So Sweet

Vienen por los dos

Harry es el capitán de la policía/ Draco, era uno de los criminales más buscados.

Su corazón latía a mil por hora. Lo tenían, lo habían atrapado después de tanto tiempo buscándolo.

Caminó por el pasillo hacia unos policías que estaban hablando.

-¿Donde está? -les pregunto. Ellos hicieron un saludo.

-En la sala de interrogatorios.

Asintio y siguió caminado hacia la sala que le habían dicho. Llegó y abrió la puerta. Frente a él, sentado en la silla con las manos esposadas sobre la mesa, estaba Draco Malfoy; el criminal más buscado en toda Europa.

El rubio le sonrió de lado.

-Capitán Potter, sigue estando igual de.. -se mordió el labio y lo miro de arriba a abajo; se lo comió con la mirada.-...guapo y sexy, desde la última ves que nos vimos en Madrid y no pudo atraparme.

-Lo se, me lo dicen a menudo. -el rubio rodó los ojos.- Bueno Malfoy... -miro las hojas que tenía en su mano.- Según esto, te atraparon.. -hizo una mueca.- ¿en tu departamento mientras te drogabas?

-Así es.

-Junto a Zabini y Parkinson. -abrió un poco los ojos.- No me habían dicho que Pansy Parkinson igual la habían atrapado. -Draco se encogió de hombros.- Bueno, quizás más tarde la pase a visitar, ahora es mejor que te lleven a tu celda antes de que te lleven ante el juez mañana.

-Voy a salir de este lugar Capitán. -dijo el rubio.

-Lo dudó. -Harry salió de la habitación. Aviso que se iba hacia su casa y luego tomó su auto y condujo hacia una cafetería para pedir algo para llevar.

También aprovecho de pasar a la libreria para comprar un libro. Cuando estaba escogiendo un libro su teléfono suena.

-Diga.

-Capitán... -escuchó un suspiro.- Malfoy a escapado.

-¿¡Qué!? -corrió hacia su auto y lo encendió.- Voy para allá.

En menos de diez minutos llegó a la estación de policía, dentro estaba hecho un caos. Un teniente lo guió hasta una habitación para conversar.

-¿Qué pasó?

-Bueno. -el chico estaba nervioso.- Yo y otro compañero fuimos a dejar a Malfoy a su celda y yo creo que pasaron quince minutos y lo fui a ver p-pero ya no estaba.

Harry golpeó la mesa y depues miro su reloj.

-Ya me voy, estoy muy cansado. -paró en la puerta.- Me avisas si tienen alguna información.

El chico asintió y Harry se fue. Condujo hasta su departamento, llevaba su comida en la mano. Abrió la puerta y entró.

-Pensé que ya no llegaría, Capitán. -le dijo Draco sentado en su sillón.

-Me llamaron de la estación para avisarme que escapaste, tuve que ir para no levantar sospechas.

Se acercó a donde estaba Draco, se sentó a horcajadas de él y lo besó. El rubio lo agarró de la cadera para acercarlo más.

-Te extrañé. -le dijo Harry al separarse.

-No te pongas cursi. -le dijo el rubio.

-Maldito imbecil. -le dijo Harry mientras le daba un golpe en la cabeza.- Hace más de tres meses que no nos vemos, hoy casi me muero cuando me llamaron y me dijeron que te habían atrapado, ¿y ni siquiera me dices que me extrañaste? -se levantó de las piernas de Draco, en dirección a la cocina.

-Harry... -se levanto tras él.

-¿Es por ella cierto? -Harry se dio vuelta para mirarlo.- ¿Por Parkinson?

-¿Qué..?

-¿Te gusta ella ahora? ¿Te acostabas con ella mientras no estabas conmigo? -dijo el azabache.- Porque si es así dime en este momento para así poder llevarte a la estación y que esta vez te encierren en... -no termino de hablar cuando tenía la boca de Draco sobre la suya.

El rubio puso sus manos en su espalda para acercarlo, bajo sus manos por su espalda hasta llegar a su trasero y apretarlo haciendo que Harry soltara un gemido.

-Te extrañe muchísimo. -le dijo Draco sobre sus labios.- Y no, no me acuesto con Pansy. -volvió a apretar sus nalgas.- Ella esta saliendo con Blaise. -dejo besos cortos en su boca.- Y también extrañé demasiado tu trasero. -eso hizo reír al azabache.- Te amo Harry.

El azabache lo volvió a besar, pasando sus brazos por su cuello.

-Yo igual te amo Draco. -el rubio lo elevó y Harry pasó sus piernas por su cintura.

-Vamos a la cama bebé.

Ya en la cama, hicieron el amor lentamente, besándose cada parte de su cuerpo, acariciandose. Diciéndose a través de cada caricia, cada beso lo mucho que se habían extrañado, lo mucho que se amaban y se habían necesitado el uno al otro.

Cuando terminaron Harry se quedó apoyado en su pecho mientras el rubio acariciaba su espalda y de vez en cuando tocaba su trasero, que tanto le gustaba al rubio.

El teléfono del azabache sonó una vez y éste lo fue a ver. Era un mensaje de un teniente. Cerró los ojos y suspiró, volvió a apoyarse en el pecho de Draco.

-¿Ocurrio algo? -le pregunto el rubio. Harry asintió.- ¿Qué pasó?

-Lo siento muchísimo. -levanto su cabeza para mirarlo. Los ojos del azabache estaban brillantes.- La policía viene hacia acá.

Draco se sentó en la cama.

-¿Qué? ¿L-les avisaste? -Harry negó.- Eras el único que sabía que estaba acá, t-tú les dijiste...

-No, Draco..

-¡Maldito imbecil!

-¡Escuchame! -Draco se quedó callado.- T-tambien vienen por mi.

-¿Qué..? No...

-A-alguien debió avisarles que yo te ayudaba. -se agarró la cabeza.- ¡Maldición!

-¿Qué?

-Esta noche iban a interrogar a Parkinson, ella sabía de mi, sabía de nosotros, Draco.

-No, Harry, ella no pudo...

-Claro que pudo ser ella, no seria la primera vez que te delata para salvarse ella.

-Pero, ella...

-¿Qué no recuerdas que por culpa de ella, la policía supo quien eras? - pregunto.- Lo hizo una vez... y lo volvió a hacer. Ya no hay nada que hacer.

-P-por supuesto que si Harry... t-tenemos que escapar...

-¿A donde? -lo agarro de las mejillas para que lo mirara.- ¿A donde Draco? Todo el mundo te conoce, todo el mundo sabe quién eres y pronto sabrán quién soy yo. No tenemos a donde ir. -besó su frente.- Ven acá.

Harry volvió a tirarse en la cama junto con Draco, mientras acariciaba su cabeza.

-Te amo Draco, y no me arrepiento de nada de lo que hice.

Draco lo miró a los ojos.

-Te amo Harry y no me arrepiento de haber hecho que un policía traicionará a los suyos.

Los dos rieron.

-Te voy a amar para siempre.

-También yo, no dejaré de amarte nunca.

Se abrazaron y comenzaron a darse besos mientras que a lo lejos se escuchaban las sirenas de las patrullas.

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No es un final muy feliz pero al menos iban a ir a la cárcel juntos.

Metas:

-Ir a la cárcel junto a tu pareja.

Jskdhskdbd era mentira. No me hagan caso. Cuídense y no se metan en problemas.

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