Sin Margen De Error

Error#38: Par de manos

El pelinegro tomaba unos tragos de la botella de té verde, por insistencia de sus senpai, porque aparentemente no creían que estuviera bien tragar una pastilla en seco mientras escuchaba la situación de Yashiro-senpai.

- ¿La foto de... un fantasma? – Preguntaron al mismo tiempo Amane y Yako al terminar de escuchar la historia de la chica.

Yashiro asintió nerviosa en lo que acariciaba la cubierta del cuaderno que trajo consigo.

- El otro día Aoi dijo que tenía algo que contarme y termine escuchando una nueva historia sobre unas fotos extrañas – Relato Nene lo sucedido sin omitir ningún detalle de la conversación que tuvo con su amiga.

Y para dar validez a su historia, abrió el cuaderno hasta una página al azar y les mostró el contenido a sus amigos.

- ¿Eh? –

- Es maíz –

Esto último lo dijo Amane de un modo serio, por lo que todos lo voltearon a ver y hubo un silencio de unos pocos segundos.

- Parece que tienes un gran problema – Comentó el inari subiéndose al hombro de la chica para poder observar más de cerca las fotografías.

- Es un poco gracioso – Dijo Kou al notar en una como las manos transparentes se posicionaban detrás de las cabezas de los miembros del club de jardinería para hacerles la señal de la v.

- Si, las fotos en si son más divertidas que espeluznantes – Le dio la razón Yashiro en respecto a lo divertidas que son. – Pero, desde que vi las fotos, parece que como si estuvieran pasando cosas extrañas –

- ¿Cosas extrañas? – Pregunto Amane apoyando la barbilla sobre el hombro del Minamoto.

Kou al notar que el pelinegro tenía dificultades para mantener su barbilla en su hombro, doblo un poco las rodillas para apoyarlo mejor.

- Ellas siguen brotando – Pronunció con una voz casi inaudible un cansado y exasperado Yashiro jalándose sus cabellos con frustración con las manos. – Las manos solo siguen brotando por todas partes –

Aquello confundió a Amane y a Yako, a excepción de Kou quien ya sabía la situación, por lo que guardaron silencio para que continuara.

- Las manos se muestran con tanta naturalidad que solo los noto por los extremos de la vista, pero no hacen nada malo – Explicó Yashiro recordando como las veía entre sus clases y tenía que ignorarlos por su bien. – Pero, no puedo ignorarlos por siempre, realmente me molesta –

Un par de lágrimas se asomaron en sus ojos por el sentimiento de incompetencia que crecía dentro suyo cada vez que tenía que ver esas manos fantasmales intentando llamar su atención y fingir todo el tiempo como si no estuvieran ahí.

Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando sintió como una pequeña lengua lamia las lágrimas que se asomaban en sus ojos.

- Todo estará bien – Intentó consolar la inari con pequeñas muestras de cariño.

Que, si la cara de araña lo viera comportarse así con una humana, no dudaba que empezaría a burlarse de ella y a decir cosas sobre cómo se ha ablandado por la edad. De eso no tenía duda alguna, a pesar que esa maldita araña era el más suave de los dos con respecto a los humanos.

Maldito hipócrita.

- Muchas gracias, Yako-san – Le agradeció la humana conmovida por su intento de animarla, cuando gira su cabeza un poco para decir algo más, nota algo por el rabillo del ojo que le hace estremecer. - ¡Ah! ¡Ahí están! – Grito en pánico mientras señalaba a su izquierda.

Rápidamente todos voltearon a ver en donde señalaban la albina y se toparon con varios brazos transparentes sobresaliendo del escritorio de Tsuchigomori.

- ¡Están de vuelta! – Grito Nene en lo que se escondía detrás de Kou y a un lado de Amane.

- Woah, son esas cosas – Exclamó sorprendido el pelinegro al mismo tiempo que se alejaba de sus senpai para acercarse a las manos.

- Hey, espera Amane, no puedes acercarte descuidadamente a esas cosas – Advirtió Kou al mismo tiempo que lo sujetaba del cuello de la camisa y lo empujaba hacia ellos.

No quería arriesgarse como la última vez en la azotea de la escuela.

No necesitaban otra repetición como el de la grulla de papel.

Debido a eso, el exorcista no dudo en dar un paso adelante ante cualquier peligro que representara los brazos fantasmales.

- Oigan manos malvadas, ¡Les mostrare lo que un Minamoto puede hacer! – Exclamó Kou dando un paso hacia adelante para defender a sus amigos de las manos que han estado molestando a su senpai. - ¡No hay nada de qué preocuparse! ¡Acabaré con esas manos en este instante! –

- ¡¡K-kou-kun!! ¡Como se esperaba de un exorcista! – Dijo Yashiro con admiración por el acto de valentía de su amigo.

- ¿Ira a estar bien? – Pregunto Amane entrecerró los ojos preocupados, mirando las manos del rubio exorcista.

Las manos de Kou aún no habían terminado sanar completamente desde que fue herido por su propio ataque al intentar atacar al guardián de su libro hace apenas unas semanas atrás.

Debió de haber sido grave si aún seguía con las manos vendadas.

Por las dudas se acercó y sujeto al número dos de sus axilas para levantarla del hombro de Yashiro para acunarla entre sus brazos. El espectro no hizo nada para impedirlo y simplemente se acomodó entre los brazos del humano.

- ¡Hey, estúpidas manos! – Exclamó el exorcista para llamar la atención de las manos, mientras apoyaba un brazo sobre el escritorio. - ¡Vamos a pelear! –

Kou parecía emocionado por su ingeniosa idea.

Pero para Yashiro y Amane, solo se le quedaron viendo inseguros si esa técnica funcionaria contras las manos.

- ¿Por qué pulsos? – No pudo evitar preguntar Nene sin saber exactamente en cómo eso lo ayudaría a exterminarlos.

- Bueno, de alguna manera tiene un poco de sentido porque... son brazos – Intentó argumentar el pelinegro pero su voz iba disminuyendo conforme seguía hablando hasta convertirse en un murmullo.

Las manos siguieron sin moverse, hasta que una se animó y agarró la mano de Kou.

- ¡¡Aquí vamos, ¿de acuerdo?!! ¡Debes saber que mi fuerza--¡- Pero inesperadamente fue interrumpido cuando su brazo fue empujado a un lado del escritorio.

Marcando así su derrota ante los brazos.

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Curiosidad que mata#39

Perdóneme por la forma de actuar de Yashiro con respecto a las manos, el fin de semana me puse a ver el anime de Mieruko-chan en compañía de mi madre. (Aparentemente lo vio en tiktok y le interesó lo suficiente para preguntarme su nombre, a ella no le gusta ver anime a excepción de los que vio de pequeña, ósea candy candy).

Y no podía sacarme de la cabeza la actitud de Miko-chan, por lo que termina reflejándola en Yashiro.