El Misterioso Moi

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Por fin el viernes había llegado, día en el cual uno puede darse un respiro de la semana y tomarse un descanso.

Estaba soleado, el cielo despejado, acompañado junto a la suave brisa que golpea delicadamente el rostro, todo parecía estar en su lugar. Al menos por ahora.

Mientras Megumin iba de camino a la escuela miraba como varias personas decoraban todo el sitio para recibir el desfile anual a la primavera.

Una gran alegría se sentía en el ambiente del lugar y todos estaban invitados a ser parte de la celebración. Desde el niño más pequeño hasta el viejo más cenil.

Las cosas iban bien, aunque aún quedaban algunas preguntas que había que responder... Fue en ese lapso que ella escuchó :

—¡ Alguien me ha robado el bolso! — grito una anciana señalando a un hombre corriendo.

Como la gran heroina que es ( eso creía) , se fue a un callejón y se cambió la ropa, dejando su mochila encima del basurero. Poniendose manos a la obra fue a detener al ladrón.

El seguir el paso era algo complicado, varios adornos de papel y plástico dificultaban pasar, rápidamente lo atrapó enredandolo en telarañas y colgandolo de cabeza en un poste de luz.

Listo, ya se había acabado era hora de....

— ¡ Mami mi globo! — exclamó un niño llorando.

— No te preocupes, pequeñín yo te traigo tu globo — atinó a decirle Megumin mientras iba tras el globo.

Después de escalar un poco usando los edificios cercanos, tomó el globo en sus manos.
Llevandolo de nuevo hacía abajo donde el pequeño recibía lleno de alegría su preciada posesión.

En ese momento, a lo lejos se empezaron a escuchar las campanadas de la escuela.

Ella rápidamente sacó el teléfono para revisar la hora, a la vez que se dirigia al callejón en el que puso sus cosas.
Al llegar allí vio la pantalla para darse cuenta que ya era muy tarde para ir a pie. Pero por la grna cantidad de gente en la escuela llegar columbiandose no era una opción.

— ¿ Así que ya empezamos? ¿ Eh?

.
.

— ¿ Fue divertido tener esas cubetas en la cabeza? — preguntó Dodonko para molestar a Megumin.

Ella no respondió nada, solo la fulmino con la mirada usando esos ojos rojos inyectados en ira.

— ¿ Así que ya lo invitaste ? ¿ Crees que acepte ir contigo? ¿ Ya tienes vestido? — interrogó Funifura con mucho interés a Arue

— Oye para... Me estás haciendo... Sentir vergüenza... Solo espero que acepten a personas de otras escuelas. — hablo Arue en un tono muy tierno.

— ¿ De qué están hablando? — preguntó Megumin con algo de interés.

Todas las chicas de alrededor la miraron fijamente para luego observarse entre sí con cara de decepción.

— ¿ Se te olvidó el baile de primavera? — preguntó Funifura.

— Ah el baile... — menciono Megumin —Ese evento basura... — dijo en voz baja lo último.

En ese momento Megumin recordo todas las veces que faltó a susodicho baile, ya sea por cosas tan triviales como quedarse dormida ( excusa barata) o por la falta de vestidos de gala ( no era tan mentira). Aunque en realidad sólo se sentía frustrada por no tener a alguien a quien invitar. Durante toda su vida escolar. Pará ser más trágico ni siquiera desde jardín de niños a podido bailar junto a otra persona. Conformándose con que un profesor o profesora le diera algo de comida.
Tantos recuerdos... Que ella desearía sepultar en el rincón más inhóspito de su mente.

KonoSuba Fanfic : Spectacular Spider... ¿Megu?  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora