EXTRA 2

386 33 46
                                    


ALERTA: Erwin bottom, Levi top. 

Se que a algunas personas no les gusta esta dinámica de cambio de roles en el EruRi, así que por eso prefiero avisar antes que comiencen la lectura.  A mi me encanta cuando cambian los lugares y siempre quise escribirlos así, espero respeten eso. 

Si leen, espero que disfruten. 

Ahora si, procedo ah:



¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.



Era una tarde lluviosa y Levi se encontraba en su tienda de té observando como las gotas mojaban en suelo. Por lo mismo, el negocio estaba poco concurrido así que Levi se planteaba cerrar mas temprano. De repente la campanilla en la entrada sonó anunciando la llegada de un cliente.

Se trataba de un cliente quien se había convertido en una compañía agradable para Levi cuando aparecía por ahí. Este decía que el té de Levi era fantástico y que siempre que pudiera, ahí estaría.

Se acercó a la barra para hacer su pedido y saludar a Levi. Tomó una de las mesas mientras esperaba su pedido.

—Hace frío, así que necesito una bebida caliente, la mas caliente que tengas, querido Levi.

—Con gusto, Gab. —Levi asintió y comenzó a preparar su té.

¿Ha estado solo durante el día, verdad, Levi? —preguntó Gab para hacerle la plática.

Casi. La lluvia ahuyenta a todo mundo.

—¡Qué fatal, querido!. Entonces trae algo para tí y siéntate acá a charlar un rato. Yo invito —dijo divertido.

Estaba por hacerlo, lo más seguro es que seas el único idiota que entra de aquí al cierre.

Uy, que agresivo. Me caes tan bien que soportaré tus malas palabras.

Levi en pocos minutos tuvo listas dos tazas de té hirviendo. Además, sacó del refrigerador dos rebanadas grandes de pastel relleno de nueces y fresas. Enseguida Gab se dió cuenta, jadeó de gusto.

—Vaya, te estás viendo bastante generoso.

—Oh, esto. Solo porque tu invitas.

—Además de que preparas el mejor té de Frankfurt, eres bastante listo para agrandarme mas la cuenta.

—No. Pero quiero que lo pruebes. Estos pasteles los hace mi esposo exclusivamente para mi. No los encontraras en ningún otro lugar—dijo con una gran sonrisa. —Solo no te enamores de mi Erwin.

Oh, Erwin, Erwin, Erwin. Mejor dime donde se consigue ese tipo de hombres. Dios, cada vez que vengo me hablas de él como si fuera un dios griego.

LAS ALAS DE LA LIBERTAD - ERURI 💞🌌Donde viven las historias. Descúbrelo ahora