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Hola mi nombre es Isabela mi historia comienza desde la preescolar, siempre

me consideraba una niña tímida y muy tranquila mis compañeritas abusaban de mi

gentileza tanto que llegaron al grado de hacerme bulín y es muy horrible crecer

con ese trauma desde la niñez se preguntarán dónde estaban mis padres que no hicieron

nada, pero se equivocan mis padres no sabían de esto, cuando eres niño y tienes

esa inocencia las circunstancias te obligan a callar y eso fue lo que a mí me sucedió,

pasaron los años crecí con esa sensación dentro de mí en solitario el único apoyo

que tuve fue mi primo él me cuidaba de las niñas malas que me molestaban,

siempre he tenido problemas con mi apariencia, deje la preescolar y pasa a la primaria

cuando creí que mi vida cambiaria para bien y no fue así, mis inseguridades

siendo niña seguían conmigo, aunque pude hacer una o 2 amigas que fue lo mejor

que me pudo pasar, los años pasaron y seguí avanzado a llegar a la secundaria,

al mismo tiempo que mis inseguridades, es ahí cuando inicia tu pubertad donde

el sexo opuesto empieza a traerte, había chicos que me gustaban, pero nunca dije

nada por mi apariencia ha sido una persona gordita y eso me provocaba muchas

inseguridades, había clases en donde mis compañeros me miraban raro no les gustaba

nada, siempre me consideraron la gordita de la clase, había una hora en donde tomábamos

taller clases de dibujo y varios grupos se unían y en esa clase toco dibujar a

un compañero y como fue mi compañera me dibujo y me gusto su dibujo porque si

me parecía bastante a mi retrato, cuando toco el turno de enseñar nuestro dibujo alguien dijo que en ese dibujo no me parecía, ya que era gorda y fea, claro está

había otra compañera muy guapa que se llamaba igual a mí y por eso la confusión,

eso fue muy incómodo para mí, el corazón me dolió al escuchar esas dolorosas palabras

al grado de querer llorar, pero me resistí a llorar no lo hice y todo mi tiempo

en secundaria fue estar sola jamás pude sentir un primer beso de adolescente,

ni un primer amor solo suspiraba ningún chavo se fijó en mí y así transcurrió

el tiempo, lo que duro los 3 años de secundaria, mi aspecto físico no cambio seguía

siendo el de una gordita callada con muy pocos amigos, mis padres siempre

estuvieron fuera de esta información nunca les quise decir nunca me atreví a

hacerlo, me gradué y pasé a la preparatoria, mis padres tenían problemas económicos

a veces comíamos y en otras veces no, o no me tocaba llevar dinero a la escuela

para las copias, digamos que a causa de eso baje de peso y no era algo que me

alegrara porque si me veía bien, pero para bajar debe ser porque tú te lo propongas

en fin la economía me obligo a bajar de peso, con este cambio los chicos que hablaron

mal de mí y me criticaban poco a poco se interesaron en mí, sin embargo, llego mi

oportunidad de rechazarlos y burlarme de ellos me reí hasta donde quise y eso

me hacía sentirme bien porque ya podía sentirme más libre con mis pensamientos,

poco a poco los meses iban pasando.

ENCONTRANDOME CON EL AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora