Descubrir que tuviste Un Hijo después de cruzar a Omega

Capítulo 57

        La puerta se abrió, y Xie Yuxing levantó la cabeza, sus ojos mostrando sorpresa.

        "¡Estás aquí!"

        Dejó a un lado la cafetera a medio llenar que tenía en la mano, y rápidamente dio un paso adelante y cogió la chaqueta del albornoz de Xue Zhong que estaba apoyada en su muñeca, e intentó ponérsela hábilmente, pero una mano la bloqueó.

        El rostro de Xue Zhong estaba desprovisto de su habitual sonrisa, y entró sin expresión, sentándose despreocupadamente en la silla de su despacho.

        Cerró los ojos, con aspecto un poco cansado: "Ven y dame la medicina".

        Su voz era suave, pero no podía negarse.

        Xie Yuxing siguió su ejemplo y sacó inmediatamente el ungüento del cajón.

        "¿Él, durmiendo?"

        "Sí".

        Sin el pijama, la robusta espalda de Alfa estaba llena de horribles cicatrices.

        Las marcas de los látigos, de color marrón rojizo, estaban entrelazadas y algunas eran tan profundas que aún rezumaban un mínimo de sangre, rezumando horriblemente.

        Se oyó un resoplido bajo, pero Xue Zhong no respondió.

        Al momento siguiente, las dolorosas e hinchadas heridas se cubrieron con un poco de frescor, seguido de una pequeña brisa de calor que se ocupó de las feas heridas adecuadamente.

        Una vez aplicadas todas las heridas, Xue Zhong escuchó el sonido de las cosas que se estaban empaquetando.

        Abrió los ojos y se encontró con Xie Yuxing, que estaba medio agachado entre el escritorio y él.

        Le miró desde arriba, con un matiz de burla en sus ojos: "¿Qué, tienes hambre?".

        "Se dice que cuando uno está excitado sexualmente, la sensibilidad del nervio del dolor es mucho menor".

        Xie Yuxing dijo suplicante: "Por favor, déjame ayudarte".

        Pero inesperadamente, Xue Zhong levantó implacablemente su pie y le pisó el hombro.

        Le miró con los ojos abatidos, su voz era suave, pero su tono era frío como el hielo: "No deberías tomarte la justicia por tu mano sólo porque te favorezca". Al escuchar con atención, parecía haber un crujido de dientes.

        El pie de Xue Zhong fue tan fuerte que el cuerpo de Xie Yuxing se balanceó y se arrodilló sólidamente en el suelo.

        Xie Yuxing levantó sus ojos, que estaban enrojecidos.

        Sus ojos acuosos miraron directamente a Xue Zhong mientras daba un paso de rodillas y estiraba la mano para agarrar la ligadura que colgaba: "Sólo quiero ayudarte".

        "¿Ayuda?" El tono de Xue Zhong era ligero mientras se apoyaba con una mano.

        "Sí". Le guiñó un ojo inocentemente.

        Sus manos también se movieron y rápidamente deshizo el cordón que obstruía.

        Las ricas feromonas que de repente llenaron la punta de su nariz le hicieron desfallecer, y no pudo evitar acercarse, dejando escapar un suspiro bajo como un hombre con prisa.

        "¿Lo que llamas ayudarme es correr hacia el arma de Ji Yuan Sheng y forzar mi mano? ¿Le entregaste toda la información a un extraño sin decir una palabra? ¿Y luego me pides que te cubra?"