~𝐿𝑢𝑛𝑎 𝑟𝑜𝑗𝑎 - 𝑆𝑝𝑎𝑟𝑡𝑜𝑟~

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— si, te la haces conocido. Esos ojos bicolor los había visto antes — una de las chicas guío su mano hasta su labio.

— no eres Ari? Ese que cambió de la noche a la mañana? — lo miró con una sonrisa maliciosa.

— si, y yo también conozco a quienes me dejaron tirado en este bosque. — los miró con una sonrisa algo... Siniestra.

— hay~ te has vuelto apuesto~ — se acercó al pelirrojo llegando a tocar su hombro — tienes algún día libre?~

Sparta estaba yendo a morir de celos, que les pasaba a estás locas de rematé?

— que pasa si te digo que ya tengo pareja — sonrió al sentir la ira del castaño, se le hizo algo divertido.

— aww~ el tímido de Ari consiguió pareja. Que tierno — dijo en forma de burla la última chica.

— seguro que no lo estás inventando? Porque con tu forma de ser, dudo que una chica te quiera — volvió a reír uno de los varones.

Ari iba a decir algo al respecto pero una voz a su espalda lo distrajo, era Sparta. Sabía lo que venía, los iba a mandar a la chingada.

— Ari~, ya te demoraste — llamó el castaño.

— no es Andrés? El cerdito? — dijo de forma de burla uno de los chicos.

— cerda tu abuela, no te enseñaron a respetar? — contraatacó, no iba a dejar que esos desgraciados intimiden a su novio.

— tranquilo cerdito, no te vayas a enojar~ — estos nunca cambiaron.

— la que se va a enojar es tu novia, será divertido ver cómo te esperaba a las 5 de la tarde y ahora son casi las 6, que pena por ella — sus ojos azules asustaban, podía leer algún suceso de la vida de cada persona.

— como lo supiste? Quien te contó?! — estaba borracho, es obvio que reaccionaria con agresividad.

— nadie... Yo lo sé todo — dijo el castaño con un tono algo creepy.

— oye eres un espía o algo? — río una de las chicas

— no... Pero si puedo saber que te escapas de tu casa para ir con tu novio a farrear por las vecindarios — sonrió con inocencia.

— como te atreves a acosar a mi novia? — habló el joven más alto.

— te sugiero que ni te me acerques, y yo no acoso a tu novia

— ah... Y porque no quieres que me acerque? — se fué acercando más al chico de ojos azules.

— saldrás lastimado, así que te recomiendo que no lo hagas enojar — el chico no sabía a lo que se refería.

El chico sin hacerle caso a la advertencia, dió un inicio a un golpe, el cual fué frenado de una forma totalmente fácil.

— te recomiendo que no lo toques, puedo romper tu muñeca con un solo movimiento — apareció el pelirrojo sosteniendo su mano