𝑷𝒐𝒅𝒆𝒓 // 𝑨𝒊𝒛𝒂𝒘𝒂 𝑺𝒉𝒐𝒕𝒂

003 // TOMURA SHIGARAKI

Nana, al irse con All for One se subió a un automóvil negro que los llevó hasta una casa a las afueras de la ciudad, el hombre debía de tener mucho dinero como para tener una casa tan grande. Al llegar, el hombre la ayudó a bajar del auto y caminaron hacia la entrada cuando Nana vio una silueta de un niño en la ventana de una habitación el cual se apartó de esta al notar como Nana volteaba a verlo.

— ¿Tienes un hijo, Shigaraki?— preguntó Nana sin dejar de caminar o mirar hacia aquella ventana.

— Algo así, en un momento lo conocerás— fue lo único que dijo antes de abrir la puerta de entrada— ¡Tomura!— llamó y un niño delgado un poco por debajo de la altura promedio, con una piel pálida como la muerte, teñida de amarillo y muy arrugada alrededor de los ojos. Sus labios agrietados y desiguales, un pequeño lunar a la derecha debajo, con cicatrices visibles en su ojo derecho y debajo de su labio, el cabello desordenado de color azul grisáceo de diferentes longitudes, los mechones más largos que le llegan hasta los hombros, colgando sobre su rostro en ondas irregulares bajó y se detuvo a la mitad de la escalera— Ella es Nana, Nana...

— La vi por las noticias, es hija de All Might... su nombre es Nana Yagi— dijo mirando con enojo a la niña— ¿Porqué trae a esta mocosa aquí, sensei?— preguntó mientras se quitaba un guante que portaba.

— Su padre no la salvó de un desastre, la dejó sola cuando más lo necesitó... le pasó lo mismo que a ti— el niño se volvió a poner el guante que le cubría tres dedos y luego ladeó la cabeza.

— Me agradas Nana— luego bajó las escaleras por completo y le tendió la mano— Seamos hermanos, ¿te parece?— la niña le tomó la mano y luego se abrazaron.

— Me parece perfecto, Tomura— dijo la chica con una sonrisa.

— Nana, ven acá— la llamó All for One a una habitación y esta, despidiéndose de su nuevo hermano, fue detrás del hombre. Al entrar a la habitación se encontró con un doctor viejo, sin pelo y con un gran bigote, utilizando unos anteojos muy grandes que lo hacían destacar— Para llamar la atención de tu padre necesitarás algún don ¿No crees?— preguntó el hombre y la niña asintió dudosa de lo que pasaría— Te daré unos cuantos que te encantarán— la tomó del brazo con delicadeza y la paró junto a una camilla— El primer don que te daré, será uno que te permitirá tener muchos más dones— dijo mientras hacía a Nana recostarse en la camilla y la amarraba a esta.

— ¿Shigaraki?¿Qué me harán?— preguntó Nana con miedo a estar amarrada, pero sin oponer resistencia.

— Tranquila, no dolerá— dijo alejándose mientras el doctor se acercaba checando que la niña no se pudiera zafar y le ponía una mascarilla mientras nivelaba la salida de dos gases— El doctor Garaki se ocupará muy bien de ti, cuando despiertes te convertirás en Tetsu Shigaraki y Nana Yagi quedará sepultada bajo los escombros en los que te encontré.

El miedo fue reemplazado rápidamente por tranquilidad y una sensación grande de cansancio, entonces, todo se volvió negro para Nana.

El doctor abrió puertas con la camilla que empujaba en dirección a el laboratorio que tenía debajo de la casa, una vez ahí, comenzó una operación en los ojos de la chica, adaptándolos para que pudiera no parpadear por horas, también modificó para mejor los músculos, articulaciones, ligamentos y tendones de la niña. 

Seis fueron los dones que le implantó a la chica, dones de rastreo, dones físicos, de bloqueo y sanación para que fuera una perfecta arma que Shigaraki manipularía a su voluntad, y si sus planes se veían comprometidos, sería una perfecta sucesora.

Terminó de hacer todas las modificaciones  y cada Don había estado siendo monitoreado mientras Nana terminaba de completarse, cinco meses era lo que tardaría, y por ese tiempo en el que su cuerpo se acostumbraba a sus dones, ella estaba en un estado de coma, siendo sostenida por máquinas.

...

— Ya terminé con mi creación, maestro— dijo Garaki presentando a Nana que lucía completamente diferente— ya ha sido mejorada para el deleite de ambos.

— Muy bien hecho Garaki, ¿Cómo puedo agradecerte por lo que hiciste con Tetsu?— preguntó AFO.

— No es necesario señor, complacerlo es lo único para lo que existo— Garaki le mostró una sonrisa al villano.

Los años pasaron rápidamente y Nana era completamente capaz de controlar todos sus dones a la perfección e incluso teniendo más poder del que mostraba en sus entrenamientos, saliendo siempre con Tomura a comprar cosas. Una de esas veces en el centro comercial, Tomura llevaba ropa que Tetsu había decidido comprar mientras ella miraba a su alrededor viendo qué otras tiendas había hasta que pasaron por una tienda donde vendían cosas para acampar, jaló a Tomura hacia adentro y este se quejó, Nana se acercó a un saco de dormir negro y lo quiso pues el que usaba ya estaba más que viejo, entonces lo compraron, pero antes de salir se toparon con un héroe quien al ver a la joven se sorprendió, rápidamente la chica lo reconoció, tomó a Tomura de la muñeca y salieron a toda prisa del lugar.

Corrieron sin rumbo fijo entre las calles ya que Aizawa los perseguía hasta que los acorraló en un callejón.

— Pensé nunca volver a verte pequeña Nana— dijo Aizawa listo para atraparla con sus vendas— ¿Y este quien es?

— Es mi hermano y esa mocosa "Nana" está muerta, yo misma la maté— dijo la chica para que después Aizawa le lanzara su tela para atraparla, sin embargo, Tomura tomó la venda y esta se comenzó a deteriorar hasta que dejó de servir, luego Nana se acercó corriendo hacia el a una velocidad inimaginable y lo goleó en el estómago lanzándolo contra un edificio que se encontraba detrás de el, entonces escaparon y regresaron a su casa.

— Genial Tetsu, mandaste a volar a Eraserhead— dijo Tomura divertido— Me hubieras dejado deteriorarlo y le ahorrabas la molestia de seguirte buscando— puso una mano en su cuello mientras decía esas palabras.

— Cállate Tomura, con él no te metas...— dijo Nana tomando dinero de la cartera de All for One— Me voy, quiero ir al arcade.

— ¿Vas con ese chico Todoroki, ¿no es así?— preguntó Tomura rascando su nuca.

— Sí, después de eso tengo una cita con un chico que conocí ahí mismo en el arcade— dijo abriendo la puerta lista para irse.

— ¿Cuál es el nombre de ese chico?— preguntó su hermano jugando con una de las manos que usaba con su disfraz de villano.

— Katsuki Bakugo, también ve acomodando mis libros en la mochila, mañana es lunes y tengo que ir a clase con Shoto— luego se fue dejando a Tomura solo en la gran casa— ¡Y SI DETERIORAS ALGUNO DE MIS LIBROS TERMINARÁS SIN VIDA, IDIOTA!— gritó Nana desde afuera de la casa amenazando a su hermano.

— Vaya chica, que suerte tiene ese Bakugo— dijo Tomura yendo a la habitación de su hermana para acomodar sus libros.