::::: A tu lado aunque seas un estúpido ::::: Tartaglia x T/N

5. ・Mentiras・

*Narra Tartaglia*

Nunca me dejan divertirme...

Después de casi destruir Liyue, pelear contra el viajero y enterarme que el señor Zhongli era en realidad Morax, me enviaron como siempre una carta como las demás, en donde me explicaban paso por paso mi siguiente misión.

Era algo normal, tan normal que parecería aburrido, deshacerme de alguien que estaba interfiriendo con los planes de los fatui, o bueno más bien mandar a mis tropas, por que yo tenia que hacer papeleo para la siguiente junta.

T/N una estafadora de pelo c/p y ojos c/o reconocida por los fatui, ya que tuvo el descaro de engañar al sexto de los fatui Scaramouche, no sé cual fue el problema que hizo que Scaramouche se enojara tanto y pusiera su cara en todos los hoteles reservados para los fatui, pero para hacer que la misma La Zarina me ordenara directamente encontrarla, debe ser algo grande... ¡que emocionante!

...Si tan solo pudiera ir y buscarte.

Pasaron los minutos que se convirtieron el horas y a su vez estas se convirtieron en días, simplemente estaba derrotado, quería ir al burdel, meterme a la habitación de Camile y desatarme contra ella. Siempre que me mandan una misión, me piden que me contenga y que no trate de dañar tanto la mercancía, sin embargo, eso me frustra, me frustra pelear con alguien que no esté dispuesto a dar su vida, me frusta que siempre me traten como un niño problemático, me frustra que piensen que soy una carga, me frustra que no me dejen pelear, me frustra que solo me mantengan preso en esta oficina sin nada de acción, pero Camile, a ella no le importa nada de eso, ella me ama tal y como soy, adora cuando la toco y la ahogo en cálidos y húmedos besos, y para mi... ella es simplemente perfección, la adoro.

Aunque de seguro debe de estar enojada por que no la he visitado esta semana, pero no es mi culpa, siempre me mandan a hacer la parte más tediosa. Supongo que unas bolsas con mora será suficiente para ponerla de buen humor, y declararle mi amor.

Solo tengo que acabar este papeleo y muy pronto estaré junto a ella.

*Se abre la puerta abruptamente*

Fa1: -SEÑOR...-

Tar: -¿Que necesitas?- estoy harto de que nunca toquen la maldita puerta.

Fa1: -Y-y-yo t-tengo algo que informar...-

Tar: -Más te vale que sea algo importante-

Fa1: -¡Si señor!, e-es sobre la estafadora... ¡la hemos atrapado!-

Tar: -¡¡¡-

¡¡POR FIN!!, al fin, ya me estaba desesperando, estaba a punto de abandonar mis deberes, buscarla y asesinarla para que ya no ocasionara problemas.

Estaba tan emocionado que salí sin pararme ningún segundo hasta llegar a la celda. Escuchando al recluta mientras caminábamos, me di cuenta que ella se había desecho de 3 tropas conformadas por 7 hombres cada una, sin duda me gustaría pelear contra ella alguna vez.

Llegaron a mis oídos muchos rumores sobre su personalidad y físico, por lo que llegaba a imaginármela realmente amenazante y con fuerte carácter, sin embargo, al mirarla tras rejas, se veía lamentable... pero a la vez muy hermosa, sus cabellos tapaban toda su cara, símbolo de la ardua pelea que tuvo con los fatui, tenia pequeñas rasgaduras por toda su ropa, mas no se veía para nada mal, incluso me atrevo a decir que a mis ojos ella era un poco sexy.

Tar: -Oh... eres muy hermosa para estar en este lugar. ¿En serio eres una estafadora?- Se parece mucho a la imagen del cartel, pero... siento que la he visto en otro lugar

Alzó su vista, ocasionando que nuestras miradas se encontraran, todo pareció detenerse por un momento, sus ojos me atraparon en un profundo hechizo que parecía no tener fin, hasta que decidió romper el silencio que se había formado.