Dancing with the Drinks [Maitake]

CAPITULO さん (3)

Pensamientos

Llegó el día siguiente. Takemichi obviamente no durmió lo suficiente porque había una cosa que quería saber.

Necesitaba saber si Chifuyu regreso ileso al club.

Esta pregunta quedó grabada en su suave cerebro en el momento en que se despertó de sus 3 horas de sueño y se dirigió al trabajo desde las siete de la mañana. Eran alrededor de las ocho y media y nunca había llegado al trabajo tan temprano.

Demonios, ahora que lo pensaba, la tienda abría mucho más tarde los lunes. ¿Por qué llegó temprano? No estaría abierto hasta dentro de dos horas. Si intentaba abrir la tienda antes de lo habitual, recibiría un descuento en su paga por "no seguir las reglas". Takemichi realmente pensó que su vida estaba jodida en ese momento.

-¿Takemichi? ¿Eres tú?-

La voz fuerte y aterciopelada solo pertenecía al único Koko de los Black Dragon. Takemichi giró la cabeza para ver al hombre que corría hacia él en un estado de pánico leve, los ojos un poco dilatados y jadeando levemente. Maldita sea, parecía que atraía a la gente a la que le gustaba correr hacia él.

Pero eso era aparte del punto. Takemichi se volvió completamente hacia él, su corazón latía nerviosamente por verlo de nuevo. -¡Oye Koko, quiero decir, jefe! ¿Qué pasa?-

-Estoy tan contento de haberlo encontrado aquí. Aunque parece que llegas temprano.-señaló Koko, al ver que la tienda estaba cerrada. -¿no abre a las diez los lunes?-

Takemichi gimió. Se sentía una mierda sentir la sal frotando la herida. -Me sorprende que me buscaras tan temprano, en realidad.-

-Bueno, no lo sabría ya que no trabajo aquí.-se rió ligeramente Koko. Correcto. UPS.

Sin embargo, había algo más importante que necesitaba preguntarle. Sobre su amigo. Agarró su camisa, transfiriendo todos sus nervios a ella. -Koko, tengo algo que preguntarte, si no te importa.-

El otro sonrió fantasmal. -Del mismo modo. Tenemos que hablar. Vamos a desayunar a WcDonalds, ¿de acuerdo?-

---

-Han pasado años desde que vine aquí.-comenzó a hablar Koko. Habían hecho sus pedidos y ahora estaban esperando que les sirvieran la comida.

Takemichi arqueó una ceja, vinculando su declaración con las palabras del día anterior. -Chifuyu dijo que finalmente saliste de la oficina. ¿Eso significa que rara vez sales del club?-

El jefe suspiró, inclinándose hacia adelante mientras apoyaba la barbilla en la palma. Miró la mesa, aparentemente distante. -Sí. Desde esa reunión, los lacayos de Toman han estado molestando nuestras instalaciones. Así que tengo que quedarme en la oficina para escribir todo el maldito papeleo a Big Boss.-

Takemichi comenzaba a sentirse mal por él. Llevaba unas bolsas en los ojos terribles, que podrían rivalizar con las de un panda. Su camisa de vestir estaba alborotada y su cabello era un desastre total. El blazer que se echó sobre los hombros al menos ayudó a reducir la cantidad de arrugas que ve el público. A pesar de eso, Takemichi no subestimaría la carga de trabajo y la cantidad de energía necesaria para su puesto.

-Aunque no le hacen daño a nadie, bueno, hasta anoche, todavía tengo que hacer un seguimiento de sus acciones en nuestros clubes. Es un jodido dolor.-

De repente, el cerebro de Takemichi se detuvo. -Espera, espera, espera. ¿Hasta anoche?- ¿Eso significa que Chifuyu ...

-Lo que estás pensando es correcto. Se lastimó.-