Problem.

Capitulo 4.

Narra Justin.

-Quiero que lo encuentres así sea debajo de las piedras- dijo Oliver, mi jefe.

-Tratare de encontrarlo- me levante de mi asiento dispuesto a largarme de ahí.

-Y otra cosa, Bieber- voltee a verlo- Lo quiero vivo- asentí y salí de aquella mansión.

Subí a mi motocicleta y conducí en las calles de Brooklyn. Oliver es mi jefe, me indico un trabajo y me dio la dirección de la casa del tipo pero no es seguro. Este es mi trabajo, mi vida.

A veces me arrepiento de trabajar en estas cosas, pero ya estoy acostumbrado y se que esto no es normal para un adolescente, he estado en problemas, muchos para mi gusto. ¿Tengo familia? Si, pero cuando se enteraron que estaba metido en esto, todos, absolutamente todos, me dieron la espalda. Solo me quedan mis hermanos y sobre todo mi madre. ¿Mi madre? Ella es una gran mujer, no esta a mi lado, pero se que me esta extrañando porque cuando era niño escape de casa. ¿Porque? Estuve en problemas. ¿Que problemas? La mafia, la maldita mafia, mi padre me metió en todo esto y ¿ahora que? No podre salir tan fácil de este infierno. Pero aun así le veo el lado bueno, si yo no estuviera metido en todo esto no estuviera aquí, no tuviera dinero, no tendría siquiera un techo y hay algo que jamas me arrepentiré, nunca hubiese conocido a mis amigos, a los verdaderos Ethan, Chris, Chaz y Ryan. ¿Tengo novia? Ni yo mismo lo se, pero créanme, no me interesa tener una. Tengo a Selena, que quita mis necesidades pero aun así ella no me importa y se que esta enamorada de mi pero yo no quiero nada con ella.

Aparque mi motocicleta en unas de las casas que se suponía que estaba viviendo el hombre ese. Fui hasta la casa y camine por el jardín para llegar hasta la parte de atrás, estaba mirando la casa para ver si alguien la habitaba. Se veía en buen estado, así que decidí hacer ruido en la parte de abajo para que el tipo bajara y distraerlo, así podría yo subir a cualquier ventana de una habitación.

Me coloque un gorro negro para ocultar mi rostro, subí hasta llegar al balcón de una habitación y me di la vuelta viendo hacia el balcón. Empece a buscar entre mis bolsillos el arma, pero no la encontraba en ninguno de los bolsillos. Y fue ahí que lo recordé, la había dejado en mi chamarra.

-Maldita sea- murmure. Pero recordé que tenia una cuchilla en mi bota, me agache para tomarla, la agarre entre mis manos y cuando iba a levantarme, sentí como algo de vidrio caía en mi cabeza. Caí al piso inconsciente y de ahí no recordé mas nada.

**

-¡Justin!- escuche gritar mi nombre- ¡Justin por favor despierta!- me sacudían bruscamente.

-¿Ah?- dije con tono adormilado.

-Que bien que despiertas- dijo una voz de chica, se me hacia conocida- Pensé que te había asesinado- Y ahí reconocí la voz de la chica, era Alisson.

Abrí los ojos de golpe y la mire, ahí estaba con expresión de preocupada. Mire a mi alrededor y me di cuenta de que estaba en una habitación, al parecer era de ella.

-¿Que hago aquí, Alisson?- pregunte. El rostro de ella se torno a enojado y se levanto de golpe de la cama, yo repetí su acción pero quede sentado en su cama.

-¿Como puedes preguntar eso?- se cruzo de brazos- ¿Acaso no vez que estabas a punto de robar mi casa?- me levante de golpe de la cama y me acerque a ella.

-¿Esta es tu casa?- ella asintió enojada. Mierda, debí haberme equivocado. Pero creo que no, el nombre del tipo que ando buscando es un tal Leonardo Clark. Y según Oliver esta es su casa, no era seguro, pero esta lo era.

-¿Ahora me explicar...- la interrumpí.

-¡Espera!- grite y ella me miro con una ceja levantada- Mierda no, no puede ser- lleve mi mano a la frente.

-¿Que?- dijo- ¿Que pasa?- se altero.

-¿Como se llama tu padre?.

-¿Porque lo quieres sabe...- la volví a interrumpir.

-¡Dilo!- grite exasperado.

-Leonardo- respondió rápidamente, levante una ceja- Leonardo Clark- Oh no, mierda no. ¿Leonardo? ¿Leonardo era padre de Alisson? Esto no puede estar pasando.

-No puede ser- susurre.

-¿¡Justin que pasa!?- grito- ¡Me estas asustando!- negué. No podía decírselo, se veía que no sabia nada, pobre chica inocente.

-Te morirás cuando sepas que es lo que hace tu padre- ella me miro extrañada.

-¿De que hablas?.

-¿Quieres que te cuente?- asintió- Pues agárrate, que de seguro te caerás de espaldas y golpearas fuertemente tu cabeza.- reí.

-¡Habla ya!- salto varias veces como una niña de 5 años después que le quitan su paleta e hizo que riera.

-Esta bien- limpie una lagrima falsa- Bueno, tu padre es...- me interrumpió un grito.

-¡Alisson, hija ya llegue!- reconocí esa voz al instante, era Leonardo.

Oh-oh, esto se pondrá bueno.