Alpha y Alpha [Todobaku]

Capitulo 1

No podía comprenderlo, simplemente no podía.

Su corazón bombeaba más rápido en su pecho, mientras los nervios afloraban sobre su piel.
El inquietante hormigueo en su estómago y las innegables ganas de seguir viéndolo, solo estaba creando más y más confusión en su interior.

¿Por qué? ¿Por qué le pasaba esto?

La luz se proyectó en aquella figura alta y elegante del joven adolescente de las mitades. Su cara resplandecía a sus ojos, mientras cada acción que hacía se quedaba profundamente grabada en su mente. Incluso podía sentir que aparecían flores alrededor de aquel rostro contrario.

Frunció el ceño y caminó en dirección a los baños.
Abrió la puerta bruscamente, se paró delante de un lavamanos cualquiera, abriendo el grifo para después echarse agua a la cara.
Miró su reflejo en el espejo, percatándose de la extraña sensación proveniente de su corazón.

Puso una mano en su pecho, notando una emoción extraña. Se sentía como si estuviera soñando, como si volara por un lugar desconocido, llenando su interior de un color dulce y cálido.

¿Que estaba pasando? ¿Por qué le sucedía esto con solo recordar al bastardo de las mitades?

Gruño por lo bajo, asustando a un pobre omega que recién había salido de un cubículo.
El alfa rubio le lanzó una mirada asesina, para segundos después salir del baño, dejando al chico muerto de miedo.

Todo era tan malditamente confuso. Su interior estaba hecho un desastre y eso lo irritaba.

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Otra vez. Y otra vez. Y una vez más.

Su corazón latía de una manera que nunca imaginó ¿Lo peor de todo? Es que solo Sucedía cuando estaba con ese maldito bicolor. Su cuerpo se volvía más relajado e incluso soltaba su feromona levemente ¡de forma inconsciente!

¡Esta mierda no puede seguir así! Debía de hacer algo para calmar sus desordenados sentimientos.

Lo iba hacer ¡claro que lo iba a hacer!
Solo que de alguna manera terminó comprando una botella de té caliente, espera ¿por qué carajos compraba una bebida cuando iba a encarar al mitad-mitad?

Apretó los dientes, retomando su camino con mucha determinación y justo cuando se interpuso en el camino del alto. Su mano, de forma inesperada, le tendió la lata de bebida.

Katsuki quedó sin alma en ese momento.

El Todoroki lo miró sin comprender, mientras tomaba la bebida caliente que usualmente compraba y que hoy no pudo ir a buscar.

-Bakugō, esto es...

Pero no terminó de hablar cuando el alfa rubio se había alejado rápidamente de él, dando grandes zancadas.

¿Que carajos...acaba de suceder?

Bakugō estaba tan seguro de que iba a encarar al mitad albino, desafiarlo y solucionar lo que lo acomplejaba. Pero de alguna manera...le dio el té.

...

¡Mierda!

Mordió sus labios, mientras su cara se ponía completamente roja. Su corazón estaba latiendo como un loco.

Malditamente vergonzoso ¡Sus sentimientos lo dominaron!

Se sintió tan débil ante el bicolor que no pudo decirle nada.
No quería admitir que estaba huyendo. Nunca lo haría.

Por parte de Shōto, miró la lata de té en su mano, la abrió y tomó un sorbo. Fue extraño ¿por qué se sentía tan dulce? Usualmente este té no era muy dulce. Miró la lata, notando que era la misma que tomaba siempre. Extraño.