Jade corrompido

Encuentro fatal

Wei Ying había quedado huérfana a los 4 años, sus padres habían ido a una cacería nocturna pero murieron, la pequeña no tardó en terminar en las calles. Si hubiera tenido un poco más de suerte hubiera terminado con los Jiang. Pero no fue así.

Fue un viejo amigo de su madre,
Lan Qiren, quien se encargó de ella. Lan Qiren había ido a Yiling en busca de ella y en cuanto la encontró se la llevó consigo, así Jiang Fengmian no la pudo encontrar por más que la buscó por todo el pueblo.

Wei Ying terminó en Cloud Recesses y conoció a la familia Lan. Los más peculiares fueron Lan Wangji, por ser tan callado y tímido y Madame Lan, la mujer la observo con algo de dolor y desesperación y parecía preocupada por verla ahí. Mientras tanto el líder Lan la miraba con bastante felicidad, había notado la mirada de su hijo menor y sabía que ya había encontrado a su futura esposa.

-Para que se pueda quedar debe aprender como ser una Lan, de inicio a final-Madame Lan ahora sí miro con lastima a la niña, ya sabía lo que le esperaba y por eso deseaba evitarle ese cruel destino. Haría lo posible por ayudarla a evitar que fuera encerrada como ella

-¿Qué tal si se queda bajo mi cuidado?-sugirio tímidamente-hay cosas que no pueden enseñarle por ser niña-Todos los presentes la miraron atentamente y después asintieron, era lo mejor, Madame Lan era la mejor opción.

-Bien, luego vendremos a verla-dijo Lan Qiren.

-Si, ven pequeña-dijo con voz suave-vamos a darte algo mejor para vestir-La pequeña niña asintió y se acercó a la amable mujer, se sentía a gusto con ella.

Madame Lan y Wei Ying fueron a la cabaña de la mujer. Ahí fue bañada, peinada y arreglada. La pequeña tenía las tunicas Lan pero sin la cinta de frente. Madame Lan en sus adentros pensaba en como sacar a la niña de Cloud Recesses, ella no merecía sufrir lo mismo que ella. No quería que cayera en las garras de su hijo, igual a su padre. Le dolía saber que sus hijos eran igual a su padre, sus hijos serían monstruos en el futuro, Lan Xichen también lo era, pero en menor medida que su hermano, o eso parecía ser. Quería como sea salvar a esa pequeña de ese destino.

Pero ni siquiera podía cuidarse así misma de su marido. Y peor aún, su cuñado ayudaba en todo este lío monstruoso, ella sospechaba que Lan Qiren no pudo poner sus manos encima de Cangse Sanren y por eso trajo a su hija, para fingir que era su hija con la difunda o algo así. Ahora que él sabía que Lan Zhan la quería, haría todo para que fuera de él. La madre de la niña siempre fue su mejor amiga, en su memoria la ayudaría. Pero debía encontrar una oportunidad para llevarsela de esta infierno y que nunca las encontrarán, aunque tuviera que ir con Baoshan Sanren para lograrlo. La niña se quedó dormida en brazos de Madame Lan.

-Te lo prometo pequeña, sin importar nada voy a sacarte de aquí y nadie nos hará nada, ya no-La abrazo con fuerza.

La niña no entendía nada de lo que ocurría ahí creía que todo sería distinto, que vivirá tranquila y bien.

-No pasa nada, yo te voy a cuidar-le aseguró la mujer-solo obedece en todo lo que te digo y ya-intento calmar a la menor. Sentía bastante temor por la niña.

Necesitaba protegerla, pero debía encontrar una salida. Aunque sabía que no podía salir de ahí sin la ficha de jade, tal vez debería intentar aprovecharse de Qingheng-Jun para poder robarle la ficha y escapar junto a la niña, pero también debía encontrar su espada.

-No seas tonta Lihuan-se dijo así misma-sin importar lo que debas hacer debes irte de ahí-La pobre mujer suspiraba sin saber que uno de sus hijos escuchaba sus palabras.

Lan Zhan no permitiría que su madre le arrebatara a su futura esposa, le diría inmediatamente a su padre sobre los planes de su madre. El niño fue de inmediato hacia el cuarto de su padre para informarle lo que había escuchado.