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El pelirrojo salió del baño ya con su traje de baño, está vez solo llevó una pantaloneta ancha. Más una toalla en sus hombros.

El castaño se sonrojó por el torso delgado, algo musculoso del pelirrojo, no era en excedente pero si se notaba los músculos y el abdomen algo marcado.

El menor con la cara roja entró sin mirarlo, se cambió para ir a dónde estaban sus amigos.

El pelirrojo se adelantó, y pronto el castaño también llegó. Estaban haciendo bromas y conversando de varías cosas.

Hicieron el intercambio de regalos, ya que ya era navidad y ellos no lo festejaban tan encerio.

Ya estaba anocheciendo, el atardecer ya mismo era presente. Todos ya estaban cambiados para ir a ver el anochecer y ver cómo la luna roja de cada año salía después de un año de espera.

En estás playas el agua tiene varias algas bioluminiscente que con está luna se hacen de los colores azúl,rojo y morado. Pero solo por estos años se verá una aurora boreal de color azul, eso hará un hermoso espectáculo nocturno.

Todos estaban en las amacas frente a la piscina, de pronto el pelirrojo sintió el hambre llegar como una bala.

Se fué de ahí sin que nadie lo notará, entró sin prender las luces, se sentó agarrando su cabello entre sus dedos.

Alguien se ha preguntado, por qué a Ari no le a dado hambre? Pues ahora te lo respondo.

Los vampiros al tener a alguien amado que sea humano o algo que sea "alimento" para ellos pues para no hacerle daño, su hambre disminuirá un poco.

Pero ahora Ari si tenía hambre, no comió en 10 días. Y se acostumbró a hacerlo cada semana.

Tendría que salir a buscar algo en la isla, mientras pensaba Sparta entró a la habitación en el momento menos indicado.

Ahora el pelirrojo estaba muy hambriento, podía sentir la sangre del castaño recorrer las venas del mismo.

Escuchaba el sonido de la respiración del castaño y su corazón palpitando.

La habitación estaba obscura, saltó al techo sacando el foco para que el castaño no encendiera la luz y lo viera de esa forma.

Sus colmillos estaban afuera, sería fácil darse cuenta que algo le pasaba.

El pelirrojo se quedó en la parte más oscura del techo, estaba sentado mirando como el castaño entraba buscando la luz, pero al encontrar el interruptor no funcionó.

- ahg! Genial. Ari!

Gritó el nombre de su novio, pero el pelirrojo no dió respuesta

- dónde se abra metido?

El menor estaba empacando las cosas y salió de la habitación, pero sin la mochila.
Está la ocultó entre los arbustos, será mejor hacerlo cuando acabe el espectáculo.

El pelirrojo al ver que el castaño salió este se bajó del techo y salió hacia la naturaleza.

Buscó algo para comer, no había nada a la vista así que se adentró más.

Después de correr por unos minutos encontró unas cuantas vacas salvajes. Asiló con estrategia a una de ellas, era un cazador nato, era ya un experto.

Ningún animal podría hacer tal estrategia para dejar sin escapatoria a su presa.

Se alimentó y volvió al lugar donde estaban sus amigos, estos al verlo lo fueron abrazar.

~𝐿𝑢𝑛𝑎 𝑟𝑜𝑗𝑎 - 𝑆𝑝𝑎𝑟𝑡𝑜𝑟~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora