Argentina y Brazil llegaron al reino más específico, al castillo donde ahora viviría el albiceleste, bajaron y se adentraron en el lugar dejando que lo sirvientes se encarguen de bajar las maletas y pertenecías del Argento, el portador del sol ya conocía el lugar aunque aún así le sorprendía los cambios que había hecho de la residencia portuguesa. El de tez verdes le hizo una señal en forma de que lo siga y así fue
-Cuantas cosas han cambiado por acá Brazil- decidió hablar el argentino
-Muitas coisas mudaram por aqui argie-
-Extrañe que me hables en portugués, es un idioma que siempre quise aprender, muy lindo a mí parecer- le sonríe
Dichas palabras por parte del sol de mayo hicieron sacarle un risita al más alto
-Obrigado- voltea para devolverle la sonrisa -Y si tú quieres podría enseñarte a hablar portugués-
-De nada y me encantaría Brazi!!-
-Brazi?- se sorprendio al escuchar ese apodo -No me dices así desde que éramos niños...-sonrio con melancolía
-Pense que sería lindo volver a decirte así pero si no quieres puedo dejar de hacerlo-
-No, no hay problema argie, solo me sorprendió que me volvieras a decir así pero no tengo nada en contra-
-Esta bien, gracias- sonriendo
-No tienes porque agradecer-
-Es encerio Brazuca, gracias a vos ahora estoy vivo.-
El brasilero entendió eso y se detuvo justo en la puerta de la habitación, argentina se detuvo mirando al de habla portuguesa confundido, el de tez verde agarró la muñeca del Argento y entro en la habitación cerrandola y al instante abrazando a su contrario
-E-eh? Brazil estás bien??- el menor miro al nombrado con preocupación.
-Lo lamento argie.. nunca tuve que haberte dejado, tenía que haberme dado cuenta antes era muy obvio, perdón...- el mayor se separó del abrazo para mirarlo a los ojos.
-Eu, ya pasó, estoy acá con vos ahora, y aunque será raro para mí el hecho de que ahora estamos comprometidos, no te voy a abandonar Brazuca- el albiceleste le dedicó una sonrisa mientras ponía su delicada mano en la mejilla del contrario.
Brazil al recordar que sus padres los habían comprometido, no pudo evitar sentir un tenue calor en sus mejillas, argentina realmente era tierno ante sus ojos.
-Pero- es que, y si no estuvieras vivo ahora mismo? Jamás me lo perdonaría argie..-
-Nada de peros Bra, no estoy muerto sigo vivo acá junto a vos, mi padre será un hijo de puta, pero no me mato por el simple hecho de que mi madre se daría cuenta y lo condenaran a muerte.- el argentino dijo esto con tranquilidad pero en realidad estaba decepcionado de su progenitor
-Ummm, si bueno sigues vivo y está bien. Solo espero que esto del compromiso no afecte nuestra amistad argie-
-Naa no te preocupes brazu, es nuestra obligación como príncipes, y bueno, vos ahora sos el rey- solto una leve risita, encantador para Brazil -solo te digo algo.- cambio drásticamente su sonrisa a una mirada sería.
-Esta bien- se desánimo un poco que el contrario lo tomara como una obligación, no quería eso. -Mmm? Dime.-
-De que estemos comprometidos no significa que sea tu maldito Omega, ni se te ocurra tocarme, así que más te vale que controles tu lado de alfa porque no dudaré ni un segundo en meterte una paliza, controla los días de tu celo me escuchaste?- dijo algo frío, dejando en claro que no sentía nada por el de tez verde más que amistad.
El de habla portuguesa sintió miedo por primera vez, valla que ese chico tenía un buen carácter, hizo que de alguna forma su estómago se revolviera
-s-sim argentina-
-bien.- y de la nada sonrió, como si no hubiese dicho nada malo, en ese instante sonó la puerta -Pase-
-Olá?- la puerta fue abierta dejando ver a Portugal -Disculpen la interrupción, pero necesito hablar con ustedes dos.- por su forma de hablar, no era algo bonito.
-Oh, no hay problema señor Portugal- dijo amablemente argentina
-Gracias arge, no me digas señor que me haces sentir viejo- rio un poco
-Aaa perdón, perdón- sonriendo nervioso
-No te preocupes, dime suegro- bromeando un poco
-Eh-h?- esto dejo desconcertado a los dos jóvenes
Escucharon una risa por parte del mayor.
-Y-ya, perdónenme, estaba bromeando, solo dime portugal, pero si gustas también puedes decirme suegrito-
-Jajjakj está bien, Portugal está mejor supongo, no lo sé no me siento cómodo todavia-
-O-oye osea que en un futuro si le vas a decir suegro?- Brazil volteo a verlo
-No lo sé, tal vez.- le guiña el ojo y el contrario se sonroja un poco
-Esperare ese día con ansias- sonrió Portugal, que buena onda pensó el albiceleste -Y espero te adaptes rápido argentina, este será tu hogar ahora, siéntete cómodo-
-Muchas gracias Portugal- sonriendo
-No es nada, segundo, quiero que me cuentes todo lo que te hacía españa.- su semblante ahora era serio.
-B-bueno...- el portador del sol le tenía confianza al mayor, así que decidió contarle todo no sabiendo que se corromperia en llanto.
-Yaya argie... Estás bien ahora, estoy contigo..- el brazilero abraza al pequeño Omega en modo de consolación cumpliendo su propósito de calmar al menor
-G-gracias Brazil..-
-Lo lamento mucho arge..- decía con pena Portugal
-No es para tanto no te preocupes Portugal..- dió una leve sonrisa
-No es para tanto? Literalmente casi te mata argentina. -entre serio y molesto dijo el de estrellas soltando un gruñido audible, al alfa no le gustaba pensar en el Omega llorando, le partía el alma en dos.
-Ya lo sé pero es algo a lo que me acostumbré.. ahora estoy bien.- el sentimiento del momento se hacía notar, era un sentimiento cálido del que ambos disfrutaban sentir, que hace mucho no lo sentian
Podrá ser... Que ambos estaban sintiendo lo mismo? Un sentimiento del que argentina se negaba a sentir, acaso, podrá sentir algo más que amistad hacia Brazil? Desde su separación cuando eran niños, algunas cosas no eran como antes, más sin embargo, algo de ese sentimiento quedó guardado en su corazón...
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𝚑𝚘𝚕𝚊𝚊, 𝚑𝚊𝚌𝚎 𝚖𝚞𝚌𝚑𝚘 𝚚𝚞𝚎 𝚗𝚘 𝚊𝚌𝚝𝚞𝚊𝚕𝚒𝚣𝚘, 𝚢 𝚙𝚒𝚍𝚘 𝚙𝚎𝚛𝚍𝚘𝚗 𝚙𝚘𝚛 𝚎𝚜𝚘, 𝚗𝚘 𝚎𝚜𝚝𝚘𝚢 𝚖𝚞𝚢 𝚊𝚌𝚝𝚒𝚟𝚊, 𝚙𝚎𝚛𝚘 𝚊𝚌𝚊 𝚗𝚞𝚎𝚟𝚘 𝚌𝚊𝚙 𝚍𝚎𝚊𝚑, 𝚗𝚘 𝚘𝚕𝚟𝚒𝚍𝚎𝚗 𝚝𝚘𝚖𝚊𝚛 𝚊𝚠𝚒𝚝𝚊 𝚖𝚞𝚊𝚌𝚔❤︎
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★~Un Omega como rey~★.. {Brarg}
Historical FictionBrazil es oficialmente el rey de su reino, su padre y el de Argentina, los comprometen a un matrimonio obligado.