello fucsia.

Hakkai asintio con la cabeza, mientras tomaba agua tratando de pasar el gusto picante. Seguramente le habian puesto lo mismo que al ramen de Chifuyu

-a todo esto ¿Por que tienes el pelo de ese color tan feo? - solto sin pelos en la lengua el de cabellos color durazno

-Fue a pedido de un cliente para unas fotos. Parece que les gustó como me queda el color, porque en el último trabajo me pidieron que me lo dejara como estaba

-Mañana salen las fotos. Quedaron bastante buenas, deberían comprar la revista - comento Mitsuya

-¿Las fotos con Inupi? - pregunto Draken. Habian pasado ya dos semanas y media desde la sesión que el rubio realizó con Hakkai. El de la trenza se habia muerto de la risa cuando su compañero de piso le habia contado lo ocurrido y lo que había tenido que hacer, por lo que cuando le llamaron para confirmar el pago del trabajo, ni siquiera se molesto en preguntar cuando saldrían las fotos, le daba verguenza que Draken las viera.

-Cuenten el chisme -se quejo Chifuyu.

Mitsuya y Hakkai contaron animadamente lo ocurrido, cómo el fotografo se habia acercado y habia, descaradamente, piropeado a Inupi, la ropa y el maquillaje que usaron, lo emocionado que estaba el encargado de la agencia cuando terminaron el trabajo y lo enojada que estaba Yuzuha.

-¿y como te quedaba el vestido? - soltó Smiley

-Hermoso - dijo Hakkai imitando la voz del fotografo. Empezo a revolver una bandolera verde pistacho que llevaba, sacando su celular. Busco entre las fotos de la galeria por un momento y luego le paso el telefóno a Nahoya.

No decia nada, miraba a Inupi y despues al telefóno tratando de convenserse de lo que veia. Souya se acerco, dejando caer el cucharon que tenia en las manos, los pocos clientes que estaban a esa hora se voltearon a ver, por lo que el menor de los gemelos tomo el cucharon y fue al lavaplatos a lavarlo.

-yo la quiero ver - dijo Chifuyu quitandole el telefóno de las manos a Nahoya. Apenas vio la foto- ¿Me estas jodiendo que eres tu?

Draken, al estar junto al otro pelinegro se acerco a este para ver la foto. Definitivamente la había tomado un fotografo profesional, tenia muy buena composición, pero lo que más destacaba era la imagen del modelo. La terza piel blanca, los ojos claros que producto del ahumado oscuro brillaban como dos opalos, los labios color carmín que se veian tan jugosos como una manzana y la cicatriz, adornada con destellos de color dorado, todo en su conjunto parecia una obra de arte. Incluso la ropa, con los sutiles detalles, hacia aun más destacar los finos rasgos del rubio.

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