★CAPÍTULO 6★

3.2K 413 57
                                    

◞───────⊰·•·⊱───────◟

[Narrador omnisciente]

Cerró la puerta tras él y recargó su espalda en la gruesa madera, su cuerpo se sentía tan pesado y no se creía capaz de dar un paso más, su mente divagaba en pensamientos de lo sucedido hace unas horas atrás y también en viejos recuerdos que él había atesorado por años.

Lentamente se deslizó hasta quedar sentado en el frío mármol del suelo, sus lágrimas comenzaron a salir sin notarlo y sus inseguridades llegaron como pesadillas a atormentarlo, de nuevo tenía ese sentimiento de soledad y traición invadiendo su pecho pero esta vez era tan insoportable que se sentía morir. Sus lágrimas siguieron callendo en un llanto silencioso, las gotas saladas resbalaban por sus mejillas y morían en el filo de su barbilla y algunas otras que se desviaban terminaban en la comisura de sus labios haciéndole probar lo saladas que estaban.

Largos minutos pasaron, no sabía cuántos e incluso pudieron ser horas las que corrieron antes que con mucha dificultad se pusiera de pie, se deshizo de sus zapatos olvidandolos en la entrada y quitó su gabardina y saco arrojandolos a algún lugar de la sala, realmente no le importaba lo que sucediera con las finas prendas de ropa, no detuvo su andar siquiera sabía a dónde se estaba dirigiendo hasta que sus pasos pararon frente a su estudio, con su corazón siendo oprimido abrió la puerta de la habitación y una vez dentro cerró la puerta detrás de él, se quedó unos cuantos segundos parado en la entrada viendo a la nada y sólo sintiendo sus lágrimas caer, sentía que su alma había salido de su cuerpo ya que este actuaba sin que él lo pensara por lo qué pronto se encontró abriendo uno de lo muebles de su oficina, tomó una botella de licor de la vitrina y no reparó en tomar un vaso para servirse en cambio abrió la botella arrojando el corcho a algún lugar en la habitación para llevarse la botella a los labios y así poder tomar la mayor cantidad de agua ardiente, sintió su garganta quemar a causa del alcohol pero eso no lo  detuvo de seguir bebiendo si no hasta que sus lágrimas que caían en gotas gruesas casi lo ahogan, Jungkook bajó la botella y desesperado trataba de tomar grandes bocanadas de aire para llenar sus pulmones.

Cuando su respiración volvió a la normalidad Jungkook se enderezó en su lugar, no sabía cuando se había encorvado, tal vez fué una de las consecuencias por su casi ahogamiento pero no se reparó a indagar en aquello, se acercó a su escritorio y lo rodeó sentándose lentamente en su silla de oficina, sus ojos se perdieron entonces en la pila de hojas engrapadas que yacían en la plenitud de su escritorio, una punzada llegó a su corazón provocándole soltar un gimoteo en medio de su llanto que parecía haberse avivado con intenciones de no parar en un futuro próximo.

En sus manos tomó las hojas y las acercó para poder ver más de cerca todas las palabras escritas por él que formaban la historia más hermosa que pudo haber salido de su destrozado corazón, entonces al leer el primer párrafo que yacía escrito en el papel su mente viajó los recuerdos de su pasado, pasado que era tan doloroso como el presente.

Cuando Jungkook tenía tan sólo siete años de edad vivió la dolorosa experiencia de ver a sus padres divorciarse. Su padre había dejado de amar a su madre, pero ella seguía amando al hombre que la dejaba por ir a hacer su vida con alguien más, tal vez lo amaba demasiado o tal vez el verlo irse de la mano de otra mujer fué demasiado para ella por lo que la mujer se desquició y todo el amor que solía llenar su corazón había sido reemplazado por odio, venganza y rencor, lamentablemente quienes pagaron las consecuencias fué gente inocente.

Ante los ojos de el niño se desmoronó la familia perfecta que el había creído tener por algunos pares de años, su padre no estaba más en casa y su madre ya no les trataba a él y a su hermano mayor con el cariño y amor que solía hacerlo, en cambio los miraba con un desprecio tan grande como si ellos fueran culpables de toda la situación. Uno de los momentos más horribles en su vida y que probablemente jamás olvide, fué cuando sus padres pelearon por la custodia de sus hijos y al final el juez había dictado que cada uno se quedara con un niño, como si los infantes fueran unos juguetes a los que pueden entregar a alguien sin remordimiento. Jungkook fué separado de su hermano mayor quien fué puesto a la custodia de su padre y el pequeño Koo fué entregado a su madre o más bien fué dejado con la que se encargaría de hacer su vida un infierno.

★IDEAL LOVE★ | KOOKGI Donde viven las historias. Descúbrelo ahora