coincidir | levihan au (en pausa)

cinco | cambios

-¿Estás seguro?- papá repetía la pregunta mientras el doctor Ackerman retiraba el baumanometro de mi brazo izquierdo.

-Tan seguro como de que yo soy el médico. Tranquilo Zoe, ella está en perfecto estado. Solo fue la sorpresa, ¿no es así?

Me pregunta y yo asiento bajo la atenta mirada de mis padres, Nanaba, Mike, Abel, Rico y... mi prometido.

-Solo necesita descansar. Ha sido un día agitado- me guiña un ojo, se levanta y comienza a acomodar sus cosas mientras Nanaba se sienta a mi lado

-De acuerdo doctor, así será- por primera vez hablo y lo digo solamente para que todos dejen de mirarme con esa cara de preocupación, aunque realmente no quiero que el médico se vaya y me deje sola con ellos.

-Kenny, Hange, llámame Kenny. Soy un viejo amigo de tu padre,- ríe por lo bajo mientras niega con la cabeza- ¿no me recuerdas cierto?

Niego con la cabeza algo apenada.

-Bueno la última vez que nos vimos fue hace casi 10 años,- mi padre interfiere- y en esas vacaciones Hange no convivió mucho contigo.

Tengo vagos recuerdos de esas vacaciones es cierto, pero en ninguno recuerdo haber conocido a Kenny Ackerman.

-Pensé que eras tú quien administraba el hotel en ese entonces- finalmente habla mi madre.

-No, ese era el negocio de mi difunto cuñado. En esa ocasión me permitió hospedarlos ahí, más yo no tengo idea de cómo se maneja un hotel.- "Kenny" terminó de acomodar sus cosas y me dio una última mirada antes de retirarse.

-Bien Hange, descansa. Y enhorabuena a ambos por el compromiso- Dirige su mirada a Moblit también quien está al pie de la cama y le agradece mientras papá se acerca dándole una palmada en la espalda.

-Te acompañaré afuera y de nuevo muchas gracias por examinarla.

-No hay nada que agradecer. Bien, entonces me despido. Muchas felicidades a las tres.- Nos mira a Nanaba, Rico y a mí- Vaya cómo pasa el tiempo... me hacen sentir viejo.

Finalmente sale junto con papá seguidos por mi madre.

-Por favor saluda a Kuchel de mi parte, ¿sí? ¿Cómo está su niño? Bueno ya no lo ha de ser, la última vez que lo vi...

Las voces se pierden en el pasillo mientras nos quedamos los seis solos en la habitación. Un silencio se hace presente interrumpido solo por las manecillas del reloj.

-Yo realmente no lo recuerdo- finalmente Rico rompe el silencio. Ya no trae puesto su vestido de novia usando en cambio un conjunto de falda y saco color beige a juego con los pantalones de Abel.

-Lo conocimos aquella vez que fuimos a Shinganshina de vacaciones, el verano antes del último año de bachillerato- Nanaba es la que le contesta, ambas me miran.- Cuando Hange...

Moblit suspira lo suficientemente fuerte para que todos lo escuchemos interrumpiendo a Nanaba.

-Te entiendo amigo, yo también me moleste al saber que se fueron solas a la playa ese verano. Tampoco lo he perdonado aún- Mike trata de aligerar el ambiente poniendo su brazo sobre sus hombros.- Pero ahora pueden ir juntos de luna de miel- Comienza a picarle las costillas mientras ambos ríen y Abel se les una. Olvidé que ninguno de ellos nos acompañó a ese viaje y por tanto no saben de mi pequeña "travesura" como la llamó papá.

-Muéstranoslo- Rico se pone de rodillas sobre el colchón y toma mi mano izquierda moviéndola ligeramente para apreciar el anillo- ¡Pero si es precioso!

-A verlo- ahora es Nanaba quien me sostiene la mano. En uno de los movimientos el diamante brilla por la luz.- Sí que lo es. Te luce increíble, felicidades.