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Miércoles 1 de Octubre

7:54 a.m.

Bajo del deportivo de Morgan sin dirigirle la palabra.

Está con su típica mirada de culo de siempre. Yo no le hablo y él no me habla porque no necesita hablarme si yo no lo hago.

A ambos nos molesta el hecho de que tenemos que estar juntos la mayoría del tiempo y es que no entiendo porque tiene que ser así. Me puedo defender sola y, ok, estoy herida pero ¿Y Damon? ¿Damián? ¿Nick? Ellos también saben pelear... aun que Morgan participa en peleas, como yo, a diferencia de mis hermanos y...

Camino hacia el salón de mi siguiente clase con Morgan a mi lado. No me pregunten dónde están Nick y Damon. Dijeron que llegarían tarde pero no sé porque.

Les informo que ahora que mis hermanos- y Morgan -ya saben que tengo un arma no tengo que preocuparme por que ellos la vean así que la empecé a llevar en la cinturilla de mi pantalón, short o falda. La escondo bajo mi blusa y cuando llevo una corta o pegada me conformo con meterla en mi mochila y tener mi cuchillo en el liguero de mi muslo. Como ahora.

No es un liguero de lencería, no se asusten.

Sinceramente olvidé como se llama, es especial para los cuchillos y parece un pequeño arnés o liguero así que le digo así.

Liguero.

Todavía no se cura mi pierna por completo así que no puedo subir las gradas sin que Morgan me ayude. Muy a mi pesar pero quiero hacer el mínimo esfuerzo para curarme lo mas rápido posible y librarme del gorila a mi lado.

-Que inútil te ves.

-Que imbécil eres.

-Eres una pesadilla.

-Tu peor pesadilla.

Rueda los ojos cuando llego a mi asiento.

Me siento apoyando mi cara en un puño con Morgan a un lado de mí.

El profesor entra al salón con su maletín colgando del hombro.

-Buen día jóvenes. Abran sus libros.

Puta vida.

Después de tres clases demasiado aburridas, estoy caminando con Morgan hacia el estacionamiento.

-Mierda, olvide mis lentes.

Estoy a punto de dar la vuelta cuando me detiene.

-Oye, yo voy. Eres demasiado lenta. Ve al auto.

Gruño en respuesta pero sigo mi camino al auto cuando me lanza las llaves.

-Lenta su abuela- murmuro por lo bajo poniéndome mis audífonos.

Camino hacia dónde aparcamos el deportivo preguntándome quién le dió derecho de darme ordenes. ¿Quién se cree? ¿Mi padre?

Pues a ese no lo recuerdo pero estoy segura de que él no podría serlo.

Siempre insultándome. ¿Acaso no se cansa? Es un idiota, pesado, imbécil... Odioso, es odioso.

Sigo caminando hasta que veo el deportivo a lo lejos. ¿No les pasa que se olvidan de dónde dejaron su auto?

Pues a mí siempre.

Espero que cuando tenga un auto no me pase... ¿a quién engaño? Claro que me pasará.

"Insane in the brain-Cypress Hill" suena en mis audífonos y muevo la cabeza al ritmo.

Puedo ver mi reflejo en el espejo de un auto al lado del deportivo de Morgan.

⚜️LA REINA OSCURA⚜️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora