XXIV

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DIOSS 100k juro q no se como agradecerlo, en serio muchísimas gracias, nunca pensé que llegaría a tanto.

AYLA'S POV:

Me encuentro en el salón sentada mientras finjo leer el libro que tengo en mis manos, sinceramente no he leído ni una página desde que me senté para descansar . Estos días he estado muy distraída , estoy solo sumida en mis pensamientos y sin ganas de nada.

No paro de pensar en lo que sucedió aquella noche, por una parte estoy algo más tranquila porque por fin les dije todo lo que tenía guardado desde hace años. Pero por otra parte, siento que no he ganado nada haciendo eso, haga lo que haga y diga lo que diga, nunca podré recuperar ni a mis padres ni a Uriel. Lo único bueno de todo esto es que por fin van a dejar de sufrir personas y los que viven en la manada. Dentro de unos días vamos a ir a darle explicaciones a la manada Pain Moon, haremos que sea un lugar mejor y Adrick la gobernará como es debido.

Tambien siento que cada vez le hecho más de menos a Uriel, si él y su consejos hubiera estado conmigo en estos momentos todo sería mejor. No me quejo, tengo a personas maravillosas a mi alrededor en estos momentos, y Asher ha hecho todo lo posible para animarme y lo ha conseguido en parte, pero creo que hagan lo que hagan no van a poder llenar esa parte que ocupaba Uriel en mi corazón.

Necesito a mi mejor amigo, su sonrisa, sus bromas en los peores momentos, siempre conseguía hacerme olvidar de la situación en la que estaba. Sinceramente él era un chico que no merecía morir. Siempre hacía que viera las cosas de diferente manera y me alegraba los días. Creo que él y Asher se hubieran llevado de maravilla.

- Nena, creo que ya va siendo hora de que dejes el libro, no has pasado ni una página desde que te sentaste- escucho la voz de Asher desde el sillón de al lado.

Lo miro extrañada porque no había notado su presencia ni lo había oído llegar.

- ¿ Y tu desde cuándo estás aquí?- pregunto mientras lo cierro.

- Llevo aquí desde hace ya rato pero veo que no te diste ni cuenta- contesta a la vez que se levanta para luego sentarse al lado mío.

Me agarra las manos mientras me mira con su mirada neutra pero se le ve algo de preocupación en en ella. Me da un suave beso en cada mano y luego me mira algo serio:

- No te quiero presionar a que me cuentes lo que te pasa, pero quiero que sepas que estaré para ti en cualquier momento, tienes que saber que te voy a apoyar y que nunca te juzgaré ¿vale?

Asiento y luego suspiro, los he tenido a todos preocupados estos días mientras yo he estado ignorando y rechazando su ayuda. He sido egoísta y no he pensado en ellos.

- Lo siento- digo completamente sincera después de un largo silencio- en serio lo siento por teneros así, habéis estado preocupados por mi y ni si quiera os he agradecido la intención de ayudarme.

Se acerca para abrazarme y yo gustosa lo recibo y lo aplasto.

- Como sigas así me vas a matar- bromea sacándome una sonrisa.

- No seas exagerado.

- ¿ Exagerado? Yo te voy a enseñar lo que es exagerado.- contesta apartándose para después comenzar a hacerme cosquillas por el abdomen.

Inevitablemente me pongo a reír como una loca y mis carcajadas suenan por el salón. Siempre he sido muy sensible a la hora de las cosquillas y que sepa mi punto más débil no ayuda.

- P-pa-ra por favor- intento hacerme entender ya que apenas respiro de tanto reír.

- ¿ Ahora quién exagera ehh?- comenta cuando para por fin.

Fin de la TorturaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora