Metro

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P.O.V Darah

Ash se miraba serio y un poco preocupado.

Ash-¿Que te pasó? Sabes que no puedes caminar, joder Darah. Eiji y yo te estamos cuidando para que no hagas estas cosas, tienes que avisarnos-me llevó al cuarto y nos metimos en la cama-cuéntame que pasó

-Nada, solamente tuve una pesadilla, soñé como Alex desaparecía delante de mi y yo no pude hacer nada, siempre trato de olvidar. Ex-prostituta, sicaria, huérfana y loca, y todavía no olvido lo que pasó. Soy una débil cuando se trata de personas que quiero.

Ash-No seas tan dura contigo misma-lo miré.

-Tenía 7 cuando maté a un hombre por primera vez, mi padre me envió para llevar mercancía y me intentó violar, estaba realmente asustada pero era imposible escapar. Matarían a mi madre-las lágrimas se hicieron presentes-lloré, lloré porque era incapaz de sentir culpa de ser una asesina. Me odio, temo de mi misma, maté a mi jodido padre, no sé cuanta sangre hay en mis manos-miré hacia mis manos llenas de marcas y heridas-no tengo sentimientos, no siento nada, nada...-me tapé la cara, no quería que me viera llorar. Noté como pasó sus cálidos y fuertes brazos por mi espalda

Ash-Enana, tú y yo somos ángeles creados en el infierno. No fue tu decisión, era cuestión de vida o muerte. Cálmate, ya estoy contigo.

-No me dejes sola-dejó de abrazarme y se tumbó en mis muslos con sumo cuidado.

Ash-Quédate a mi lado, no quiero estar solo otra vez-le acaricié la cabeza y caímos rendidos en la cama.

Por la mañana

P.OV Ash

Me desperté y vi las piernas de la rubia, miré hacia arriba y estaba durmiendo. Decidí levantarme y tumbarla bien en cama. Estuve navegando en la computadora mientras ella y el japonés dormían plácidamente.

Eiji-¿Ash?

-¿Te desperté?

Eiji-No

-Duerme. Es temprano.

Eiji-¿Qué haces?

-Robo

Eiji-Esto...Ash, ¿Vas a seguir haciendo estas cosas?

-¿Que cosas?

Eiji-Ya sabes...tiroteos y todo eso-sonreí.

-¿Estás asustado?

Eiji-Solo digo que ser imprudente no es la única forma de ser valiente. Soy mayor, deberías escuchar.

-Bien, perdóname, onii-chan

Eiji-¿Por que eres así? Lloraste como bebé anoche.

-Espera, ¿cómo sabes eso?

Eiji-Porque no hablan especialmente bajo.

-Vamos, onii-chan. Estoy realmente ocupado ahora, ¿podrías dejarme tranquilo?-el pelinegro salió del cuarto y escuché una risa-¿de que te ríes? Minion.

Darah-Cuidado con esa boca viejo, tengo mi bebé aquí.

-¿Puedes dejar de tratar a tu arma como un humano? Me asustas.

Darah-No, chúpala-me giré y la miré fijamente.

-¿Quieres que el descuidado japonés te cure las heridas?-dije burlándome de ella.

Aprendiendo a amar- Ash Lynx Donde viven las historias. Descúbrelo ahora