Dulce venganza (Mentiras Disfraza)

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"El ser humano defiende, su realidad mediante, el sufrimiento"

Tsia

No puede ser como llegaron tan rápido veo el ascensor y la única salida es volver a subir tomo de la mano a Jen y subimos con una pareja de viejito la puerta se estaba cerrado pensé que nos habíamos salvado.

-Cariño detén la puerta que ahí viene los jovencitos Miller -dice la señora de mediana edad a su esposo el coloca su mano y se detiene.

¡¡AHORA Sí SEÑOR LLÉVAME!!

<<Te vas a morir y nunca pudiste ver un concierto de Post malone con un demonio Tsia>>

Y mi vida que, también es importante y tu no ayudas.

-Gracias Sr y Sra Meyers- el idiota de Nicolás le agradece a los señores Meyers al llegar se adentro al ascensor y Nicolás se coloca a mi lado y Ried al lado de Jen

-Amor te dije que te venía a buscar tu siempre quieres hacer la cosas por tu cuenta. -dice coloca su brazo en mi hombro y levanto una ceja esperando una respuesta es enserio que va hacer esto, él se acerca y me da un beso en la cabeza.

-Responde estúpida.-me susurro

-Lo que pasa es que me estaba persiguiendo, un desalmado loco con un arma, pero ahora que estás tú me siento segura amor.

Me agarra el cabello me lo jalo y se me salio un gemido de dolor, es un imbécil le doy un golpe en la costillas y el me vuelve jalar el cabello me hace que lo mire y detallo un pequeño corte en su labio eso no lo tenía antes.

-Si quieres que todo salga bien te aconsejo que te comportes.-susurra y siento algo frío a mi espalda.-No me hagas hacer algo aquí mismo porque todo será tu culpa.

-Te amo mi cielo.-cambia su actitud y se comporta como el novio perfecto.

-Que hermosa son estás jovencitas -dice la señora voltea hacia nosotras y no da una sonrisa.

-Gracias -decimos al unisono.
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Jenny

Esto es un desastre cuando Tsia se fue me sentí tan incómodo, estaba sola en esa sala, y lo que me dijo Ried me alarmo pensé que jugaba pero al parecer todo era cierto me cerré y nunca quise escuchar ahora mi vida peligra.

Se a convertido en un juego del cazador, ya que estoy huyendo de mi sentimiento, hacia Ried pero ya es demasiado tarde mi cazador a terminado de cazar a este corazón.

Minutos antes.

Estoy sentada y toda mojada en el sofá, Tsia se fue y me dejo aquí tirada pues realmente no se que hace aquí pero espero que esto no sea una trampa.

-Toma Jen te vas enfermar -llega Ried a mi lado sacándome de mis pensamientos me entrega una toalla.

-Gracias

-No hay de que.-no se que esperar de él dijo que quería hablar conmigo pero no tengo ánimos de seguir de verdad toda esta situación es algo no quiero seguir.

-Jen sabes que  nunca te quise hacerte daño lo que pasó fue un malentendido, tiene que creme mis sentimientos no han cambiado.-mi corazón dió un saltito estúpido si soy tonta no le puedo creer, el se burló de mí.
-Jen de verdad lo siento...

-Ya no digas más me has echo daño, y otras personas también eres un peligro para la sociedad.

-En eso no te equivocas lo soy Jen aún así te enamoraste de mi, y mataría por ti Jen.

Eso me produjo un miedo, todo mi cuerpo se quedó rígido, en mi cabeza sonaron las alarmas de emergencias que me decían sal de ahí.

-Jen aunque me odies no vas alejarte de mí no puedes, porque yo iré detrás de ti, así tenga que ir al mismísimo infierno con gusto voy si es para ir a buscarte.

Minutos después.

-A ver todo fue un malentendido.-dice Nicolás, hemos regresado al departamento, estoy amarrada en una silla al igual que Tsia nos han traído a la fuerza.

-¿Cómo así? Entonces no soy unos asesinos.-estoy confundida que es verdad y que no, osea todavía no sé si voy a morir aquí con esto desalmados locos.

-Esa parte es cierto...

-Entonces no es un malentendido ¡Bruto!-dice Tsia alterada.

-Calmate TSIA .

-oh disculpe usted señor asesino.

–No grites

–Grito si me da la gana.

Tsia y Nicolás siguen discutiendo sin ningún sentido nunca llegan a nada.

Ried se me acerca, yo miro a otro lado en esto momento no me quiero enfrentar a el.

-Te dije que no te voy a dejar.-el toma mi quijada y me hace míralo a el yo antes veía un resplandor brillante en sus ojos, y en un tiempo él era un tanto bromista, y siempre tenía una sonrisa, como pueden cambiar la cosas en un años el me prometió cosas que al final, se volvieron polvo con el tiempo.

-Me arrepiento mil veces haberte conocido.

-Yo no me arrepiento de nada, absolutamente de nada Jen.

Estoy apunto de decir algo cuando alguien toca la puerta será nuestra salvación.