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— ¿¡M-MIKEY-CHAN!?

Se exaltó y soltó una patada inconsciente, debido al temor de la escena con la que se encontrado al tan solo levantar la sábana.

— P-perdón... — Inmediatamente se disculpó, Mikey despertó con la patada, quejándose y maldiciendo a Draken, Kencchin como lo llama la comandante. — ¡T-te juro que no era mi intención Mikey-chan! — Suplicó por un perdón.

Manjiro la fulminó con la mirada. Takemichi tembló víctima del miedo.

Al borde de pedir una disculpa de rodillas, Takemichi se vio acorralada. Mikey al despertar un poco más y percatarse de la persona frente a ella suavizó la expresión.

Soltó un bostezo estirándose por completo. — Buenos días Takemicchi. — Dice dibujando una sonrisa.

Takemichi al escuchar a Manjiro se permitió relajar sus músculos y expresión, cuál se tornó tensa de solo presenciar a Manjiro mirarle de manera asesina. — ¡B-buenos días Mikey-chan!

Intentó sonreír, pero está muy asustada y confundida como para hacerlo, lo único que pide son respuestas.

¿Cómo terminó de esta manera con Mikey-chan?

Su paz mental necesita que aquella pregunta tenga una respuesta.

— Oh... — Exclamó Sano.

Observó debajo de la sábana, levantó una ceja sorprendida. Sus pechos descubiertos fueron lo primero que divisó al ver por debajo.

— ¡Y-Yo tampoco se lo que sucedió, t-te lo juro Mikey-chan! — De manera casi inmediata Takemichi intento salvar su pellejo, confesando que no sabe nada. No le gustaría que Mikey se lleve una impresión errónea de su persona.

No entiende lo que pasa y parece ser igualdad de condiciones.

Manjiro no cambió la expresión asustando aún más a Takemichi.

Mikey despojó la sábana por completo, observando su parte baja descubierta de igual manera.

Takemichi al presenciar como Mikey se desnudó, cubrió su rostro avergonzada. Mikey frunció el ceño frustrada por no entender absolutamente nada de lo que sucede.

¿Por qué mierda se desnudó? ¿Qué mierda sucedió anoche?

— E-eh...

Impaciente como es Manjiro, sin poner más trabas a su curiosidad sujetó la sábana de la rubia Hanagaki y la arrebató de un jalón.

Dejando expuesta a la menor, Manjiro jadeó.

— Takemicchi...

— M-manjiro...

Manjiro se permitió relajarse. Al inicio al verse expuesta únicamente ella creyó que hizo una estupidez.

Pero ahora que aprecia a Takemichi en su misma posición, sonríe, encajando las piezas del rompecabezas poco a poco.

Todo conspira a su favor.

— P-perdón...

— Yo... no recuerdo nada. — Se disculpó por décima vez. Mikey no entendió, ¿por qué se disculpa...?

Es culpa de ambas, ninguna tiene más responsabilidad que la otra. — Michi, no te disculpes. — conteniendo el impulso de lanzarse en brazos de la rubia oji-azul, Manjiro sonrío con un sonrojo en las mejillas.

Takemichi negó con la cabeza, sonrojada y prácticamente temblando por la vergüenza. Mikey después de segundos comprendió el actuar de Takemichi.

— Perdoname Takemichi. — Susurró, devolviendo la sábana intentando cubrirla, ocultando con los revueltos mechones de su cabello su propia timidez.

—...

Hanagaki suspiró, Mikey se quedó en su lugar, sin mover ningún músculo. No le gustaría incomodar a Takemichi más de lo que ya lo hizo.

Minutos de silencio se apoderaron por completo de la incómoda situación. Takemichi seguía nerviosa y Manjiro guarda su emoción, de verse envuelta con Takemichi en una situación como está.

Mikey de un momento a otro, sintió que debió tomar las riendas de lo que sucede. Confesar lo que siente, quizás y después de todo terminaron en la cama porque los sentimientos son mutuos.

Ser correspondida es un sueño para la comandante de la Tokyo Manji Gang y ahora parece ser un sueño cercano, a solo un paso de hacerse realidad.

Por otro lado Takemichi piensa como es que le dará la cara a Draken. Intenta alejar de su mente todos aquellos pensamientos que la hunden más en su ansiedad, pero le es imposible no hacerlo.

Cubrió sus labios con timidez, todo esto le carcome el alma. Le es inevitable sentir que es culpa suya.

Manjiro asintió determinada, ahora que esto le ha dado un pequeño empujón se siente más invencible de lo que dicen las demás pandillas.

— Takemicchi... — Manjiro susurra con una voz dulce y pasiva.

La nombrada traga nerviosa al verse pronunciada por Mikey. — ¿Si...? — Murmura insegura.

— Me gustas Takemicchi.









Weas gays y mal hechas uwu

12 AM | MitakeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora