°GENOSHA°

Los otros

150 años antes.

La lluvia parecía sin final. El barco se había hundido y estaba solo en el agua salada. Es lo último que recordaba de antes de perder la inconsciencia.

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Sus ojos se abrieron lentamente. Mientras sentía como alguien lo movía. Tardo en ubicar a la persona. Pero lo reconoció, era uno de los tripulantes del Barco. No recordaba su nombre, pero sabia que era algo con V.

-Que paso? –

Pregunto mientras se levantaba. El alfa a su lado le siguió. Mientras ambos observaban lo extraño de la vegetación.

-El barco se hundió. Los demás murieron. –

Logan no apartaba la vista del lugar. A su izquierda había una selva enorme. Y a su derecha un bosque.

-Donde estamos? –

-No lo sé, James. –

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Juntos comenzaron a explorar la isla. Con el paso de los años comenzaron a aprenderse la ubicación de todo. Exceptuando por las montañas. La cual se habían prohibido ellos mismos el paso. Al estar infestada por centinelas.

Decidieron que vivirían en el bosque. Les gustaba un poco más ese clima. Los primeros años habían permanecido atentos. Por si lograban ver algún barco.

Pero después de los diez años. Se resignaron a esperar algo. El lugar era extraño. Cada año ocurrían accidentes. Y otorgaba habilidades diferentes.

Logan había recibido un instinto más desarrollado. Así como tres garras en sus manos. Y él se sentía cada vez menos humano. Cada vez más animal.

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75 años antes.

-Corre Víctor! Ya estamos cerca. –

Logan iba en la delantera. Ambos parecían divertirse mientras corrían salvajemente. El bosque era su hogar ahora. La conocían como palma de su mano. La selva también.

El rubio aumento su velocidad. Dándole alcance al moreno y llegando primero a la playa. Ante la vista de ambos, varias personas se encontraban tirada en la orilla.

-Hay que revisarlos. –

Víctor asintió y juntos revisaron a los heridos.

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-Somos Logan y ... -

Logan apunto a su compañero. el alfa rubio parecía molesto.

-Soy Víctor. ¿Cómo te llamas? –

El alfa hablo en tono grave.

-Víctor... –

Logan le hablo como advirtiéndole. El rubio se mantenía recargado en la pared. Con su expresión molesta.

-Soy Sebastián. El barco en el que viajábamos choco contra algo y comenzó a hundirse. –

Logan observo a Víctor un par de segundos. Hablándole sin Hablar. El nuevo se había quedado solo. Él era el único sobreviviente de su embarcación. El Rubio le asintió, mientras se alejaba un poco.

-Es un gusto Sebastián. Antes de llevarte a nuestra casa. Hay algunas cosas que debes saber sobre este lugar. –

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