Dahlia Snape es la hija del maestro de pociones. Ella es todo lo contrario a él, descarada, atrevida y coqueta. Incluso parece la viva imagen de él. Pero, por supuesto, la ha mantenido en secreto. Sin embargo, no por mucho tiempo.
Cuando el Institut...
Es enero y la segunda prueba es mañana, Dahlia recibió un empujón de un tal Hufflepuff para bañarse con el huevo, así que eso es lo que Dahlia va a hacer. Con Pansy, Draco y sus chicos, encontró el baño de los prefectos y se cambiaron y se pusieron ropa más adecuada.
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Los chicos abrieron el baño y las chicas entraron, Dahlia levantó el huevo y respiró hondo antes de sumergirse en el agua y mirar a Pansy, que se había unido, antes de abrir el huevo. En lugar del chirrido que había antes, comenzó a sonar una suave armonía.
Donde nuestras voces suenan, ven a buscarnos,que sobre la tierra no se oyen nuestros cantos.Nos hemos llevado lo que más valoras,y para encontrarlo tienes una hora.
Tanto Dahlia como Pansy asomaron la cabeza por encima del agua y les dijeron a los chicos las palabras, Draco lo escribió en un pergamino y todos se relajaron un poco en el agua antes de sentirse empapados y con ganas de salir.
Todos se secaron, vistieron y mientras se iban, entró un escéptico Harry Potter, deteniéndose al ver al grupo. Draco estaba a punto de hacer un comentario, pero Dahlia le tapó la boca y le envió un "buena suerte" a Harry antes de sacar a Draco a rastras, seguido de los demás.
Los cinco fueron al lago negro para encontrarse con los demás y Dahlia les contó la pista.
"El Lago Negro". Crabbe gritó.
Los demás lo miraron confundidos y preguntaron simultáneamente.
"¿Qué?"
Suspiró y explicó.
"Leí sobre las criaturas en el Lago Negro, y por tu descripción sobre quién cantó la pista, parece que provino de los Merpeople. Son un poco espeluznantes y gritan como banshee si están sobre el agua, pero debajo, son como sirenas. Cantan muy bien, creo que los Merpeople tienen algo que ver con la segunda prueba".
El grupo lo miró con orgullo y recibió aplausos y palmaditas en la espalda, Crabbe sonrió para sí mismo y finalmente se sintió orgulloso de sí mismo.
Mientras el grupo se estaba divirtiendo y riendo entre ellos, de repente se callaron cuando Ojoloco se acercó tambaleándose hacia ellos.
"Odio detener la diversión, pero la profesora McGonagall quiere al señor Malfoy en su oficina."
Dahlia contuvo un comentario sarcástico y preguntó a la ligera.
"¿Para qué?"
Ojoloco puso los ojos en blanco y respondió.
"Eso no es asunto suyo, señorita Snape. Además, le vendría bien una buena noche de sueño. La segunda prueba es mañana y necesita estar lista. ¡Ahora, vaya!"
Todos se levantaron y se ofrecieron el uno al otro la noche antes de partir. Aleksander, Ivan y Dahlia fueron a su barco, Pansy, Goyle, Crabbe, Blaise y Theo fueron a su sala común y Draco siguió a Ojoloco a la oficina de McGonagall, solo para ser sometido a un profundo hechizo.
