Compatible.

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Rin estaba en un estado de shock que, a ojos de Amaimon era bastante divertido, trono los dedos frente a la cara del mayor de los gemelos aguantando reírse al ver como salía de su actual estado.

- ¿Significa que si tengo sexo con otro hombre en este estado... puedo tener un hijo? - dijo viendo al peliverde, el cual solo atino a darle una señal afirmativa con la cabeza - ¿y cuando llegue al ultimo mes voy soltar unas... feromonas que atraerán a los demonios? -

- Solo a los que sean compatibles - dice Amaimon volviendo a leer la pila de papeles que tenia.

- ¿Y por qué me mantienes tan cerca? - pregunta un poco sonrojado, ya que el mayor no lo había soltado.

- ... ¿como te sientes después de sentir ese dolor? - le pregunta sin despegar la mirada del papel.

- ... Mejor de hecho -

- Los Omegas pasan por esos síntomas para atraer a los alfas, cuando tienen uno cerca ya no son tan fuertes -

- Ah... gracias... por esto - dijo mirando al frente para no ver a la cara al mayor.

Amaimon solo lo vio de reojo por un momento, luego volvió a su trabajo con una casi imperceptible sonrisa acompañada de un sentimiento cálido en su pecho.

Pasaron un tiempo en silencio, Rin estaba cansado y faltaba poco para quedarse dormido, Amaimon se dio cuenta de eso y se paro de su sitio, tomo la mano del chico y lo saco del agua guiándolo hasta el fondo de la cueva, trono los dedos apareciendo unas toallas y ropa para ambos... después de que se vistieron Amaimon sigue caminando más al fondo del lugar, Rin lo sigue casi durmiéndose parado, pero se sorprende al ver lo que parece una cama hecha de algodón, además había varios greenmans por esa parte, también noto que había varias plantas y musgo por esa parte, además de que esa parte de la cueva era mas fresca.

- ¿Por qué en esta cueva hay tantos camios de temperatura? - pregunto frotándose los ojos.

- Manipule las venas de lava de este volcán para ajustar la temperatura - dice como si fuera lo más normal del mundo - duerme aquí yo seguiré leyendo - dice con voz ronca, Rin por su parte no sabía porque pero fue directo a acostarse, casi instantáneamente durmiéndose al tocar la superficie.

Amaimon se le quedo viendo un momento antes de sentarse junto al muchacho, llamo a la pila de papeles que floto hasta su lado y siguió con su trabajo... Pasado un rato escucha que su teléfono suena y tronando los dedos le aparece en la mano.

- ¿Aniue que pasa? - 

- ¿Como esta Okumura-kun? - pregunta Mephisto con una sonrisa de oreja a oreja... aunque Amaimon no lo noto.

- Esta durmiendo... ¿sabes que esta en celo verdad? - pregunto despegando su vista para dirigirla hacia el muchacho.

- Si lo envié hacia alguien compatible -

- ... - 

- ... -

- ... -

- ... ¿Hola? -

- Me estas buscando pareja... ¿otra vez? - Amaimon nunca había tenido pareja y ya había pasado varias veces por su celo, Mephisto tenía la maña de buscar demoniós compatibles con su hermano para que el Rey de la Tierra le diera algún sobrino, pero el demonio peliverde siempre terminaba matándolos con la escusa de que no quería una pareja débil.

- ... Si, siempre te quejas de lo débiles que son los otros demonios así que me encargue de encontrar a alguien que ya te ah derrotado antes - se excuso el pelimorado.

- Eso no es excusaaaaa!!!! - se le elevo un poco la voz al sentir que alguien apretaba su cola bastante fuerte, miro para atrás viendo como aun dormido Rin teniendo cara de molestia tenia su cola sujeta en un fuerte agarre.

¡¿Un Amor Planeado?!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora