Final [Última Parte]

669 140 20
                                    

Mew había estado teniendo sueños en donde Gulf era el que más aparecía y Pelusa también. Mew no tenía una explicación científica para lo que le sucedía.

—Tal vez debería ir a buscarlo y así solucionar esta extraña situación.

Lo haría, después de la reunión con su cliente.

Por otro lado Gulf estaba igual. Sueños y situaciones extrañas. Pelusa se divertía mucho al ver a su dueño tan confundido.

Ambos estaban en problemas y la única forma de resolverlo era estando juntos pero antes de que eso sucediera ellos tenían que darse cuenta que eran el hogar del otro.

Gulf estaba murmurando en el sofá de su casa.

La razón es porque alguien estaba irrumpiendo sus sueños y no era Pelusa. No encontraba un significado al porqué Mew aparecía en sus sueños. Recuerdos de navidades pasadas con el mayor aparecían en sus recuerdos.

Recuerdos que él no recuerda haber hecho y mucho menos con el mayor.

—¿Qué diablos está pasándome?

Gulf parecía un niño renegando pero si había una cosa que Gulf odiaba era que alguien interrumpiera su sueño.

De repente fijó su vista en la mesita que tenía en la sala y ahí pudo observar la tarjeta que Mew le había dado.

—¿Debería ir a buscarlo?

Esa pregunta la hizo al aire pero para su sorpresa Pelusa se acercó a él.

—¿Qué dices, Pelusa? ¿Crees que es momento de buscarlo?

Pelusa le contestó con un maullido Gulf sonrío por la acción.

—Tomaré eso como un sí.

Antes de ir decidió tomarse un baño y vestirse bonito. No sabía porqué pero quería verse bonito.

Escogiendo un suéter rojo, un pantalón Jean y unos bonitos tennis blanco.

Le dejó un poco de comida y agua a Pelusa y se dispuso a seguir su camino. No sabía que le iba a decir pero tal vez estando juntos podrían resolver esa rara situación. No le iba a mentir a nadie. Cuando vio a Mew sintió algo abrirse tanto en su mente como en su corazón.

Además de los raros recuerdos que venían hacía su mente al menor le pareció extremadamente guapo y por eso cuando abrió los ojos el menor después del accidente pensó que estaba con Dios pues el mayor se miraba celestial a vista de Gulf.

Siguiendo la dirección que estaba en la tarjeta llegó al despacho de abogados mucha gente se le quedaba viendo y tal vez era porque llevaba un ugly suéter muy llamativo ya que las otras personas andaban vestidas de traje.

Continúo su camino y llegó a la recepción. Una mujer con una vestimenta formal e intacta era la que estaba atendiendo. Gulf se acercó de una forma cautelosa.

—H-hola.

La mujer levantó la vista del computador lo miró de una forma un tanto despectiva.

—¿Tiene cita?

—Eh, no.

La mujer sonrió con superioridad.

—Debe hacer una antes de venir.

Gulf puso una cara de sorpresa y de pena.

—No sabía, p-perdón. No v-vengo por una r-reun-...

Y antes de que Gulf siguiera disculpándose la mujer frente a él comenzó a reír confundiendo más a Gulf.

✨🎄 HOGAR 🎄✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora