4.La extraña figura

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No existen las palabras para describir el pánico que sentí al ver esa mano en la caja perfectamente decorada y a mis padres tratándome de consolar aunque mis lágrimas simplemente salían solas,llamaron a la policía obviamente y ellos revisaron mi habitación en cada rincón,mamá me hizo chocolate caliente mientras a pocos metros veía a los oficiales con posibles evidencias del crimen. En el orfanato todo era más sereno y pacífico,lo único malo eran los tratos de ciertos encargados que nos veían con lástima o desprecio,pero no era nuestra culpa ser abandonados por nuestros padres de bebés o niños pequeños ya sea por falta de recursos o por embarazos no deseados.

Al cabo de un par de horas ellos salieron, nos dejaron en soledad,ni cené por el mal recuerdo de ese momento y el olor tan asqueroso de la carne descompuesta,la policía cerró mi habitación con una cinta sólo por esa noche pero mis padres me dijeron que podía dormir en la de invitados,eso hice aunque de mala manera,las pesadillas recurrentes me obligaban a dar cortos paseos por el lugar,cuando llegué a la cocina, tomé una pastilla para dormir sentí una especie de brisa fría en mi piel, una silueta recorrer tan rápido la habitación que dí un salto y el vaso que llevaba en la mano casi cae al suelo de no ser por mis torpes reflejos.

-Calma Raven es sólo tu imaginación - me dije a mi misma sentí una especie de mareo seguido de ensoñación que me obligó a subir la escalera de manera un poco apresurada,sentí todo daba vueltas,tanto que pensaba que iba a caerme de las escaleras pero pude llegar a la habitación y cerré los ojos para quedar en un profundo sueño.

Desperté con un leve mareo,esta habitación es un poco apagada comparada con la otra que tenía más decoración juvenil,pero esta es con colores neutros,con una sola cama,una mesa de noche y un baño. Me levanté con pesadez,revolví mi cabello rizado e ir hacia la sala a buscar algo que comer,vi a mamá comer unas tostadas y me dispuse a buscar el cereal pero noté algo extraño.

-Mamá ayer habían unas pastillas para dormir aquí y hoy no veo nada - ella volteó algo sorprendida y negó de manera absoluta la afirmación que hice,se despidió de mi para luego salir perfectamente arreglada hacia su auto y dejarme con una gran duda.

-Podría jurar que anoche habia un frasco de pastillas y esta me obligó a dormir - mordí mi labio nerviosa,desayuné despacio para luego salir a tomar un poco de aire al jardín hasta que vi una cara conocida asomarse por la cerca seguido de una sonrisa risueña,el chico trepa un poco y llega a mi lado.

- Te ves muy cansada Raven - revuelve mi cabello mientras me dedica una mirada preocupada,me ayuda a regar las rosas mientras evita mi mirada,actúa un poco extraño hoy considerando que el día anterior estaba mucho más animado.Noto que tiene un moretón muy reciente en el brazo mientras el toca una rosa blanca y hace preguntas existencialistas que me dejan pensando un poco pero aún más su mancha color azul oscuro.

-Mikael deberías ponerte una pomada - le señalo su brazo y su mirada se empieza a tensar más de lo que debería para ser un simple accidente,siento un leve mareo pero lo ignoro porque creo que es por falta de sueño o algo así.

-Me caí trepando una ventana,pero mamá me trató anoche no te preocupes demasiado Raven-  contesta en voz baja pero siento cierta incomodidad en su voz que me da un poco de miedo,siento que quiere decir algo más pero se reprime porque al parecer no tiene la confianza para decirlo.

-Tu padre que dice al respecto - digo en tono de broma para quitar la terrible tensión del momento pero nota su incomodidad y me cuestiono si hice la pregunta adecuada.

-Es el ocupado David Auckand alcalde del pueblo dudo que tenga tiempo para opinar de esto - al escuchar esto trato de cambiar de conversación a una más animada ya que siento que para Mikael hablar algo de sus padres es algo así como un tabú,lo entiendo yo también tengo una historia familiar complicado con mis padres adoptivos,escucho un sonido a lo lejos de un auto y unas chicas bailando muy animadas mientras que los chicos tocan el claxón de manera muy persistente llamando a Mikael que es imposible que los pueda ignorar.

La magia de ser yoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora