Fin de la Tortura

XXII pt 2

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AYLA'S POV:

Aron parece dolido arrodillado con las manos en el pecho, en cambio, Keyla permanece intacta aunque su cara ha cambiado un poco, ya no está con cara divertida, es más, lleva una cara neutra pero puedo ver algo de dolor detrás de ella.

Andrés aprovecha para transformarse y ponerse en modo de ataque.

- ¡Como arruines algo en esta casa juro que lo pagas tu! ¡Que es muy bonita!- le amenaza Keyla.

Asher se transforma y se pone delante mía impidiendo que el lobo de Andrés se me pueda acercar.

Dios, esto es muy grande...

- Y esperemos que no sea la única cosa grande que tiene.

- Ahora no Laia- le digo por la mente mientras intento no reírme.

El lobo de Asher, que por cierto, ahora que lo pienso no sé como se llama. Es negro entero, tiene unos ojos verdes profundos muy grandes; hasta en su forma lobo es intimidante.
Y es grande, muy grande. Me llega por los pechos.

Suerte que la casa es muy espaciosa y el techo está muy arriba.

El lobo de Andrés es marrón, color mierda, al igual que sus ojos. Y no es tan grande como el de Asher. Es más, parece un lobo normal solo que un poquito más grande.

Los guardias que estaban atrás se transforman y se ponen delante de Asher, creando así una barrera que impide que nos toquen a ambos.

El lobo de Asher gruñe mientras creo que le dice algo por la mente a los lobos que lo tapan, todos asienten y rodean al lobo del hombre que me jodió la vida.

Otros que no se de donde salen agarran a Aron, Lisa y Sandra. Los dos primeros intentan zafarse bruscamente mientras insultan a los guardias. En cambio Sandra se deja agarrar mientras está callada mirando a su alrededor.

Andrés al ver que no va a poder con todos, ya que lo ha intentado y no ha podido. Acaba volviendo a su forma humana y otros tres guardias lo agarran.

- Llevadlos a los calabozos, poned a estos tres juntos y a ella ponla en otro sola, no vayan a hacerle algo-ordeno y los guardias asienten listos para llevárselos.

- ¿Vienes?- me pregunta Asher ya en su forma humana.

No quiero ir, pero a la vez si. No es agradable visitar el lugar donde pasaste varios años de tu vida. Pero tarde o temprano lo tendré que hacer, por mucho que me duela y no me guste recordar todo.

- Sí- me agarra la mano y ambos vamos tras lo guardias y la familia estupidiota.

El resto se queda en el salón y a Asher y a mi nos toca aguantar los gritos e insultos de la familia mientras los llevamos a los calabozos.

Cuando llegamos al lugar me empieza a temblar el labio, es igual al de la otra manada, solo que este un poco más grande.

- ¿ Quieres que nos vayamos?- me pregunta Asher parándose, supongo que ha notado mi nerviosismo.

- No quiero, estoy bien- le contesto y me da un beso en la frente para continuar con nuestro camino.

- Tranquila, ahora estás conmigo.- me dice Asher al ver que cerraba los ojos para no seguir viendo- ellos ya no podrán hacerte nada, ni ellos ni nadie.

Aparto la mirada y la fijo en el suelo mientras seguimos caminando.

- ¡Eres una inútil que no sirve para nada!- me grita Aron desde el suelo mientras atan sus manos- Te merecías todo lo que te hicimos y te mereces más, ¡y nunca me voy a arrepentir por hacer lo que hice!