— ¡¡Ahg, te voy a matar!!!
— ¡¡Fue un error te lo juro no me mates no quiero morir!!
— ¡¡Pues que mal porque te vas a morir ahora bicho insolente!!
1 hora antes.
Tanjiro, Zenitsu e Inosuke habían ido a visitar la finca del pilar del sonido porque Inosuke quería conseguir uno de los ratones de Uzui para entrenarlo y que fuera su subordinado.
Makio, Suma y Hinatsuru estaban afuera de la finca conversando amenamente hasta que vieron a los cazadores llegar a su hogar.
— ¡¡ El rey de la montaña está aquí!! ¡¡¿Donde esta el vejatorio?!!
— Hola chicas.— Tanjiro saludo amablemente y con su característica sonrisa amable.
— Hola Tanjirou-kun.— Saludo Hinatsuru de igual manera.
— ¿Que hacen ustedes aquí?— Pregunto Makio un poco tosca.
Hintsuru le pellizco la costilla disimuladamente y Makio la miro mal.
— Comportate Makio.— Susurro.
— Este tipo quiere pedirle al señor Tengen uno de sus ratones extrevaganetes según el para que sea su subordinado.—Lo señaló Zenitsu cansado de la situación con el cabeza de jabalí.
— ¡Soy el rey de la montaña para ti Zencusu!
— Tengen-sama se encuentra en una misión ahora mismo pero si quieren lo pueden esperar aquí. No tenemos inconvenientes ¿verdad chicas?— Dijo Suma gentilmente y Makio se quedó en blanco.
— ¿Qué? ¿Quedarnos aquí con ustedes?— Pregunto Zenitsu viendo cómo pequeñas mariposas salían de las mujeres que estaban frente a el.
— ¡Si! Será divertido.— Dijo entusiasmada Suma.
— Bien nos quedamos.— Afirmo seguro Tanjiro.
Todos estaban conversando muy entusiasmado y comiendo bollos de arroz que Hinatsuru les había preparado.
Menos una peli-negra que estaba sentada en forma de indio con los brazos cruzados sobre su pecho mirando todo con un notable ceño fruncido.
No es que le molestase la presencia de los chicos, solo le molestaba la presencia del rubiesito que no se despegaba de la adorable chica de ojos azules.
Y eso hacia que Makio quisiera ir y tomar a la menor en sus brazos para alejarla del rubio.
Toda la paciencia que Makio tenía se fue al carajo cuando el rubio "accidentalmente" tocó los senos de Suma y Makio se levantó hecha furia para matar al rubio.
Actualmente.
—¡¡Agh, te voy a matar!!
Todos se asustaron cuando la peli-negra se arrojó sobre Zenitsu para comenzar a golpearlo.
—¡¡Fue un error te lo juro!! ¡¡No me mates no quiero morir aún!!
—¡¡Pues que mal porque te vas a morir ahora bicho insolente!!
Zenitsu se sacó como pudo del agarre de la mujer y comenzó a correr por toda la finca siendo perseguido por Makio.
— ¿Creen que deberíamos detenerlos?— Pregunto Hintasuru.
—Naah, quiero ver como la chica golpea al Zensuco.
Y así estuvieron por más de dos horas persiguiendose y solo se detuvieron cuando el pilar del sonido hizo aparición en la finca.
—¡¡Tengen-sama!!
Suma fue la primera en correr hacia el pilar del sonido y saltar en su encima para abrazarlo y dejarle un reguero de besos en la cara.
— Hola pequeña, las extrañé un montón.
De repente un rubio asustadizo saltó en la espalda del pilar gritando y llorando como un bebé.
— ¿Que? Sueltame mocoso.
— Si quiere que lo suelte dígale a su mujer que no me mate.—Respondio gritando Zenitsu y Tengen lo miro confundido.
Pero su confusión se fue cuando pudo observar a su esposa Makio con una cara de muerte dirigida hacia el rubio.
— ¡¡Por favor perdóname fue un accidente!!
— ¡¡Tu!!
Cuando Makio corrió en dirección al rubio Suma se puso enfrente de ella y la tomó por las mejillas obligándola a mirarla.
— Ya, ya tranquila Makio-San, fue un accidente cálmate.— Suma le hablaba de manera tierna y paciente sintiendo como Makio se relajaba ante su tacto.
— Pero... el.
— Tranquila Makio-San todo esta bien.
Sin más Makio bufo enojada dedicandole una mirada de odio a Zenitsu para luego sonreírle a Suma.
— ¿De qué me perdí?— Pregunto Tengen completamente confundida mientras abrazaba a Hintatsuru.
— Es una larga historia.