Sinae Unicornis - Aether x Ganyu (Volumen 1)

Capítulo 2: Trabajos extra - Parte 1

Los días fueron pasando a gran velocidad sin darme cuenta, cuando me propuse en darle mi apoyo a Ganyu para recuperar el tiempo que perdió por esas fallas que había cometido últimamente, no creí que terminaría apreciando ese tiempo con tanto valor. En un principio pensé que todo sería muy complicado de entender con tantos papeles por medio, pero con sus orientaciones, y la de las demás secretarias personales de Ningguang fue mucho más sencillo.

Incluso alguien tan despistada como lo era Paimon fue capaz de comprender hasta la última palabra de Ganyu, eso también producto de la personalidad tan encantadora de ella, inclusive molesta por un error desprendía armonía por el solo hecho de ser ella; los beneficios de ser un ser tan puro como ella podía ser la razón.

-"¡Oye! ¡Aether! ¡Hazle caso a Paimon!"

Mis pensamientos, mi momento de tranquilidad fue interrumpido abruptamente por un pequeño rostro inexplicablemente energético tapando mi vista del despejado cielo que cubría a la ciudad de Liyue.

-"¿Es necesario que te coloques a pocos centímetros de mi rostro solo para demostrar tu molestia?" Cuestioné con sosiego sin quitar mis ojos de los suyos.

-"¡Si no lo hago jamás harías caso a Paimon!"

La tomé de su pequeño torso y la alejé para su extrañeza de la delicadez que tuve con ella para variar, por lo general la apartaba con fuerza no desmedida, pero al menos soy más consciente del gran esfuerzo que hace por intentar ayudarme.

-"Entonces, ¿qué sucede, Paimon?"

-"Nada en particularmente extraño, Paimon solo quería saber porqué de repente se había formado una sonrisa tan peculiar en tu rostro, Paimon jamás la había visto de esa manera."

-"¿En serio? No me había percatado de si estaba sonriendo." Mencioné rozando mi boca con real extrañeza.

-"¡Vamos! ¡Dile a Paimon en que pensabas!"

-"Solo pensaba... en la tranquilidad de la que hemos sido testigos estos días, trabajar, o ayudar a Ganyu fue muy entretenido al final."

-"¡Sí! ¡Paimon aprendió muchas cosas interesantes! ¡Ahora podré conseguir platos de comida con mucho descuento!"

-"Aprendes lo que te conviene..." Suspiré tras mis palabras.

Al levantar mi mirada solo pude atinar a sonreír por su inocencia, y también por tener sus convicciones tan marcadas. Mis ojos regresaron ya no a apreciar el cielo despejado, sino a ver a un pequeña niña completamente perdida en sus pensamientos.

-"Esa niña de ahí es... ¿es Qiqi?" Cuestioné un poco confundido aún reconociendo sus ropas.

-"Sí, es ella, ¿estará en unas de su sesiones de entrenamiento?"

-"¿Entrenamiento?" Cuestioné sorprendido por sus palabras.

-"Sí, Ganyu me dijo que en muchas ocasiones cuando tomando un pequeño descanso de unos minutos para refrescar su mente, observa por la ventana a la pequeña Qiqi estirar sus músculos para poder seguir caminando con normalidad, de vez en cuando la ayuda para también despejar su mente."

-"¿Cómo es que no sabía eso?"

-"Juju~ Paimon se ha vuelto muy cercana a Ganyu." Respondió con ego.

-"Bueno, creo que será mejor que la acompañe un rato."

Aunque me dije que disfrutaría de una tarde cerca del Pabellón Yuehai para estar cerca de Ganyu y evitar que se sobre esfuerce, supongo que podría darle una sorpresa llevando a Qiqi un rato para distraerla, si ella no estaba aquí, y viendo lo distraída que está Qiqi; seguramente esperaba a que ella llegara para hacerle compañía.