No se como llegue a este pueblo, solo recuerdo que fui perseguido por varias personas, caí por un barranco, después de eso, nada...Solo se que ella me salvo, solo para ser un experimento, uno que salió mejor de lo que pensó.
Era todo le que sentía aquel niño. El pequeño abrió sus ojos, notando que estaba en un lugar extraño, parecía estar dentro de una celda, sucia y húmeda. Frente a el, al lado de el...
Básicamente en cada dirección(menos arriba y abajo.)habían celdas, pero en estas, habían más personas, la cuales se veían mal, desnutridos y al punto de un colapso.
Esto causo miedo en el pequeño infante, quien solo retrocedió hasta topa con la pared fría de su celda.
El pequeño se empezó a hiperventilar, sentía que esto debía ser uña pesadilla, a lo que se puso en posición fetal. Ocultando su cara entre sus muslos.
De la nada, una campanilla sonó, llamando la atención de todos, cada persona miro a la misma dirección, una puerta, en la cual había una figura parada, la cual tenia aquella campanita.
La figura empezó a caminar lentamente entre los pasillos de las prisiones de barrotes estrechos, caminando de una forma burlesca, como si buscara simples cosas en una tienda. Hasta que paso por la reja del pequeño niño, quien lo vio curioso y con algo de miedo, entonces la figura se inclino de cuclillas frente a la celda.
???:Como te llamas, pequeño?[pregunto con una sonrisa en su rostro, pero el pequeño no respondió.]Ya me acorde de ti...[recuerdo con una sonrisa, señalándolo.]Eres el niño que vino del rió.[la frase de aquel hombre, llamo la atención del chico.]Que? Acaso no lo recuerdas?[pregunto con una risa burlona, a lo que el niño solo negó con la cabeza.]Moreau te encontró, flotando en el río, como un pedazo de madera.[exclamo, haciendo la pantomima con la manos.]
Niño:Y-y q-que hago aquí?[pregunto un poco temeroso.]
???:[da una media sonrisa.]Lamento que tengo malas noticias para ti...Pero, estas aquí para ser...JUZGADOOO!!!.[exclamo con una sonrisita.]
Niño:Q-que?! Por quien?![pregunto con miedo.]
???:No te preocupes, serás juzgado por la líder de la aldea.[exclamo para ponerse de pie, dandole la espalda a la celda, empezando a caminar.]Y si tienes suerte, no acabaras como el resto de estos idiotas.[musito, refiriéndose al resto de personas en las celdas.]
Aquel hombre iba a cruzar el umbral de la puerta, pero la voz del niño lo hizo detenerse.
Niño:DONDE ESTOY?! QUE ES ESTE LUGAR?! QUIEN ERES TÚ?![exclamo en un fuerte tono, haciendo que las demás personas se taparan los oídos.]
???:[gira un poco su cuerpo, mirando en dirección al niño.]Yo? Soy Karl Heisenberg. Y tu, estas en, la Aldea de las Sombras.
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