[El Protector de las Hadas](Traducción)

Capítulo 147: Preparación para la batalla

N/A: Aquí está el nuevo capítulo. Disfrute y no olvide revisar y dejarme saber lo que piensa.

Descargo de responsabilidad: no soy dueño de Fairy Tail o Bleach. Lástima, sería genial si lo hiciera.}

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Protector de las hadas

Preparación para la batalla

"¡POR FIN!" Gritó Chacal mientras se estiraba a la luz del sol, de pie en el marco de la ventana de uno de los lados de Plutogrim en su forma de cubo. Girando levemente la cabeza, una mirada fulminante dirigida al diablo detrás de él, gruñó mientras preguntaba: "Entonces, ¿quién diablos se supone que eres de todos modos? No recuerdo haberte visto antes de morir".

"Deliora", respondió Gray simplemente. Sería bueno intentar agradarle a este demonio, pero era difícil cuando no podía responder con sus verdaderos sentimientos al respecto. "El Rey de la Tierra".

"¿Deliora?" Girando en el borde de la ventana, se agarró a ambos lados del marco para estabilizarse mientras se inclinaba hacia adelante, estudiando a Gray más de cerca. "Hay algo diferente en ti."

"Por supuesto que eres idiota," Gray no pudo evitar responder. "Mírame. No soy un gigante imponente".

"Oh, eso es lo que era", dijo Jackal estúpidamente antes de gruñir. "Sí, como yo diría eso. Sin embargo, algo es diferente. ¿El Maestro Zeref alteró un poco tu forma? Tu energía es definitivamente diferente de la que era antes. Simplemente no puedo señalarlo".

"¿Por qué eso importa?" Gray preguntó, realmente esperando que el demonio dejara de indagar más. Cuanto más hacían preguntas, más lo comparaban con lo que sabían de Deliora en el pasado, más se desvanecía su ilusión de que Deliora tenía el control. Ya estaba bastante seguro de que Zeref se conocía a sí mismo, aunque el motivo por el que aún no había actuado era un misterio y una bendición. Pero estos demonios no serían tan amables si se dieran cuenta de la verdad, y como estaba, todavía necesitaba tiempo para acostumbrarse a sus nuevos poderes y su Maldición. "Soy Deliora. Nada más importa. ¿A menos que dudes de mí?"

Eso hizo que Jackal retrocediera. Parecía que incluso si tenía curiosidad por él, no estaba dispuesto a desafiar a alguien que debía estar al mismo nivel que los principales demonios de Zeref. Fue descarado, no estúpido. "Para nada", respondió finalmente, rebotando hacia adelante por la ventana y plantándose en el borde como un asiento improvisado. "Es extraño verte de nuevo. Después de escuchar que muriste hace años, ninguno de nosotros esperaba verte de nuevo a menos que el Maestro Zeref se tomara el tiempo para recrearte él mismo".

¿Zeref podría hacer eso? De alguna manera eso no le sorprendió. Había visto la biblioteca que albergaba todas las copias de los demonios de Zeref. Todo lo que necesitaba el mago oscuro era un poco de tiempo y podía recrear casi cualquiera de ellos. Con el tiempo suficiente, no tenía dudas de que el Deliora original podría recrearse. Bueno, debería estar agradecido al menos de que Zeref se hubiera tomado el tiempo de experimentar con ese demonio. Si no lo hubiera hecho, estaría muerto. Él tampoco habría sido maldecido, pero eso fue todo en el pasado y mucho más allá de su capacidad para cambiar.

A juzgar por la reacción de Jackal hacia él también, era seguro decir que no todos los demonios estaban al tanto de los experimentos en los que Deliora había estado involucrada. Hasta ahora, solo unas pocas de las Nueve Puertas del Demonio parecían conscientes de ellos. Quizás era una necesidad de conocer la base o quizás a algunos demonios no les importaban esos detalles. Sin embargo, cualquier demonio debajo de ellos no tenía idea. Para ellos, era Deliora, un demonio que los hacía parecer hormigas en comparación. Al menos nunca se molestaron en interrogarlo por miedo incluso a ofenderlo.