Amor en tiempos de Uber

Amor en 3 segundos

Al otro día de haber sido despedido, decidió convertirse en Uber. Tenía un buen auto y una gran deuda para pagarlo. En los primeros 5 viajes descubrió lo impensado: nadie se sentó en el lugar del copiloto y, peor aún, nadie conversaba con él.

"¿En serio nadie habla en Uber? Yo juraba que estaría todo el día escuchando o contando mis historias a fascinantes personalidades que naveguen a mi lado". Pensó Jonny.

La decepción era total, hasta que llegó el momento: Era el 6° viaje en la precoz carrera de chofer de Jonny, quien se dirigía a buscar a la pasajera identificada como "Cindy" en la aplicación. Dos cuadras antes del punto de partida, vio a una joven detenida con un bolso.

"¿Seré solo yo? ¿Habrá otra persona en el mundo que vea a una persona por tres segundos y piense que es el amor de su vida? Perdóname Cindy, pero qué ganas de que esa joven que me acaba de enamorar hubiera sido mi pasajera." Soñó Jonny.

Aún con el corazón latiendo, inexplicablemente acelerado por ese fugaz amor de 3 segundos, Jonny llegó al punto de encuentro con su pasajera, Cindy. Esperó durante 2 minutos (hasta 5 permite Uber) y decidió llamarla.

- Alo, ¿Cindy?

Del otro lado, solo un extraño sonido que demostraba poca señal.

- Hola, soy Jonny, de Uber.

Sin previo aviso, la llamada se cortó.

"¿Y si me devuelvo a mirar a mi fugaz amor mientras espero a Cindy?" Planeó Jonny.

Manejó media cuadra hacia atrás, para intentar ver a esa chica que le robó el corazón. Pero no alcanzó a verla. El reloj marcaba un minuto en la espera y Cindy no aparecía. Llamó una vez más.

- Hola, soy Jonny, de Uber.

- Hola, yo pedí el Uber, pero es para una amiga. Tiene un vestido de flores.

Inmediatamente a Jonny sufrió un infarto al corazón. No literalmente, pero el amor de 3 segundos que acababa de ver dos cuadras atrás usaba un vestido floreado.

- ¿En qué calle está ella?

Preguntó con la inmensa ilusión de que nombrara la calle 20 de junio.

- En la esquina de la calle 20 de junio.

Segundo infarto en menos de un minuto. No literal, pero Jonny no podía creer lo que escuchaba.

- ¿Estás ahí? ¿Jonny?

- Sí, sí... vo.. voy para a... allá.

Titubeó nervioso. Puso primera en el auto y empezó a manejar en dirección a la calle 20 de junio, donde hace 4 minutos y medio había sentido que encontró y perdió al amor de su vida en 3 segundos.

"He llevado a 5 personas distintas. Ni uno me ha hablado nada más que indicaciones del camino y nadie se ha sentado al lado mío. ¿Qué probabilidades hay de que ella sí lo haga?" Se ilusionó Jonny.

- Hola, ¿tú eres mi Uber?

"Tú Uber, tu amor, tu todo" Dijo el corazón de Jonny, mas no sus labios.

- ...es que me quedé sin batería, mi amiga me pidió el Uber y no sabía ni en qué auto venías.

- Sí, soy yo. Recién hablé con Cindy.

- ¡Qué bueno! Estoy apuradísima.

Y ocurrió el segundo milagro del día: la anónima amada, abrió la puerta del copiloto y se sentó exactamente al lado de Jonny.