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Especial 2022.

Narrador Omnisciente

Los König, Kolaw y Wandner se reúnen para una nueva selección de los nuevos miembros.

Está selección se da cada año nuevo, 45 personas, son reclutadas, 15 para cada familia, en total son 100 personas que se escogen, solo sobreviven los más fuertes e inteligentes.

Estas personas sos divididas en tres grupos, ellos son habitantes, saben en lo que se meten, son jóvenes, pero aún así quieren ser temidos.

Las tres grandes familias se preparan para ser espectadores...

O verdugos....

Vestidos de negro en el gran salón, empleados sirven bebidas, los guardia toman asiento en los lugares de atrás...

—Los sirvientes pueden retirarse, mañana tienen que ser puntuales.— Jason da una mirada fría a toda la servidumbre.

Estos salen en fila, todos miran a la gran pantalla que tiene en frente.

En los asientos del frente se encuentran Astrid, Jason, Hiram, Lila. Atrás de ellos están los demás miembros.

Las luces se apagan, los futuros miembros de la mafia son liberados en el gran bosque blanco por la nieve, que dentro de uno minutos se encontrará teñido de rojo carmesí.

Nadie habla.

Astrid se cruza de piernas, mientras acaricia la mano de Hiram, este se encuentra sumergidos en sus pensamientos, hace semanas que no habla, solo se encarga de se un asesino sádico. Lo único que le saca una sonrisa son las ocurrencias de Astrid y matar sin consuelo alguno.

Eider sin embargo observa la cabellera rubia que se encuentra al frente, cuando la vio hace unos minutos atrás lo dejo embelesado, la hermosura que desprende esta chica es única.

Jasón no quita la mirada de la pantalla, con la mirada como un tempano de hielo.

Los minutos pasan ya todos están en el gran bosque, estos se esparcen por todo el lugar, y ataques sorpresa se hacen presentes para cada uno de estos.

Hombre y mujeres vestidos de blanco aterrizan perfectamente sobre el suelo blanco, los jóvenes se ponen en posición de defensa.

Se escuchan gritos, el terror es latente cuando la pelea a cuerpo da por comienzo, ya que contra los que pelean no son personas corrientes, estos están desde años junto a la mafia.

Astrid, tamboriles los dedos en sus piernas, a su lado derecho se encuentra su padre y al izquierdo Hiram.

—Vamos.— la voz de Jasón resuena por todo el salón, sin objeción todos salen por las grandes puertas, la nieve cae sobre ellos, el frio se hace presente.

Cuando se dirigen a los autos, una mano se enreda en la cintura de Astrid, esta es tomada desde atrás por Hiram, esta se deja llevar hacia atrás.

—Discúlpame con Jasón, pero no podre hacerlo— no estoy en condiciones, solo vayan sin mi…

Las palabras las capta enseguida, y le duele escuchar el dolor en su voz. Se da vuelta posando su mano en la mejilla del chico, sus ojos se encuentran rojizos, su piel mas pálida y sus labios resecos. A ella le duele verlo así, es la versión que se negó a que regrese de las sombras, el es aquel muchacho que conoció cuando era niña, con mucho dolor dentro, y si tenía que matar a todos para volver esa sonrisa que alegraba las mañanas, lo haría sin dudarlo.

—Cuídate— este da un asentamiento antes de desaparecer por las grandes puertas.

Izan la espera al inicio de las escaleras, toma su mano guiándola al auto en el cual espera Jasón como conductor.

—No vendrá— estos suspiran al escuchar estas palabras.

No dicen nada, solo dan un asentamiento.

Esta sube de copiloto, ve a los guardaespaldas, estos están posicionados en una perfecta fila, con la mirada en el bosque.

—Papá.

—Rus, Eider, ustedes van con nosotros, ahora.

Rus sube del lado derecho y Eider del lado izquierdo.

Jasón conduce a una velocidad alta adentrándose al bosque. Nadie habla, todos se concentran en el camino.

Autos del mismo color se posicionan detrás de este, toman diferentes caminos.

Cuando llegan un grupo de jóvenes se encuentran de rodillas atrás de ellos se encuentran las Armins. Están dan una reverencia antes de dar un paso hacia atrás.

—Los cuatro mejores.—Las mujeres toman a dos mujeres y dos hombres, los levantan bruscamente.

Jasón, Astrid y Rus caminan en dirección de cada uno, Eider en cambio duda y solo los imita con algo de inseguridad.

Cuatros personas, miradas temerosas, estos los inspeccionan, Jasón examinan a la chica frente a él,  Astrid tiene la mirada fija en cada facción de la otra chica, los otros dos miran con indiferencia a los que son idénticos.

—UNA PELEA MÁS, USTEDES CUATRO HUYAN HACIA EL BOSQUE AHORA.— los demás se enfrentaran una vez más a ellas.—¡AHORA!— estos huyen a toda velocidad en diferentes direcciones.

Sin rodeos cada uno se dirigen a los que fueron considerados los mejores, estos solo deben esconderse y saber atacar cuando sea necesario, es cuestión de inteligencia y habilidad de usar el cerebro.

No pasa más de media hora para que estos estén escondidos, sigilosos, preparados.

Jasón es el primero en encontrar a la chica, esta se encuentra detrás de un árbol. Sin dudarlo tira de su cabello llevándola directo al piso, se posa al frente, esta parea su pierna, lo que no provoca ni siquiera una minina cosquilla al cabecilla de la mafia más poderosa. Da un salto y cuando menos se lo espera se tira arriba de Jasón, este la golpea, sin embargo esta se pone de pie, y vuelve a atacarlo.

La mira conforme, nunca considero tener mujeres en su equipo.

—Controla tu respiración, se mas calculadora, tu oponente nunca se detendrá hasta matarte, nadie se apiadara de ti, aquí no se suplica, antes muerto que pedir migajas de devoción. Estas dentro Alisa.

Esas son sus cortas palabras antes de darse la vuelta, esta sonríe, se pone de pie y lo sigue a una distancia prudente.

Astrid vuelve a patear el estomago de la chica de cabello rojizo.

Trata de levantarse, y vuelve al piso cuando otra patada que la lleva al piso.

—Se ágil.

Esta parece recapacitar y de pronto se pone de pie, y golpea a Astrid en la cara, esta sonríe, cuando devuelve el golpe.

Y sin espera más la toma del cabello, en la lucha para que la suelte caen al piso, Astrid se posa a ahorcajadas arriba de ella.

—Mátame— susurra esta.

—Con gusto, pero dame una razón…

—Traición

Esta mira detenidamente a la chica.

—No puedes traicionar sin estar dentro.

—Ellos me mandaron, soy parte de ellos, me marcaron.

—¿Por qué no me mataste, tu?

Su mano se dirige a su cuello apretando lentamente.

—No puedo, me mataría a mi misma antes que a ti, tengo una debilidad por las mujeres hermosas, tú eres una diosa, sería mi mayor delito hacer tal atrocidad.

Astrid la mira con mucho interés, ella tiene algo, ese algo que le serviría, sin embargo las voces en su cabeza repiten lo mismo, muerte, traición, sangre…

—Jamás te olvidaras de mi,— se inclina mientras aprieta cada vez más, haciendo que el aire de esta se vuelva escaso.— una traición se paga con sangre.

Quita la mano del cuello de la chica.

—Serás mi aliada, le llevaras información falsa, serás mía,  un paso en falso y estas muerta, me has escuchado…

Esta chica tiene miles de emociones, pero el miedo y la excitación predominan. Sin pensarlo levanta la cabeza y su mano toma la nuca de Astrid, sus labios se juntan, y el regocijo al sentir los labios suaves de la que consideran la princesa de la mafia, se hace presente.

Esta se aparta de inmediato, propinándole una bofetada.

Se pone de pie y deja a Rose acostada en la nieve, esta con una sonrisa.

—Estas dentro, le tendrás que decir todo lo que sepas a mi padre.

Con la elegancia que predomina en Astrid se devuelve con el mentón  en alto.

Rose se pone de pie, pero siente un impacto en su pómulo haciéndola caer a bruces.

—No la vuelva a besar, porque seré yo el que te mate lentamente…

Esta suelta una carcajada.

—Los celos son malos, querido, recuerda que no es tuya.

Y si, son palabras de mierda, pero por dentro él sabe que ella no le pertenece.

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⏰ Última actualización: Jan 12, 2022 ⏰

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