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hyesung depositó el tierno posillo de conejitos en el escritorio de su jefe como todos los días por la mañana, desde hace cinco meses, y apesar de eso su jefe aún no notaba quién era aquella anónima persona. bastante absurdo.

─ espero que le guste. ─ susurró sonriendo a la nada. analizó por última vez el escritorio y salió de la oficina en completo silencio evitando ser vista.

una fingida tos le hizo dar un saltito del susto.
─ ¿qué hacía en mi oficina, señorita jung? ─ inquirió elevando una ceja, mostrándose amenzante.

─ y-yo veía unos papeles señor jeon, lo lamento. ─ dijo alejándose de la puerta lentamente para luego hacerle una formal reverencia al mayor─ que tenga un lindo día.

y tan rápido como terminó la frase corrió a su lugar de trabajo completamente avergonzada.
ya no tenía cómo negarlo, debía ser fuerte y afrontar la realidad; su amor platónico la había descubierto y ahora era más que obvio.

mientras tanto, en la otra habitación, jungkook sonreía observando el pequeño obsequio en su mesa trabajo. amaba aquellas muestras de su hermosa y dulce secretaria, desde hace tres meses.

debía hablarle sobre sus sentimientos, especialmente ahora sabiendo que era mutuo.

─ señorita hyesung, venga a mi oficina, por favor. ─ pidió desde el teléfono.

bastaron sólo un par de minutos para que la mencionada estuviera sentada en el cómodo sillón que adornaba la habitación de su jefe.

─ uhm, señor jeon, ¿desea algo? ─ cuestionó esquivando la mirada del mayor con éxito. se sentía intimidada.

─ cariño, no me tientes; sé que sabes porqué estás aquí. ─ rió ligeramente sentándose en esquina del sofá─ y-

─ si piensa rechazarme ahorreselo, señor. lamento haber infringido su privacidad pero-

─ siento lo mismo que tú. ─ interrumpió bruscamente harto de escuchar esas innecesarias palabras─ me gustas  hyesung.

el ambiente se volvió cálido. el estómago de hye parecía tener un zoológico dentro y su corazón latía como loco. ¿había mejor sensación que ser correspondida?

─ podemos intentar algo, señor jeon.

jung rió. ─ háblame informalmente. hazlo. ─ pidió entusiasmado, y cómo no, si desde que hye trabaja en la empresa jeon nunca lo llamó por otro apodo que "señor jeon" o "jefe". putos nombres sin sentido.

─ podemos intentar algo, j-jungkook. ─ murmuró encogiéndose en su lugar con las mejillas rojas y la feliz mirada del mencionado sobre ella. 

─ lo haremos. tenlo por seguro.

holi 👁👅👁

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holi 👁👅👁

𝙞𝙣 𝙢𝙮 𝙝𝙚𝙖𝙙 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora