Cap. 9

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No existía nadie, no había nadie, no era verdaderamente importante para ni una sola persona en el mundo, no importaba para nadie y esa, era la verdad más dolorosa que podía sentir mientras avanzaba hacia delante para lanzarse de lo alto de la azotea

Cuando de repente un jalón en el brazo lo detuvo en seco y lo bajó de la cornisa a techo firme y seguro, al ser tan abruptamente sacado de su propia cabeza y habiendo perdido toda valentía, Oliver comenzó a temblar y perder el equilibrio mientas caía al suelo

Pero no golpeó el duro techo del edificio, mas bien cayó sobre algo suave, fue cubierto con una suéter y rápidamente envuelto en un abrazo cálido, cuando pudo enfocar la mirada vio que quien lo tenía en brazos era Javier que lo revisaba con diligente atención y cuidado

Oliver; ''¿Por qué?''

Javier; ''¿Preguntas porque? ¿Ahora? ¿Enserio? No puedes hacer algo tan imprudente frente a un policía y esperar que no haga nada. Dios estás ardiendo en fiebre necesitas un hospital''

Oliver; ''... por favor'' dijo murmurando algo casi inentendible por la lluvia

Javier; ''¿Qué?''

Oliver; ''Un hospital... por favor''

Sin esperar otra palabra, Oliver fue sacado en brazos de la azotea por Javier, no estaba seguro de cuándo se durmió, pero a la hora de despertar estaba en la cama de Javier con un fuerte dolor de cabeza y garganta cuando el policía entró a la habitación pudo ver a sus espaldas el sol de la mañana brillando

Javier; "Ya despertaste, que bueno, tienes que darte un baño"

Oliver; "¿Qué me pasó?" dijo incorporándose en el lugar

Javier; "Te llevé al hospital, no te preocupes no tienes nada grave" se acercó ofreciendo unas pastillas y un vaso con agua, "Los moretones no llegaron a dañar ningún órgano solo dolerán un tiempo en lo que sanan trata de no empeorarlos y estarás bien"

Oliver tomó las pastillas y se las tomó, seguía teniendo sueño y se sentía muy ligero todavía, vio por sobre la camisa de tirantes se vió envuelto en unas vendas blancas, levantó la mirada hacía Javier con ojos de cachorro

Javier; "Descuida, no tienes ningún hueso roto, solo una pequeña fractura en una costilla nada grave"

Oliver; "Duele como el infierno para no ser grave"

Javier; "Sí puede que lo sientas peor por la gripe, pero la doctora dijo que estarías bien si descansas y para no empeorar la fractura debes evitar los esfuerzos físicos"

Oliver; "Soy prostituta y bailarín, mi vida depende de esfuerzos físicos"

Javier; "Ese es un punto, pero debes descansar ¿Alguien puede cuidar de ti?"

Oliver; "Nadie cuida de mi, no es como si fuera alguna sorpresa"

Javier; "¿Tienes donde quedarte?"

Oliver; "¿Y eso qué?"

Javier; "Aunque la fractura no es grave debes descansar por lo menos 6 semanas ¿Crees poder evitar trabajos pesados?"

Oliver; "Me las arreglare" dijo con un claro tono deprimido

Javier; "Bien, entonces ya que estas consciente, ¿Cómo te pasó esto?"

Oliver; "No es importante, solo fue un accidente"

Javier; "¿Un accidente? ¿Qué tipo de accidente?"

Oliver; "Solo un accidente déjalo así"

Javier; "Bien, entonces ¿Por qué intentaste saltar allá? La última vez que te vi estabas decidido a mantenerte con vida"

Oliver; "Mira solo ¡Detente!"

Gritó, con el recuerdo de su castigo arrasando con todos sus pensamientos y anteponiéndose como la única cosa en la que era capaz de pensar y en consecuencia, comenzó a temblar

Oliver; "Solo... para con tu interrogatorio de rutina, no necesito escuchar eso ahora"

De repente algo comenzó a sonar, un teléfono desechable que Oliver llevaba consigo, un teléfono que no debería sonar a menos que fuera una emergencia, al ver el número de la llamada se puso pálido y su temblor empeoró mientras contestar

Javier se alejó lo suficiente para no escuchar la voz del celular, claro que sabia que algo estaba muy mal, pero no había actuado conforme al protocolo ante un intento de suicidio ni tampoco había ido a hacer todo el largo y aburrido papeleo necesario para abrir una investigación como para entrometerse en asuntos que legalmente hablando, no le conciernen, pero aun así no salió de la habitación, solo por si acaso

Oliver; ''¿Si?'' la voz le temblaba, no podía creer que pudiera hablar

Giancarlo (Tel.): ''¿Dónde estás?''

Oliver; ''Me desmaye en la calle, acabo de salir del hospital''

No tenía idea de cómo había conseguido hablar, la voz de Giancarlo fue como una apuñalada que se clavaba en sus recuerdos tratando de meterse profundo para que nunca pudiera olvidar lo que había sucedido, sentía que caminaba sobre un camino de fuego mientras el silencio se le hacía eterno

Giancarlo (Tel.): ''¿Estas bien?''

Oliver se quedó helado, no esperaba que precisamente ese tipo le preguntara como estaba y por fin cayó en cuenta de que estaba hecho bolita y temblando en sobre manera casi al borde del llanto, Javier estaba cerca y al verse en compañía no podía permitirse flaquear, tomo aire y respondió

Oliver; ''Sí... estoy bien, solo debo estar... un tiempo en descanso'' dijo entrecortando sus palabras

Giancarlo (Tel.): ''¿Cuánto tiempo?''

Oliver; ''6 semanas'' cerró los ojos esperando el regaño

Giancarlo (Tel.): ''Perfecto entonces estarás perdiendo el tiempo por 6 semanas ¿Qué se supone que haga contigo? ¿Eh?... Cuando vuelvas hablaremos''

Se colgó la llamada y Oliver rompió el celular antes de acercarse al borde de la cama a punto de vomitar, Javier corrió a socorrerlo mas no le permitió acercarse

Javier; ''Escucha, puedo ayudarte si me acompañas a declarar a la oficina, yo me encargaré de que estés a salvo y...''

Oliver; ''Cállate... no necesito que me salves ¿De acuerdo? Solo... solo...''

Javier; ''¿Estas en peligro?''

Oliver; ''Yo no... no estoy seguro''

Javier; ''¿Puedo ayudarte de alguna manera?''

Oliver; ''No hay manera... si quieres ayudarme de verdad... solo pégame un tiro''

Javier; ''No puedo hacer eso...'' dijo preocupado antes de hablar con tranquilidad, ''No puedo ayudarte como policía entonces ¿Cómo me dejarás ayudarte?''

Preguntó con cautela, por alguna razón sentía como un cazador que trataba con una criatura salvaje herida y asustada que pese a su dolor rehuía de su lado

Oliver; ''¿Dejarías de hablar?'' Javier asintió y Oliver suspiró, ''Esta bien... Has lo quieras entonces''

Javier; ''Bien, entonces vamos, tienes que darte un baño antes de comer''

Dijo alegremente con una sonrisa, sabiendo que la pequeña criatura herida al fin le permitía acercarse un poco más. Le ayudó a Oliver a levantarse y juntos salieron de la habitación mientras un que el teléfono roto se quedaba abandonado en la basura y un hermoso collar con una esfera de oro con bellos grabados y alas como de ángel a los lados tranquilamente encima de la almohada a que su dueño volviera y le abrazara

Gracias a TiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora