Una Dixon y un Grimes

No estoy sola

*NARRA CARL*
Después de que michonne llegara, se bañó y se cambió de ropa.

En la noche dormí feliz con la esperanza de poder encontrar a los demás vivos.

- Hey! dormilón vamos a desayunar- me dijo michonne despertandome

- Si... ya voy- me levante, me coloque mi sobrero y guarde mi arma en su respectivo lugar.

Me senté en la mesa y me serví en un plato de cereal, mientras comía michonne se sentó al lado mío, y se sirvió su cereal. La miré fijamente y me reí de como estaba vestida, era extraño verla vestida así.

-Tienes algo que decir de mi muy cómoda y atractiva blusa? -me preguntó ella riendo.

- No, no, no. Esta muy buena - dije riendo.

Se sentó en la mesa y mientras comía una cucharada de cereal, dijo- Ojalá tuviera leche de soya.-

-¿En serio? -dije sorprendido.

-Si, en serio- dijo - alguna vez la probaste?.

-si, mi mejor amigo, en tercer grado me dio de probar.

- Y? -preguntó abriendo los ojos exageradamente.-

-Vomité - dije riendo.

-Si, como no- dijo sarcásticamente.

-Esta bien, esta bien... Casi vomito - dije exagerando el "casi" -pero estaba como...- fingí que vomitaba - era muy asquerosa, preferiría tomar leche en polvo que beber eso de nuevo- dije mientras ella se mataba de la risa

- Prefiero tomar la leche de Judith - dije riéndome, pero después de darme cuenta de lo que dije me quede serio, mil recuerdos de mi hermana volvieron a mi cabeza. Cuando tuve que matar a mi madre, cuando jugaba con ella, la extrañaba mucho y daría lo que fuera por volver a verla.

Michonne me miró con cara de pena e iba a decir algo pero la interrumpí - me voy a terminar mi libro -dije levantándome de la mesa.

Mientras leía el libro, pensaba en cuanto de diferente serían las cosas si no hubiera pasado nada de esto.

Luego de unos minutos Michonne me llamo para que fuéramos a buscar provisiones. Yo cerré mi libro y fui con ella.

-¿cuanto crees que se demoren?- preguntó mi padre cuando ya estábamos saliendo de la casa

-no lo sé, llenaremos un par de bolsas con comida... No creo que tardemos mucho- dijo Michonne-volveremos al medio día - agrago mi amiga

- bien-dijo mirándola, se volteo y ahora me observaba a mi - has lo que te diga- decía mientras me entregaba su arma y yo la guarde en mi pantalón.

*NARRA SARA*

Siguiendo las huellas me di cuenta de que eran pisadas dobles, eso significaba que eran dos personas que pasaron por aquí.

Seguí recorriendo las huellas, pero luego de un tiempo perdí la pista. Segui caminando sin sentido, mientras caminaba encontré restos de una serpiente, abierta y cocinada y me los comí, sabia asqueroso pero necesitaba mantener mis fuerzas y tener energía para seguir.

Seguí mi camino sin rumbo con la ballesta de mi padre en mano en caso de que pasara algo, mientras seguía caminando en el bosque encontré un cementerio y a lo lejos se podía divisar una casa, me acerque lentamente para visualizar con cuidado el interior de la casa.

Cuando estuve bastante cerca de esta me di cuenta que en la puerta habían unas latas colgadas de un hilo en el suelo. Me dirigí hacia la ventana pero esta estaba sucia por dentro lo cual se hacia difícil ver que había en su interior.

-Pasaremos la noche aquí y si el lugar me agrada nos quedamos - escuche hablar a alguien desde adentro, se podía distinguir por el tono de la voz que era un hombre.

- bueno - escuche decir a alguien más, pero esta vez parecía ser una mujer. Mi intención sería atacarlos de noche mientras dormían.

Me alegé del lugar y me adentre en el bosque y volví a subirme en un árbol, ahí esperaría hasta que fuera de noche y los atacaría.

***
Después de dormir unas cuantas horas lo único que divisé fue oscuridad y unos cuantos rayos de luz lejos. Baje cuidadosamente del árbol y me dirigí nuevamente hacia la casa. Mire de nuevo por la ventana y se podía notar que las personas de dentro habían prendido unas velas. No se escuchaban ruidos, entonces me di cuenta de que este era mi momento, prepare la ballesta para lanzar una flecha en caso de emergencia, camine hacia la puerta y trate de evitar las latas posicionadas en el suelo, y cuando pise la madera de la puerta de la casa esta sonó mucho y escuche como abrían la puerta.

- Te mueves y te disparo- dijo la voz del hombre apuntándome con una pistola en la cabeza. Esa voz...era increíble... Lo había encontrado, era el... Esta vivo.

- como te atrevas a dispararme no te devolveré tu ballesta - dije seria. Escuche el sonido de la pistola bloquearse y esta calleándose al suelo. Yo lentamente me di vuelta. Mientras el me miraba, unas cuantas lagrimas salieron de sus ojos.

- ¿Daryl? ¿Que pasa? ¿Quien es?- preguntó la voz de la mujer, inmediatamente la reconocí era Beth.

- ¿Sara?- preguntó dudoso mi padre.

- ¿y quien mas si no?- dije riendo - el no lo pensó mas y me abrazo muy fuerte.

- ¿Sara?- preguntó Beth, se acerco a nosotros y se nos unió al abrazo.

***

- luego perdí el rastro de sus huellas y camine sin rumbo y aquí estoy- dije al terminar de contar todo lo sucedido hasta ahora.

- Que bueno que nos encontraste, Si te pasará algo te juro que no me lo perdonaría - dijo mi padre tapándose la cara con sus manos .

- lo importante es que estas bien y que estamos juntos- dijo Beth.

- Beth...- dije despacio- siento lo de Hershel.

- si...yo también lo siento- dijo ella bajando la cabeza- pero dejémonos de tristezas y vamos a dormir...estoy muy cansada.

***
Cuando me desperté me encontré con mi padre limpiando su ballesta, ya que esta estaba llena de sangre de caminantes.

- por fin te despertaste-dijo Beth acercándose a mi colchón -ven vamos a comer.

Luego de desayunar recorrimos el territorio para verificar que no hubiera nadie mas.
Y nos pasamos todo el día descansando y comiendo en ocaciones. Cuando me estaba a punto de dormir, mi amiga me llamo y dijo que la acompañara...

-Beth... ¿A donde me llevas?- le pregunte a mi amiga, ya que esta me había vendado.

- ya veras y te va a encantar- dijo ella. Se escucho el ruido de una puerta abriendoce- puedes quitarte la venda- dijo ella

Yo hice lo que me dijo y cuando me la quite me encontré con un enorme piano de cola

- y ¿eso?- dije dudosa

- un pajarito por ahí me contó que sabes cantar y si quieres yo toco y tu cantas- dijo sonriéndome

- hace mucho que no canto - dije seria- las únicas veces que cantaba era con mi madre... Pero ella ya no esta- dije con pena y recordándola

- pero toquemos por ella- dijo Beth sonriéndome nuevamente y sentandose para tocar el piano

- esta bien... Pero no recuerdo ninguna canción- dije mientras me sentaba al lado de Beth

- canta lo primero que venga a tu mente- dijo mientras tocaba algunas notas de piano

-Suspiros por el verano Luego compraremos...- cante

-Una cerveza para emborracharse-continuo Beth

-Nos recuesta remos en nuestro césped
Y estaremos bien-cante yo

Escuchamos unos pasos, me di vuelta y vi a mi padre mirándonos tocando y cantando.

-Sigan tocando - dijo él mientras se sentó en el suelo

Seguimos tocando pero un ruido nos distrajo... Eran las latas en la puerta principal, Había alguien afuera y los gruñidos se podían escuchar más fuertes