1._¡Vendida a el piromano!

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Un chico rubio finjia ser mujer, así es, es zenitsu, el caminaba por los pasillos admirando cada puerta, buscando información de el enemigo, escuchó los llantos de una niña.

Cuando Hiba a abrir aquella puerta corrediza escuchó su nombre ser nombrado por una de sus compañeras.

-¡Zenko-chan! ¡Buenas noticias! ¡Un hombre guapísimo pago tus deudas y va a comprarte!

Zenitsu: ¿Q-que?

- ¿No lo sabías? ¡Haz Sido vendida al mejor postor!

Zenitsu: y-yo...voy a mi habitación-

-¡A dónde crees que vas señorita?!

Escuchó otra voz, era la de la oirán de el lugar, estaba agarrándole de el pelo, se notaba enojada.

-Ve a qué te maquillen, ya te vas, necesitas verte linda, o tal vez vaya a reclamar rembolso, suerte novata.

Lo aventó al suelo algo bruscamente, la chica de antes se lo llevó a otra habitación, ahí recuerda que lo maquillaron como una bella mujer.

¿De verdad era el? ¿O era una bella chica? Solo sabía que se miraba tan femenina que nadie le reconoceria

Con su gran audición escucho una conversación de el piso de abajo, entre unas mujeres.

?: ¡No es justo! ¡Nosotras somos bellas chicas y ella es fea! ¿Porque la compraría?

¿: Agh...no entiendo.

‽: tal vez el comprador tiene más un oído musical, les dije que esa chica llegaría lejos.

¿: Escuché que el hombre es piromano ¿Acaso querrá a zenko para quemarle la cara?

‽: Ese no es nuestro problema.

¿¡Piromano?! Oh no....

El hombre el cual era su "comprador" había entrado en la sala, pues ya debía recoger a "zenko".

Entonces,

Más tarde...

Había Sido llevado a una mansión, muy grande, de unos 20 metros de altura, muy bien cuidada.

Pero no se podía preocupar por eso, ya que el hombre, efectivamente, solo lo quería para "quemarlo".

Lo había encerrado en una especie de sótano, en el cual, solo había una cama, una mesa y un baño.

El hombre era muy amable, pero su piromania hacía que su amabilidad diera miedo.

En esos momentos, zenitsu estaba atado, el hombre sostenía en una mano, un cerillo ya prendido en fuego, y en la otra el rostro de zenitsu.

Hacerco el palito (cerillo) a la mejilla de zenitsu, y comenzó a quemar levemente la piel.

Ante esto, zenitsu comenzó a gritar del dolor, pues sentía como la piel se quemaba, y en cuanto el hombre retiraba el fuego, su piel se ponía de un color rojo cereza muy fuerte.

Pero...solo es el inicio

¡Pyromaniac man!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora